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 Si el Ministerio de Economía tiene pensada alguna fórmula para cambiarle el malhumor a la población será necesario que la revise y aplique una dosis más fuerte. Conforme con los precios alcanzados por el crudo en el mercado internacional, las petroleras que operan en el mercado local están evaluando en qué momento, y en qué medida, aumentarán los valores de las naftas en surtidor. El gesto de moderación mantenido en los últimos meses, a instancias de un reclamo del gobierno nacional, está chocando con las pérdidas que vienen sufriendo las empresas en la franja de comercialización. El crudo Brent tocó ayer en Londres sus valores máximos de los últimos diez años, empujado por las noticias de una baja en los stocks estadounidenses. Las cotizaciones internacionales del petróleo eran seguidas ayer en Repsol-YPF, Esso y Shell con una atención mayor a la habitual. �No hay aumentos, por ahora�, respondieron ayer en dichas empresas antes consultas de este diario, pero subrayando el carácter eventual de la decisión, que hoy podría ser otra. La presión sobre la rentabilidad de las empresas es grande, en particular en las filiales locales de las dos últimas, que no cuentan con producción propia de crudo en el país. Si los precios se estabilizan en los próximos días en niveles aproximados a los alcanzados ayer, el ajuste del valor de los combustibles sería inminente. Pero lo que es una mala noticia para los automovilistas y para el mercado de combustibles, es buena para las petroleras exportadoras. En virtud del aumento de la cotización del crudo entre el año anterior y el actual, el valor de las ventas al exterior de petróleo y sus derivados se incrementó en el primer semestre del año en más de un 100 por ciento, de acuerdo con las estadísticas oficiales de comercio exterior. El nuevo ajuste en los precios internacionales volverá a impulsar hacia arriba las exportaciones argentinas, dentro de las cuales el sector petrolero ha pasado a constituirse en clave. Los operadores internacionales del mercado petrolero atribuyeron a la caída de las reservas estadounidenses de crudo, inferiores en un 12,5 por ciento a las cifras de un año atrás, el comportamiento alcista de los precios. Los analistas estiman que el principal país consumidor de combustibles no estará en condiciones de reconstituir sus stocks de fuel doméstico (utilizado para calefacción) antes del invierno. Desde la invasión de Irak a Kuwait, en 1990, no se alcanzaban precios tan altos como los registrados ayer en el mercado londinense. El precio por barril de crudo Brent trepó ayer a un pico de 32,80 dólares, para descender al cierre a 32,13, todavía un 2 por ciento por encima de los valores de anteayer. La escalada se inició a mediados de la semana pasada cuando corrieron los primeros trascendidos sobre el descenso de las reservas estadounidenses, pero se realimentaron tras el fin de semana por la gira emprendida por Hugo Chávez, presidente de Venezuela, por los países miembros de la OPEP (cartel de países exportadores), convocando a sus socios a �enfrentarse a las presiones� de los países industrializados para bajar el precio del barril. Las refinadoras argentinas volverían en estos días a la política de miniajustes en el precio de los combustibles, para alinearlos con los valores internacionales. �Tenemos niveles de precios de las naftas que se corresponderían con un valor del crudo de 8 a 10 dólares inferior al actual�, aseguró a este diario una fuente empresaria. De cualquier modo, el compromiso es que los aumentos serán �moderados�. Pero que los habrá.
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