El teatro Regina, cerca del final   Cerraría a fin de mes, por problemas financieros. La sala pertenece a la Casa del Teatro, y de su explotación dependen casi 40 artistas pensionados.
El teatro Regina tiene 62 años

Por Silvina Friera

 El director inglés Peter Brook pronosticó en 1961, sin proponérselo, parte del mapa actual del teatro porteño: �El mundo está tan lleno de actividades y realizaciones(...) que ya no se puede creer que una empresa artística, cualquiera sea su tipo, tenga carácter de necesidad�. Una vez más la �predicción� de Brook se cobrará una víctima: el teatro Regina, un histórico de la calle Santa Fe, cerraría a fin de mes. �No estamos arrepentidos de haber administrado la sala. A pesar de pertenecer a la Casa del Teatro y de tener mucha historia, no recibe ningún tipo de subsidio. Hemos hecho esfuerzos sobrehumanos para quedarnos todo este tiempo. Tuvimos espectáculos de buen nivel, pero nunca conseguimos un éxito que nos permitiera soportar los gastos de mantenimiento�, explica a Página/12 el actor Ricardo Darín, que junto con José Luis Mazza, formó la productora teatral El Tenor SRL y reabrió el Regina hace dos años. 
�Los costos no cierran, el teatro se está manteniendo a pérdida. Los números indican que no podemos seguir adelante. En realidad, estamos evaluando la posibilidad de alejarnos desde hace tiempo. No podemos digerir el abandono de la sala, porque sabemos que no va a ser fácil que la Casa del Teatro encuentre otros administradores�, cuenta Darín. La Casa del Teatro tiene actualmente 40 pensionados, que dependen casi exclusivamente del ingreso del alquiler de la sala: U$ 6500. 
Ya en marzo pasado el Regina estuvo a punto de cerrar y el multifacético Lino Patalano intentó salvar lo que él define �mi universidad en el mundo del espectáculo�, con la producción de Corpiñeras, pero el proyecto no pudo revertir la situación. Patalano tiene una relación afectiva con este teatro. En 1964 el empresario, manager y productor dio allí como cadete a los 19 años sus primeros pasos en el ambiente. Fue asistente de Luis Mottura, hizo boletería y el barrido de la sala, hasta alcanzar la secretaría general y la gerencia de personal. �El Regina fue mi universidad. El corazón del espectáculo porteño latía en esa sala. Sin apoyo oficial, todo recae en el esfuerzo privado para mantener en pie un teatro. Es increíble que en este país no exista una ley de mecenazgo, como en otras partes, en donde los inversores del campo cultural tienen deducciones en los impuestos. Acá, en lugar de jugar a la ruleta rusa, los privados jugamos al teatro�, se queja Patalano. 
El pasado y el presente del Regina está vinculado con la Casa del Teatro. Por iniciativa de Regina Pacini, esposa del ex presidente de la Nación, Marcelo T. de Alvear, se creó un hogar para la gente de teatro que se encontrara desamparada. Fue inaugurado el 4 de enero de 1938. Pocos meses después, el 25 de julio de 1938, se abrió la sala teatral. En 1944 realizó una temporada de 3 meses la actriz Madame Falconetti. En 1952, el grupo independiente La Farsa se hizo cargo del teatro. Representaron obras nacionales como Dos brasas, de Samuel Eichelbaum, que obtuvo varios premios. �Mientras el Di Tella era la vanguardia, el teatro Regina era el paso a lo profesional�, dice Patalano. Federico Luppi debutó como actor en esa sala, con la obra Luv. La recordada Niní Marshall programó 9 funciones con Se nos fue redepente y terminó haciendo 1500. 
�El teatro debería tener cierto tipo de consideración. Se presume que debería ser una actividad lucrativa, pero es tan �poco comercial� que merecería un tratamiento especial. A la clase política de nuestro país no le interesa mantener la actividad teatral.� El actor confiesa también que apostó todas sus fichas a una programación alternativa: El submarino, El amateur, El último ángel y Corpiñeras. �No queríamos una cartelera basada en figurones sino en buenos materiales. Tuvimos oportunidades de aceptar que el nivel de la producción del teatro fuera de otras características y no lo aceptamos. El teatro pasa por un momento difícil. No es lo mismo explotar 200 metros cuadrados de un shopping que un teatro�, razona. 

PRINCIPAL