Por Felipe Yapur
 Fueron llegando de a poco al Salón de Lectura del Senado. Era casi el mediodía. Después de una �cordial� reunión, el vicepresidente Carlos �Chacho� Alvarez y los titulares de los bloques anunciaron la firma de un documento donde acordaron ajustar y redimensionar la planta de empleados permanentes y transitorios de la Cámara alta. De este modo pareció que amanecía la tregua. Sin embargo, cada uno de los participantes sintió que su sector había triunfado. En el entorno de Alvarez creen que el objetivo está alcanzado ya que consiguieron �romper los códigos de la casa�. Para el PJ los derrotados son los radicales porque �se demostró que ellos no son mejores que nosotros�. En la bancada de la UCR también soplaban aires de triunfo: allí aseguran que la imagen de Alvarez quedó desgastada y lo desplazó del diálogo político. Pero el presidente Fernando de la Rúa parece no compartir esa idea ya que ayer negó que la imagen de Chacho se haya desgastado: �Lo veo más fortalecido que nunca�, dijo.
Sin duda, el acuerdo alcanzado por los presidentes de los bloques de la Cámara es importante. A pesar de las duras acusaciones que se cruzaron, todos terminaron reconociendo que hay que �racionalizar� administrativamente el Senado. De hecho se acordó conformar una Comisión de Racionalización que tendrá, entre otros, los siguiente objetivos:
 Implementar un control cruzado de los empleados entre la administración del cuerpo y los bloques, despachos y comisiones.
En un plazo de 30 días cada senador ajustará su personal a los cupos correspondientes y se dará de baja a los empleados de más que pudiera tener.
En 60 días la comisión definirá el número de personal que quedará.
Se implementará un programa de retiro voluntario.
Jubilación a los empleados que reúnan las condiciones.
Licitación para control electrónico del ingreso y egreso del personal.
Congelamiento de la planta permanente.
Pero el documento y las sonrisas para las fotos no amainaron la disputa que existe entre el vicepresidente y los senadores. El titular del bloque del PJ, Augusto Alasino, dijo que esto no significaba que se haya fumado �la pipa de la paz� con Alvarez, porque �nosotros nunca estuvimos en guerra�, señaló. Sin embargo, fuentes de ese bloque aseguraron que �con esto de los ñoquis a Chacho se le vació el cargador. Entonces, la próxima vez que nos ataque le sacamos la administración de la Cámara y se tendrá que quedar en la Rosada�. Un senador del PJ, que no participó del encuentro, hizo otro análisis. Para él no hubo ganadores y sólo un perdedor: la UCR. �Los radicales perdieron porque si se demostró que nosotros tenemos más empleados de lo permitido, ellos no son la excepción�, dijo, mientras largaba una ruidosa carcajada.
Alvarez también tuvo frases oficiales. Reconoció que �algunos senadores están enojados y con razón porque no tienen que ver con lo que antes vino pasando en la casa� y agregó que se manipuló políticamente la información sobre los empleados de la Cámara que dio a conocer. En su entorno la versión es diferente. Sostienen que a Alvarez no le molestó el ataque �conjunto� que recibió en la sesión del miércoles por haber difundido las listas. �Que esta gente me ataque no me perjudica. Al contrario, me diferencia de ellos�, dicen que dijo.
En el bloque radical optaron por el bajo perfil. Aunque pocos pueden disimular la molestia que les sigue causando la publicación de la nómina de empleados que hizo Alvarez. Eso sí, dicen que la maniobra perjudicó principalmente a Chacho porque la pelea con los senadores le significó la no participación en el diálogo político iniciado por el Gobierno y que le permitió a José Genoud convertirse en �el hombre del Presidente� en el Senado.
En la deliberación para acordar el plan de racionalización participaron a su vez el peronista Remo Constanzo, Genoud y Luis León por la UCR, elfrepasista Pedro Del Piero, y los provinciales Silvia Sapag, Roberto Ulloa y Pedro Villarroel (Frente Cívico de Catamarca), el secretario administrativo de la Cámara, Ricardo Mitre, y el secretario parlamentario, Mario Pontaquarto.
FESTEJO DEL BLOQUE DE LA ALIANZA CON DE LA RUA
Buena onda al compás de Shakira
Por F.Y.
Fue como un premio por la tarea cumplida. Se realizó el miércoles por la noche en el restaurante de hipermoda �Buenos Aires News�, ese donde el menemismo también solía festejar. Hasta allí llegaron algo más de 90 diputados de la Alianza, todos invitados sigilosamente �para evitar curiosos� por la gente del titular de la Cámara, Rafael Pascual. Disciplinados y rebeldes se sorprendieron cuando al final de la comida hizo su arribo Fernando de la Rúa. El Presidente aprovechó la oportunidad para justificar las medidas de ajuste que sirvieron, según él, para evitar �la cesación de pagos� y les anunció que �la mala onda está terminando�.
La idea de la cena era �confraternizar� luego de varios meses conflictivos. Es por ello que se decidió organizarse bajo un estricto secreto para evitar la presencia de testigos indeseados. Los colaboradores de Pascual invitaron uno por uno a los diputados. Los llamaron por teléfono y les enviaron mensajes por correo electrónico. A los que más les insistieron fue al grupo de legisladores rebeldes. Algunos de ellos aceptaron el convite rápidamente. Pero necesitaron varios llamados y otros tantos e-mail para convencer a Alicia Castro. Entre los que dijeron no estuvieron los socialistas Alfredo Bravo y Jorge Rivas y la radical Elisa Carrió. Nadie, según los organizadores, sabía de la participación del Presidente.
Los que se negaron, en su mayoría frepasistas, se quejaron por el lugar elegido. �Se genera un mensaje confuso. Por un lado se habla de austeridad y se organiza una cena justamente en ese restaurante. Es contradictorio.�
Pero los que llegaron hasta el local, ubicado frente al Planetario, saborearon fiambres del buffet froid y un infaltable pollo relleno. El clima era festivo, de buen humor. Cuando la comida se estaba acabando hizo su arribo el Presidente, quien fue recibido al son de una de las canciones más conocidas de Shakira, la famosa novia de su hijo Antonio. Hubo aplausos. De la Rúa saludó a todos y cuando llegó a la silla de la Castro le dijo con su mejor sonrisa: �Como le va, disidente�. La legisladora respondió con una sonrisa.
Poco después llegó el turno de los discursos. Pascual elogió la actividad de la Cámara que permitió avanzar con casi todos los proyectos del Ejecutivo. Darío Alessandro prefirió reivindicar el valor del disenso interno. Entonces llegó el turno del Presidente, quien volvió a sorprender a los comensales al sostener que:
�A mí me gustaría tener un gobierno socialista �dijo.
�Muy bien, Presidente �lo interrumpió Héctor Polino.
�Callate y seguí escuchando �respondió el radical Juan Pablo Baylac.
Entonces el Presidente continuó y pasó a detallar la razón por la que su gobierno no era socialista y debió aplicar el ajuste. �Hemos logrado incrementar la recaudación fiscal, las exportaciones y hasta estamos logrando que los concesionarios paguen los cánones�, anunció.
La cena se conoció en la Cámara baja durante la sesión de ayer. El rumor sirvió para que los diputados menemistas Carlos Alesandri, Omar Becerra y Teodoro Funes presentaran un pedido de informes para conocer el origen de los fondos. Rápidamente la gente de Pascual decidió responder la estocada: �El presidente de la Cámara hace saber que la cena fue pagada de su propio peculio�, dijo uno de los voceros de Pascual para apaciguar las críticas.
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