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Respuesta de la justicia

El juez de la Cámara Federal de Bahía Blanca Luis Alberto Cotter denunció la intromisión del Poder Ejecutivo en las causas por la verdad.

El juez Cotter reclamó una Justicia independiente.
�Sin doble mensaje ni alquimias jurídicas.�


Por Horacio Verbitsky

t.gif (862 bytes) El juez de la Cámara Federal de Bahía Blanca Luis Alberto Cotter calificó como intromisión del Poder Ejecutivo en el proceso judicial la visita del secretario general del Ejército, Eduardo Alfonso a los militares detenidos por negarse a declarar en el juicio por la verdad y abogó en favor de la independencia de la Justicia respecto de las decisiones políticas, sin dobles mensajes ni alquimias jurídicas. Durante una entrevista en el programa de televisión �Día D�, Cotter sostuvo que la Cámara Nacional de Casación Penal era incompetente para entender en esas causas y citó en apoyo de esa posición el tratado La Casación Penal, del ahora presidente Fernando de la Rúa. 
La visita de Alfonso a los militares detenidos en la delegación de la Policía Federal en Bahía Blanca fue parte de la ofensiva castrense para paralizar los juicios, que se concretó cuando la Corte Suprema de Justicia ordenó la remisión de las 15.000 fojas del expediente a la Cámara Nacional de Casación Penal. Cotter dijo que ello no era necesario, porque la Cámara Federal de Bahía Blanca ya había enviado un juego completo de fotocopias a la Cámara de Casación. En lo que a todas luces constituyó una acción concertada, ese tribunal también dispuso la libertad de los suboficiales Santiago Cruciani (a) El Tío y Armando Barrera, (a) El Abuelo, sindicados por los sobrevivientes del campo clandestino de concentración La Escuelita como torturadores. �Un general de la Nación es un empleado público, lo mismo que un juez de Cámara, y no puede actuar al margen del organismo al que pertenece, que en su caso es el Ejército. Entiendo que vino por órdenes o instrucciones de su jefe inmediato, que es el general Ricardo Brinzoni. Pero el Ejército no es una entidad autónoma del Poder Ejecutivo. Hay una cadena de mandos que no se ha roto, y que lleva al ministro de Defensa y al jefe del Poder Ejecutivo. Luego de la visita de Alfonso pensé que habría alguna recriminación por parte del comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, que es el presidente de la Nación, y no la hubo. De ello puedo deducir que hay un consentimiento expreso o implícito a la visita de Alfonso, cuyo simbolismo fue traer una palabra de apoyo a alguien acusado de un delito y que estaba arrestado procesalmente por negarse a colaborar con la Justicia�, dijo el magistrado. Cotter añadió que el respaldo institucional a quienes se negaron a declarar y de ese modo obstruyeron una investigación �es una intromisión en el libre juego de la investigación de la Justicia�.
Durante 1999, Cotter ejerció la presidencia rotativa de la Cámara Federal de Bahía Blanca. En cuanto se produjo el cambio en el gobierno nacional y en la conducción del Ejército, Brinzoni �me prometió toda la ayuda, sin reservas, para llevar adelante los juicios�. Dijo que el militar también le preguntó cómo creía que se resolvería el tema. �Mi respuesta fue la que he dado siempre: a través de la Justicia. Dejarla actuar sin interferencias es el único camino para llegar a la verdad de lo ocurrido y para canalizar las aspiraciones de la ciudadanía�. 
Ante una pregunta sobre la decisión de la Corte Suprema de ordenar la remisión del expediente a la Cámara de Casación, Cotter dijo que equivalía a sacar la causa de sus jueces naturales y citó el tratado en el que De la Rúa sostiene que �en este tipo de juicios en los que las Cámaras Federales entienden por avocamiento, la Cámara de Casación es manifiestamente incompetente�. Se trata de las causas por violaciones a los derechos humanos iniciadas en 1984 por la justicia militar y que las Cámaras Federales continuaron cuando el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas declaró que todas las órdenes de la guerra sucia habían sido inobjetables, en forma y fondo, y que todos los testimonios provenían del enemigo. Según Cotter �si uno supusiera que el retiro de las actuaciones originales de la Cámara Federal dispuesto por la Corte tuvo su origen en presiones del Poder Ejecutivo, cosa que no me consta, esto lesionaríagravemente la independencia de la Justicia. La independencia del Poder Judicial es un factor importantísimo para que una sociedad se pueda desarrollar civilizadamente y asegurar los derechos y garantías de los ciudadanos. Ese es el motor que hace avanzar la historia, las ciencias y da mejor calidad de vida a todos. Necesitamos imperiosamente tener un Poder Judicial independiente, pero independiente en serio, sin dobles mensajes, sin alquimias jurídicas sobre normas que son claras y aplicarlas sea quien sea el afectado�.


