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RAUL
MONETA PIDIO PERDON POR TV Y NO TANTO EN UNA REVISTA
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Por Susana Viau 
"Quiero aprovechar esta oportunidad para decirle a cualquier persona
que por la razón que sea se haya sentido molesta, afectada, agraviada,
ofendida por mis palabras que me disculpen porque no ha sido para nada mi
intención. Pido disculpas, como debe ser en la vida." Con menos
ínfulas que en su presentación mendocina, ahora desde el canal
estatal y siempre de la mano del periodista Mariano Longobardi, Raúl
Moneta hizo su mea culpa por las expresiones discriminatorias vertidas una
semana antes. Era un episodio más en la campaña de imagen del banquero, pero reforzó la incipiente polémica que amenazaba con penetrar a los mismos medios de comunicación. La discusión estalló en Mendoza y se trasladó a la prensa nacional. Quienes fueron señalados como colaboradores de esa estrategia salieron a dar explicaciones. "Soy un profesional", fue la enigmática interpretación de Longobardi. Rolando Graña, guionista y autor de un video sutilmente complaciente, debió despegar a la productora de Mario Pergolini, aclarando que "fue un trabajo personal". Moneta, entre tanto, volvía por sus fueros en el último bloque de "Fuego Cruzado" al denunciar, inquisitorial, la supuesta debilidad del juez Luis Leiva por las mujeres. Los diarios y revistas de Mendoza no desaprovecharon el material suministrado por el banquero en su peregrinaje por los canales. El diario Los Andes descubrió, por ejemplo, que las fotos de una parcela adquirida por el juez Leiva y que fueran exhibidas por Moneta en el programa de Canal 7, son las mismas que difunde la página web Mendoza Denuncia. "El problema --señala el periódico-- es que Moneta juró no tener nada que ver con esa asociación que viene agraviando a la justicia federal mendocina y a todos los que lo denunciaron." Los Andes recogió, además, algunas de las declaraciones formuladas en el mismo programa por el diputado del Partido Demócrata Gustavo Gutiérrez, que concluyó su participación en el programa de Longobardi con una frase de inusual dureza: "(Moneta) Puede que no sea el dueño de nada y sea un testaferro. Tal vez por eso da la cara, para no terminar en una zanja por haber traicionado a sus jefes en el exterior". Moneta, a su turno, descalificó la intervención de Gutiérrez con un concluyente "no sabe nada de bancos". El legislador declaró más tarde a Los Andes: "Quizás no sé nada de bancos, pero sé sobre el Banco Mendoza. Pero ese señor no sabe nada de bancos porque es un prestamista". El Sol, un semanario mendocino, se hizo un festín con el video de Graña y buscó la lengua de los integrantes de Cuatro Cabezas (productora del programa Punto.doc, cuyos rostros son Graña y Daniel Tognetti). "Los integrantes de la productora --cuenta El Sol-- se agarraban la cabeza y se preguntaban cómo podía ser que los dejara pegados." "Por favor --dicen que pidieron--, poné claro que ni Cuatro Cabezas ni Punto.doc tienen nada que ver con eso." En Buenos Aires, todo había comenzado con una gaseosa entrevista publicada pudorosamente en la sección Enfoques de La Nación. Urgente, una de las revistas más lujosas del mercado y caracterizada por un contenido de dudoso origen, le abrió a Moneta dos páginas para que expusiera su via crucis judicial. Por fin, ayer por la noche el semanario Noticias arrimó su micrófono al financista. Parapetados detrás de preguntas que presumen de glamour, se hilvanan los odios, fantasmas y obsesiones del ex banquero. Pero la cabra tira al monte; el incorregible Raúl Juan Pedro Moneta, abogado y escribano, criador de caballos y financista, luego de los pedidos de perdón, insiste: "Yo no tengo la culpa de que los que me difaman sean judíos".
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