El jefe de la Policía Bonaerense, Eduardo Martínez, cumplió ayer a la tarde en forma personal con la tarea de acarrear a seis de sus efectivos -un comisario, un oficial y cuatro suboficiales� hasta la oficina de un fiscal, donde fueron detenidos. Los policías entregaron sus armas y quedaron tras las rejas en el partido de La Matanza, acusados de coimear varias veces al dueño de una bailanta a cambio de la tranquilidad de los habitués de su boliche. �Era una extorsión que había sufrido de varios agentes policiales durante mucho tiempo. Le pedían dinero prometiéndole que de esa manera no harían procedimientos en el local, y así no perjudicarían su negocio�, le explicó a Página/12 Osvaldo Dameno, subsecretario de la Policía Judicial, que depende de la Procuración General de la Corte Bonaerense. Ayer, la coima �filmada con una cámara oculta por el empresario bailantero� fue tema de la reunión del Gabinete del gobernador Carlos Ruckauf. El local, una disco chica al lado de los gigantes del ramo, está ubicado en Isidro Casanova y, según fuentes policiales, tendría el nostálgico y rockero nombre de la banda Vox Dei. Su dueño �de quien se mantiene la identidad reservada�, cansado de las �cobranzas de la policía de varias reparticiones�, tomó contacto con el equipo del programa �Telenoche Investiga� y colaboró en la grabación camuflada de los policías que le pedían dinero. Esas filmaciones fueron presentadas ante el fiscal de instrucción de La Matanza Claudio Polero, quien convocó para investigar a un equipo de la Policía Judicial. Uno de los periodistas del programa también se entrevistó, grabando con una cámara oculta, con un cabo de la Bonaerense, al que le entregó 50 pesos por protección. En esa filmación, el falso bailantero le preguntó al policía por las otras dependencias a las que tendría que sobornar a cambio de tranquilidad. Y, según el relato de una fuente policial, el hombre de uniforme le recitó casi todas las dependencias de la zona con un contacto en cada una para que repita con ellos la operación que acababa de cerrar con él. �En Narcotráfico con tal, en la comisaría con tal, en el Comando con tal, en la DDI con tal�, le habría dicho el hombre. Así, anoche, tras las detenciones amistosas de los seis policías entregados por Martínez, la Justicia allanaba una larga lista de reparticiones en La Matanza. Buscaba los registros de entrada y salida de detenidos y los registros de contraventores. El caso de corrupción llegó a la Policía Bonaerense en su etapa final, cuando estaban a punto de ser realizados los procedimientos y las detenciones de los imputados. Y asimismo llegó a los oídos del gobierno provincial. En la reunión de Gabinete de ayer a la tarde, el gobernador Ruckauf recibió un informe del tema, junto al vicegobernador Felipe Solá, de boca del propio ministro de Seguridad, Orestes Verón. Una fuente de gobierno, citada por la agencia Télam, reveló que el ministro precisó que lo único que había sido grabado por las cámaras ocultas �había sido un cabo pidiendo entre 100 y 200 pesos por custodiar una bailanta�. �A partir de ahí se reconstruyó toda la cadena de mando hasta llegar a un comisario�, dijo la misma fuente. Tal cual: el comisario, de apellido Camarga, era el titular de una seccional de Isidro Casanova. No se había informado anoche sobre la procedencia del oficial, de apellido Martínez, ni la de los cuatro suboficiales presos. La investigación de la Policía Judicial junto al equipo de �Telenoche Investiga� terminó con el aval oficial del Ministerio de Seguridad. Tras la reunión en la que Verón informó sobre las coimas, el jefe de la policía, Martínez, fue encomendado para que entregase personalmente a los implicados. Dameno, subsecretario de la Policía Judicial, destacó el �apoyo y colaboración� prestados por el jefe de la fuerza y por el ministro de Seguridad en las detenciones. Por su lado, Ruckauf aprovechó la conferencia de prensa que dio por otro tema para lanzar una fraseacorde con el momento: �El gobernador �dijo un tercera persona futbolera- va a ser implacable en la lucha contra la corrupción�.
EL PRESIDENTE DEL CASINO FLOTANTE, CERCA DE DECLARAR COMO IMPUTADO Por Alejandra Dandan El barco casino está en jaque. Mientras los empresarios anuncian el traslado definitivo del buque y la inauguración de una base terrestre espectacular, la Justicia avanza en dirección contraria. Página/12 pudo saber que el fuero penal económico ordenaría la indagatoria como imputado al presidente de Casino Buenos Aires. De este modo, se daría lugar a la requisitoria de la fiscalía que pidió la citación de Antonio Sánchez Uroz, titular de la empresa, como sospechoso de la presunta maniobra de contrabando que logró �burlar� los controles aduaneros sobre el barco.
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