opinion
Por Manuel Gaggero *

Un hombre, una generación

El 19 de julio de 1976 un grupo operativo de las llamadas �fuerzas conjuntas�, encabezado por un capitán de apellido Leonetti e integrado por oficiales del Batallón de Inteligencia 601 del Ejército irrumpió en un departamento ubicado en Villa Martelli en la provincia de Buenos Aires en el que se encontraban los máximos dirigentes del Partido Revolucionario de los Trabajadores. Como consecuencia del operativo resultó muerto Benito Urteaga, gravemente herido Mario Roberto Santucho y �detenidos-desaparecidos�, sus acompañantes Liliana Delfino, compañera de este último, Domingo Menna y Ana Lanzillotto de Menna. Los titulares de los diarios de la época presentaron el hecho como uno �de los triunfos más importantes de las Fuerzas Armadas en la lucha contra la �subversión marxista��. En los días posteriores un manto de silencio cubrió el acontecimiento y el gobierno se negó a dar explicación alguna sobre éste, al mismo tiempo que se negaba a entregar los cadáveres de los líderes guerrilleros �abatidos�.
Recién 20 años más tarde se pudo empezar a reconstruir la verdad, confirmándose, por testimonios de ex represores, que los dirigentes del P.R.T.-E.R.P. fueron inhumados en la unidad militar de Campo de Mayo y que sus acompañantes tuvieron el mismo destino que los miles de detenidos en los campos de exterminio existentes en esta base castrense. Conocí personalmente a �Robi� �como lo llamaban sus amigos y familiares�, en enero de 1974. Le habíamos pedido una reunión, con otros compañeros del peronismo revolucionario, para hacerle conocer nuestras diferencias con el intento de copamiento a la unidad militar de Azul, protagonizado días antes por el Ejército Revolucionario del Pueblo. Nos escuchó con atención, respondió con firmeza a cada uno de nuestros planteos, reiterando la decisión de su organización de seguir hostigando a las Fuerzas Armadas para evitar que éstas, como ocurrió finalmente dos años más tarde, se hicieran nuevamente con el poder, poniendo en marcha un proyecto de país dirigido a cercenar los derechos de los trabajadores, concentrar la riqueza en pocas manos y desnacionalizar la economía; privatizando las empresas públicas. Lo seguí viendo en otras oportunidades, durante ese año y el siguiente.
Mario Roberto había nacido en Santiago del Estero, en una familia de gran sensibilidad política, social y cultural. Su padre fue diputado radical en la Legislatura provincial. Desde que comenzó a militar en el movimiento estudiantil consideró, recuperando los aportes que al marxismo había hecho el peruano Carlos Mariátegui, que los procesos de transformación en Latinoamérica debían contener una mirada a la etnicidad. Con esa concepción funda el Frente Revolucionario Indoamericano Popular. Luego al conformar el P.R.T. reafirma el papel directriz que le cabe a la clase obrera en las luchas por la liberación en la Argentina y en todo el continente.
Al delinear una estrategia para la toma del poder, hacia finales de la década del 60 interpela seriamente a la �izquierda clásica�, paralizada en un largo debate en torno del carácter de la Revolución y de las vías o los caminos a recorrer para lograrla, e impugna al �verbalismo revolucionario� de las corrientes que se reducen al mero discurso.
No sé si llegaron a conocerse con el Che, pero, sin duda, tenían mucho en común. La coherencia entre teoría y praxis, nada común entre la dirigencia política de estos días; la decisión de dar la vida por una sociedad distinta y un �hombre nuevo� y la fuerza y el magnetismo que irradiaban, los convirtió en los �imprescindibles� de que habla Bertolt Brecht.
Paradigma de una generación que se planteó tomar �el cielo con sus manos�, y transformar el reino de la necesidad, en reino de la libertad. Santucho forma parte de esa historia no oficial y no escrita en la que se inscriben las luchas y los sueños de miles de luchadores populares.

* Abogado, docente. Integrante de la Mesa Nacional del Frente de la Resistencia.

 

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