Por Felipe Yapur
 La oposición no quiso y el oficialismo se supone que quiso pero no pudo.
El bloque de diputados de la Alianza fue impotente para conseguir quórum porque no sumó a los partidos provinciales y porque no encolumnó a unos 40 radicales que se negaron a participar de la sesión. Por distintos caminos ninguno tuvo la voluntad política suficiente como para votar la ley que revisará la situación jurídica de los detenidos por el compamiento del cuartel de La Tablada en 1989, que cuenta con el visto bueno del Gobierno. Ahora habrá que esperar, al menos, una semana más.
El proyecto que pretendía aprobar la Alianza permite, a los que violaron la Ley de Defensa de la Democracia, una revisión de sus condenas, tal como aconsejó la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). La Alianza asegura que el proyecto impide la libertad de los detenidos, pero el PJ y varios radicales consideran que, como consecuencia del proyecto oficial, los jueces le reconocerán el mecanismo de �dos por uno� y serán excarcelados. De todas formas, la razón que el PJ esgrimió para no participar de la sesión estuvo enmarcada en su pelea contra el presidente del cuerpo, Rafael Pascual, por el control sobre los gastos que éste implementó y por el fallido aumento encubierto de dinero que disponen los bloques �que implicaban unos mil pesos por cada diputado�, y que se frustró cuando trascendió a la prensa y, sobre todo, cuando Pascual escuchó las quejas de la mesa de conducción del bloque del Frepaso.
En la bancada oficialista campeaba el malhumor respecto de este punto, que crecía cuando se acercaba el momento de votar la ley para los presos de La Tablada. Esto se notaba, según comentó un diputado del Frepaso, entre los diputados de la UCR: �Se produjo una rotación en la disidencia. Esta vez los que se rebelaron fueron los radicales y lo hicieron contra una ley que traía el visto bueno del Presidente�, se quejó un frepasista.
En realidad no fue un buena jornada la que vivió ayer el Congreso y que hacía dudar de la posibilidad de que la sesión se concretara. Desde las 11 de la mañana la Asociación del Personal Legislativo (APL) realizó su paro y movilización en protesta por el recorte salarial del 12 por ciento (ver recuadro aparte).
Por la movilización muchos de los diputados se ausentaron durante casi todo el día de sus despachos. A pesar de ello, fuentes de la Alianza como del PJ coincidían en señalar que habían acordado postergar el comienzo de la sesión hasta la culminación de la protesta de APL.
A las 16 el paro terminó pero no las dudas. Crecía la certeza acerca de la caída de la sesión. Por un lado, voceros de la Alianza aseguraban que había una buena parte de los diputados de las provincias que intentaban el fracaso de la sesión porque �no querían perder los vuelos� (de regreso a sus provincias para el fin de semana largo). En la vereda del PJ juraban que estaban dispuestos a debatir, pero también recordaban que votarían en contra de la ley y que presentarían un proyecto para derogar el descuento a los salarios de los trabajadores del Congreso.
La primera señal negativa sobre el futuro de la sesión se produjo cuando la reunión de labor parlamentaria, donde los jefes de bloque acuerdan el orden del día, no comenzaba. El tiempo transcurría pero parecía que a pocos le preocupaba. Mientras el presidente de Cámara, Rafael Pascual departía con un par de diputados aliancistas, unos cuarenta diputados del PJ, con Humberto Roggero a la cabeza, ingresaban en el recinto y se sentaban en sus bancas. Minutos más tarde, el dato llegó a oídos del vicepresidente del cuerpo, Juan Pablo Cafiero, quien raudo informó a Pascual de lo que sucedía. Este ordenó convocar a labor parlamentaria y pidió que se envíe el mensaje de bajar al recinto por medio de las radiollamadas a todos los miembros del bloque oficialista. Pero era demasiado tarde, había transcurrido poco más de media hora, tiempo suficiente para que los justicialistas se pararan frente a las cámaras deTV para quejarse. Roggero gritaba: �Nosotros no somos sus empleados� y consideraba una burla la demora del inicio de la sesión.
Mientras tanto, en el recinto había frepasistas desconcertados con lo que estaba sucediendo y, sobre todo, por la demora de sus colegas de la UCR. Pascual intentó sesionar. Durante unos pocos minutos sonó la chicharra que convocó sólo a 97 diputados. Diez pertenecían al cavallismo y el resto a partidos provinciales. Pascual no tuvo más remedio que levantar la sesión. A pocos metros, Luis Brandoni gritaba ofuscado a Mario Negri y Jesús Rodríguez: �¿Pero cómo es posible que no podamos hacer sentar a los nuestros en las bancas? ¿A nadie se le ocurrió tomar lista y llamarlos?�. El diputado y actor no obtuvo respuesta.
En tanto, en el despacho de Pascual los familiares de los presos se reunían con autoridades del bloque. La justificación del fracaso incluyó la maniobra del justicialismo, pero también dijeron que �la Alianza no tuvo la capacidad de retener a los radicales y votar esta ley�. Para saber si recuperarán la capacidad perdida habrá que esperar una semana. Habrá que ver qué hacen, en ese lapso, los presos de La Tablada.
| El paro que no para
Los empleados de la Cámara de Diputados cumplieron con el paro de actividades de cinco horas en contra del descuento salarial del 12 por ciento, que las autoridades aplican desde julio a los trabajadores con sueldos superiores a los mil pesos. Ricardo Sablich, el titular de la Asociación del Personal Legislativo (APL), advirtió que �el accionar gremial se va a profundizar hasta paralizar el Congreso�. El gremio anunciará el lunes próximo nuevas medidas de fuerza, entre las que figuran trabajar a reglamento y un paro general para el próximo jueves, que es cuando sesiona la Cámara de Diputados. |
| La vigilia de los presos
El fracaso por segunda vez de la sesión donde iba a tratarse la ley que revisará la situación jurídica de los presos por el ataque al regimiento de La Tablada generó entre ellos y sus familiares �indignación� pero advirtieron que tomarán una determinación en los próximos días en referencia a la posibilidad a que retomen la huelga de hambre. El 13 de julio los detenidos levantaron la huelga de 46 luego de que diputados de la Alianza se comprometieron a debatir la norma una vez que culmine el receso invernal de quince días. Ayer vencía el plazo y los diputados no pudieron cumplir con su compromiso.
El vocero del Movimiento Todos por la Patria, Adrián Wintemberg, reconoció que �existe una gran indignación en los presos y sus familiares porque los diputados no cumplieron y en los próximos días tomarán una determinación al respecto�. Dijo además que esperaba que �sólo se trate de una desinteligencia�. Por otro lado, el retiro del bloque del PJ del recinto antes del inicio de la sesión fue calificado por Wintemberg como �una vergüenza� y agregó que �tal vez mañana o el fin de semana los presos, que están evaluando la situación, darán a conocer su posición y la determinación que tomarán al respecto�. |
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