Por Mariana Carbajal
 Ante fuertes presiones de sectores conservadores, el jefe de Gobierno porteño, Enrique Olivera, promulgó ayer la ley de salud reproductiva, pero con la condición de que hoy la Legislatura le incluya un par de modificaciones para precisar aún más en el texto que los anticonceptivos que se entregarán en los hospitales públicos deben ser �no abortivos�. Olivera acordó los cambios en una reunión con legisladoras de la Alianza, quienes llevaron ayer la inquietud a las autoridades de los otros bloques y convinieron en tratar el proyecto sobre tablas en la sesión de esta tarde. En la práctica, las modificaciones no alterarán la implementación del programa que permitirá el acceso libre y gratuito a todos los métodos a la población �sin restricciones para los adolescentes�, a través de servicios en los hospitales públicos. En el territorio bonaerense, la historia es otra. La posibilidad de que la provincia tenga una norma similar �como impulsa la Alianza� podría fracasar. Según trascendió, senadores justicialistas estarían recibiendo presiones del gobierno de Carlos Ruckauf para trabar su tratamiento y, en caso de aprobarse, el mandatario la vetaría.
�Los cambios propuestos no alteran en nada el espíritu de la ley votada. De alguna forma, la perfeccionan en su redacción�, aseguró ayer la diputada Gabriela González Gass, presidenta del bloque radical. González Gass y la frepasista Clori Yelicic se reunieron con Olivera el lunes y el martes para llegar a un consenso. El jefe de Gobierno condicionaba la promulgación a la inmediata aprobación de los cambios, que son básicamente de carácter aclaratorio.
La ley 418, aprobada el 22 de junio en una maratónica sesión con 39 votos a favor y 13 en contra, señalaba en el inciso �C� del artículo séptimo que los métodos a prescribir �en todos los casos serán de carácter reversible, transitorio y aprobados por el Ministerio de Salud de la Nación, y por lo tanto no abortivos�. El artículo segundo del proyecto de ley de Olivera, que anoche se esperaba en la Legislatura, altera apenas su redacción. Dice que los anticonceptivos �en todos los casos serán de carácter reversible, transitorio, no abortivos, aprobados por el Ministerio de la Nación�.
La otra modificación complementa el artículo quinto referido a los destinatarios de la ley. Olivera quiere que quede bien aclarado que �en todos los casos se deberán respetar las creencias y los valores de las personas�. Para algunos, una obviedad.
Hubo un aspecto que las legisladoras de la Alianza no cedieron en la negociación. Olivera pretendía introducir la objeción de conciencia para los profesionales, un reclamo sostenido por los médicos vinculados con los sectores más conservadores de la Iglesia Católica. Como consideran �erróneamente� que el dispositivo intrauterino (DIU) es abortivo, presionaron en los últimos días para quedar liberados de colocarlo en los hospitales. Finalmente, el jefe de Gobierno aceptó el planteo de Yelicic, titular de la Comisión de Salud, y de González Gass. Las aliancistas consideran que no es necesaria su inclusión en esta norma debido a que está reglamentado en la ley de Ejercicio de la Medicina, que ampara a los profesionales de la salud a abstenerse de ciertas prácticas contrarias a sus creencias.
La norma entrará en vigencia una vez que sea publicada en el Boletín Oficial. Como objetivos generales establece �garantizar el acceso de varones y mujeres a la información y a las prestaciones, métodos y servicios necesarios para el ejercicio responsable de sus derechos sexuales y reproductivos� y �la atención integral durante el embarazo, parto y puerperio�.
La Alianza impulsa una normativa similar en la provincia de Buenos Aires. Aunque tiene mayoría en ambas Cámaras, la sanción podría trabarse. Según trascendió, el gobernador Ruckauf estaría dispuesto a vetarla y el radicalismo y el Frepaso no suman los dos tercios de los votos necesariospara revertir esa decisión. �Hay una voluntad manifiesta del justicialismo para no aprobarla. No podemos olvidar que Ruckauf era el presidente del Senado de la Nación cuando el PJ cajoneó hasta que perdió estado parlamentario el proyecto de ley de Salud Reproductiva que tenía media sanción de Diputados�, recordó la senadora provincial por la Alianza, Elisa Carca, en ese entonces diputada nacional.
UN DOCENTE DIJO QUE PASO UNA NOCHE EN UN BAUL
Un secuestro con puntos oscuros
Encerrado en el baúl de su propio Gol rojo, Hugo Quinteros, un maestro mendocino, viajó desde Córdoba a Santiago del Estero �con una escala en Tucumán desde donde llamó a su familia por un teléfono celular� aparentemente secuestrado por dos hombres que lo encañonaron y lo obligaron a meterse en el diminuto baúl. �Quedate tranquilo �le habrían dicho los secuestradores cuando al término de la odisea�, te dejamos con el auto y las llaves puestas, ya llegamos a donde queríamos llegar�, declaró el maestro a una radio cordobesa. �Estaba acalambrado después de haber pasado toda la noche en el baúl, hasta que salí, por el asiento trasero y comprobé que la llaves estaban puestas como me dijeron�, concluyó el maestro. En diálogo con Página/12 el comisario Eduardo Rodríguez, jefe de la División de Protección de las Personas, mostró sus dudas: �Es un hecho muy delicado, no le robaron nada y sólo tiene un golpe en la frente�.
Las vacaciones de invierno del maestro especial mendocino Hugo Quinteros, su esposa y sus tres hijos no siguieron la rutina de paseos de compras y mate amargo de todas las temporadas. Eran las 4 de la tarde cuando el docente, de unos 38 años, llevaba a su esposa y a su suegra a visitar unos parientes en la capital cordobesa, en Sabatini al 3300. Luego de saludarlos calurosamente los dejó en el negocio y siguió viaje con la intención de pasarlos a buscar más tarde. Pero apareció al otro día en el barrio Loreto, de la provincia de Santiago del Estero.
En las 20 horas que estuvo fuera de casa, su familia no tenía idea de qué era lo que podía haberle pasado. Hasta que, a las 9 de la noche sonó el teléfono de la casa de Viamonte al 700 donde viven los padres de Miguelina, esposa del maestro. Era el propio Quinteros, que habló con su suegra y sin rodeos, le dijo que estaba secuestrado y que apagaba el teléfono por si sonaba y los delincuentes se alarmaban. De ahí en más, y hasta el otro día a las 11 de la mañana su familia no supo más de él. La policía no descarta que sea un autosecuestro: hay demasiados datos sueltos. El comisario Eduardo Rodríguez dijo a Página/12 que �el tema del secuestro no termina de cerrar�. Se abrió una investigación por averiguación de antecedentes y se caratuló el hecho como privación ilegítima de la libertad y robo, aunque al Gol ni siquiera le falta el estéreo.
|
