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LLACH SALIO AL CRUCE DE LOS DIRIGENTES DE CTERA
El ministro tiene una carta

El ministro calificó el paro anunciado por los maestros como �político� y amenazó con mostrar una carta del gremio para demostrar que el rechazo total al Pacto Federal no es tan total.

El ministro Juan Llach y la dirigente docente Marta Maffei incrementaron sus desavenencias.


Por Laura Vales

t.gif (862 bytes) Después de tomar nota de los cuestionamientos a su gestión, Juan Llach salió al cruce de la Ctera. Entre críticas al paro convocado para el 9 de agosto ��es netamente político�, afirmó�, el ministro de Educación reprochó a los dirigentes del gremio docente �hacer declaraciones altisonantes� para los medios, muy distintas de los planteos que los mismos dirigentes le formularon a puertas cerradas en su despacho. Llach amenazó incluso con dar a conocer la carta que la Ctera le envió el jueves pasado para demostrar �a la opinión pública� que el �rechazo total y unánime� al Pacto Federal Educativo manifestado por el gremio docente no es tan total. Según el ministro, él sólo recibió �una serie de consideraciones muy constructivas, que no tocan ningún aspecto esencial� de la política educativa.
El miércoles pasado, el plenario de delegados de la Ctera advirtió que lanzará un plan de lucha para oponerse a la firma del Pacto Federal impulsado por Llach, que intenta fijar el camino a seguir con la Educación en los próximos siete años. Hubo acusaciones fuertes: el gremio calificó las ideas de Llach como �la continuidad de las políticas del menemismo, y aun su profundización�. Y planteó que encubren una �avanzada privatizadora� sobre las escuelas públicas.
El borrador del Pacto propuesto por Llach ya tuvo cuatro modificaciones. En su primera versión, proponía que las escuelas recibieran fondos de acuerdo con su cantidad de alumnos y atar los sueldos de los maestros a su capacidad. Cuando lo presentó ante el Consejo Federal de Educación fue tan cuestionado por los propios diputados de la Alianza �que señalaron que tales medidas sólo aumentarán la desigualdad� que debió dar marcha atrás en varios puntos, previo pedido de De la Rúa y Chacho Alvarez. 
El cuestionamiento principal de los docentes es que cada vez se invierte menos en la educación. Sostienen que la inversión ya bajó este año y que del borrador del Pacto se desprende que la situación va a empeorar. También se oponen a que se modifiquen unilateralmente sus condiciones de trabajo. Y hace dos días, cuando dieron a conocer sus prevenciones, anunciaron también que irán al paro el 9 de agosto en respaldo a la marcha de la CTA. 
La medida de fuerza �que se cumplirá sólo en la Capital y la provincia de Buenos Aires, pero tuvo el respaldo de los secretarios generales de Ctera de todo el país� fue considerada �lamentable� por el ministro. �Me sorprende mucho esta actitud del paro por parte de ciertos sectores de la dirigencia gremial�, dijo Llach tras considerar que está motivada por �razones netamente políticas�. También aseguró su optimismo en llegar a un acuerdo sobre el Pacto Federal dentro de 15 días, cuando se reunirá con todos los ministros de Educación del país para acordar el texto definitivo. 
Su intención es firmarlo el 11 de setiembre con un acto en San Juan, pero los docentes sostienen que, si no lo modifica, usarán su día del maestro para marchar a esa provincia y dejar sentado el rechazo con una manifestación de carácter nacional. 
Todo indica que antes de esa fecha, Llach deberá sortear nuevas observaciones. Los ministros de las provincias gobernadas por el PJ se reunirán la semana que viene para fijar una postura común sobre el tema. José Octavio Bordón ya anticipó algunas de las críticas que formulará la provincia de Buenos Aires. 
La principal está centrada en los fondos para financiar la reforma educativa: Llach impulsa la creación de un fondo �bautizado como Fondo Sarmiento�, que recibirá aportes de la Nación y de las provincias, y al que quiere sumar también el actual Fondo de Incentivo Docente y un porcentaje del aumento en la recaudación. Para Bordón, Llach contabiliza el dinero del Fondo de Incentivo Docente como si se tratara de recursosnuevos, es decir generando el espejismo de mostrar más fondos donde no los hay.

 


 

SIGUE EL PARO EN EL BUENOS AIRES Y EL CARLOS PELLEGRINI
�Hasta que nos reciba Shuberoff�

Los docentes del Colegio Nacional Buenos Aires y de la escuela de Comercio Carlos Pellegrini resolvieron ayer continuar en asamblea permanente y sin dictar clases hasta que las autoridades de la Universidad de Buenos Aires (UBA) los reciban y escuchen sus reclamos. Los profesores �en lucha desde el lunes pasado� reclaman el pago del incentivo docente y que el rectorado de la UBA reconozca la legitimidad de la asociaciones que los agrupan.
La decisión de los docentes del Pellegrini y el Buenos Aires de seguir adelante con su protesta refleja el fracaso de las negociaciones que se realizaron ante el Ministerio de Trabajo para destrabar el conflicto. �Decidimos continuar con la medida de fuerza hasta que (Oscar) Shuberoff nos reciba y escuche nuestros reclamos�, explicó la titular de la Asociación de Profesores del Nacional Buenos Aires, Virginia González Gass.
Los docentes demandan el pago de 620 pesos del Fondo de Incentivo del año pasado y de la suma correspondiente al actual. Cuando se aprobó la ley de creación del incentivo, los 12 mil profesores de los 52 colegios universitarios del país quedaron excluidos del beneficio y recién después de numerosos reclamos el Senado aprobó este año su incorporación.
El rectorado de la UBA se comprometió a liquidar lo correspondiente a 1999 en un acta acuerdo que firmó con los docentes, quienes sin embargo sólo cobraron 100 pesos de los 720 que deberían haber percibido el año pasado. Para el año en curso ni siquiera se acordó el cronograma de pagos. La medida de fuerza de los docentes cuenta con el respaldo de los alumnos y los padres. �Los apoyamos en todo lo que necesiten�, declaró Lucas Bucci, el presidente del centro de estudiantes de la escuela Carlos Pellegrini. Allí los chicos montaron una radio abierta y se dedicaron a recolectar firmas de adhesión al reclamo docente. En el Buenos Aires los alumnos pensaban tomar el colegio, pero no pudieron hacerlo porque el rector Horacio Sanguinetti cerró el establecimiento.
�Cerré porque no hay preceptores y los chicos no pueden estar sueltos adentro del colegio. Si no hay una autorización firmada por los padres para que cumplan horario en la escuela, se los despacha a la casa�, explicó Sanguinetti, a quien como responsable del Buenos Aires le labraron un acta de contravención por el corte de calle que los estudiantes realizaron anteayer. Frente al cierre del colegio los chicos organizaron ayer un recital en la puerta, en el que actuaron bandas estudiantiles.
Además del pago del incentivo, los profesores demandan el reconocimiento del rectorado, que hasta el momento dialoga con la Asociación de Docentes de la UBA (Aduba). �En la reunión en Trabajo sólo participaron los representantes de Aduba; nosotros estuvimos como meros observadores, pero en otra oficina, y no se aprobó lo que habíamos acordado�, se quejó González Gass.

 

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