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Cada novedad en el frente israelo-palestino parece una buena noticia
para los detractores del siempre trabado proceso de paz. Ayer, el Consejo
Central de la Organización para la Liberación de Palestina
(OLP) ratificó la amenaza lanzada por Yasser Arafat de que “la
creación e instauración de un Estado palestino en los territorios
ocupados por Israel el 4 de junio de 1967 se hará efectiva el 13
de septiembre”. El premier israelí Ehud Barak contraatacó
con un anuncio tan unilateral como la advertencia palestina: si eso ocurre,
Israel responderá anexando por la fuerza los territorios palestinos
que aún estén en sus manos. En el ámbito interno, la
situación de Barak no es menos complicada. Después de ceder
días atrás al chantaje de su socio en el gobierno, el partido
religioso Shas, el premier lo hizo de nuevo: consiguió que el Knesset
(parlamento) aprobara un proyecto de ley para eximir a seminaristas judíos
ultraortodoxos del servicio militar. Mientras tanto, en Cisjordania y Gaza
siguen los enfrentamientos entre los palestinos y la policía israelí.El Knesset aprobó en una primera lectura –quedan otras dos votaciones-, por 52 votos a favor, 43 en contra y 7 abstenciones, el proyecto para regular el reclutamiento de las filas militares del país. Poco antes, Barak, ex jefe del ejército y activista en favor del reclutamiento de los ortodoxos, había hecho un llamado a los diputados para que votaran sí y evitaran de esa forma “causar una terrible división en el pueblo”. El proyecto de ley fue redactado en base al informe de una comisión presidida por el juez Tzeví Tal y establece que los ortodoxos estudiarán en sus seminarios hasta los 23 años; recién entonces podrán tomarse un año para decidir si siguen con esa actividad, cumplen “servicios civiles” o pasan un período de cuatro meses en las Fuerzas Armadas. Hasta ahora, este itinerario era una ley de facto, sólo aprobada por la costumbre. Así, Barak dio marcha atrás en su promesa de campaña de concretar el concepto de “una nación, un reclutamiento”, y reforzó a sus socios ultraortodoxos en el gobierno. El cambio de opinión amplió la sonrisa de los miembros del Shas, pero despertó la ira de sus socios laicos, especialmente del partido Meretz, que argumentó que el sistema obligará a la mayoría de los jóvenes judíos a defender a su país durante tres años con bajos salarios, mientras los ultraortodoxos estudian en seminarios financiados por el gobierno. “Barak olvidó sus principios y vendió a sus votantes”, denunció el ex paracaidista Etay Ben-Horin, de 22 años, quien junto a otros ex soldados cumplió ayer el sexto día de una huelga de hambre en protesta por ese proyecto de ley. Fronteras afuera, Israel presenció el encuentro entre líderes de la OLP, quienes, junto a Yasser Arafat, volvieron a declarar públicamente su decisión de tener un Estado palestino en los próximos meses. Ante el panorama de confrontación que esa determinación abriría, los miembros de la organización analizaron además eventuales planes para la defensa de la población. “Un Estado será proclamado y ello provocará un enfrentamiento con Israel. Para ello será necesario que nos unamos. Especialmente en torno a Hamas y Jihad Islámica, que deben constituir el núcleo de nuestras fuerzas en la próxima batalla”, declaró el ministro de Comunicación palestino Imad Al Faluji, antiguo dirigente de Hamas. La reacción del premier Ehud Barak fue la misma que la semana pasada ante la secretaria de Estado norteamericana, Madeleine Albright: “Israel advierte a los palestinos que ampliaría su jurisdicción a bloques de colonias y establecería una amplia zona de seguridad en el valle del Jordán si adoptaran medidas unilaterales”. A tono con el nivel de confrontación verbal entre dirigentes israelíes y palestinos, en los últimos días se produjeron nuevos enfrentamientos en los territorios ocupados de Gaza y Cisjordania. Ayer, después de que una patrulla militar israelí en el sur de la Franja de Gaza explotara, se produjo una ola de disparos que, según el ejército israelí, procedían de la localidad deRafaj, actualmente bajo el control de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).
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