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 El frío, la pobreza y la imprudencia siguen siendo una combinación fatal, cuyas consecuencias volvieron a sentirse ayer, con la muerte de cinco personas. Dos de ellas �una mujer y su hijo� fallecieron en una vivienda del barrio porteño de Almagro, por intoxicación con monóxido de carbono. Por la misma causa murieron dos hombres en Salta, que dejaron un brasero encendido en la habitación donde dormían. En esa provincia, otro hombre falleció por congelamiento. El frío, en tanto, no se rinde: el Servicio Metereológico Nacional anunció para mañana el ingreso de una nueva ola de aire polar, que afectará a todo el país. El domingo fue otro día para tiritar. En Buenos Aires se registró una mínima de 3 grados, a las 8.20, pero la sensación térmica descendió a 6 grados bajo cero, a las 9. La tragedia visitó esta vez el barrio de Almagro: una madre y su hijo murieron intoxicados al inhalar monóxido de carbono de una estufa o el calefón en mal estado que se encontraban encendidos, informó la policía. El hecho ocurrió en una vivienda ubicada en Aníbal Troilo al 900, donde la policía encontró los cadáveres de Ruth Fernández, de 50 años, y de su hijo José Bresila, de 23. La policía llegó al departamento alertada por la hermana de la mujer muerta, quien durante la mañana notó que algo raro pasaba porque en la casa nadie respondía a los llamados telefónicos. La mujer se dirigió al departamento y encontró a su hermana muerta en la cama y al hijo tirado en el baño. Los policías encontraron todas las puertas y ventanas cerradas, por lo que, se estima, ambos �habrían fallecido intoxicadas con el monóxido de carbono emanado por el mal funcionamiento de la estufa o el calefón que estaban encendidos�, informó la policía. En Salta, dos hombres fallecieron por la misma causa al dormirse con braseros encendidos. Las víctimas fueron identificadas como Teodoro Andrada, de 84 años, e Isidro Fajardo, de 61. En tanto, un indigente identificado como Félix Valdivieso murió congelado al dormirse a la intemperie, en la localidad salteña de Rosario de Lerma. De este modo, el total de muertos en la provincia de Salta debido a las bajas temperaturas o a intoxicación es de siete personas, según confirmó la policía local. En la Capital Federal, las estadísticas de la Policía Federal indican que los muertos intoxicados por monóxido de carbono ascienden a 14 en lo que va del año, y a 208 desde 1994. Calefones en los baños o en las cocinas, estufas que no son de tiro baleanceado en las habitaciones o el uso de braseros en las casas más humildes se convierten en un peligro mortal los días de invierno, cuando la gente intenta calefaccionarse como puede. El monóxido de carbono es un gas producido por cualquier tipo de combustión que causa síntomas físicos como dolores de cabeza, náuseas y vómitos. Después sobreviene la somnolencia, el desmayo, el coma y la muerte.
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