Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira


KIOSCO12

Satisfacción urbi et orbi en el gobierno porteño

Ibarra se reunió por primera vez en su gestión con el arzobispo Bergoglio. No hubo reclamos ni quejas de la Iglesia, sino un diálogo cordial. El saldo según los aliancistas, positivo.

Aníbal Ibarra reconoció en la campaña que es agnóstico.
Pero tendió buenos lazos desde entonces con la Iglesia.


Por Santiago Rodríguez

t.gif (862 bytes) Aníbal Ibarra quedó por demás satisfecho con la forma en que el arzobispo de Buenos Aires, Jorge Bergoglio, lo recibió en la primera visita que le realizó como jefe de Gobierno de la Ciudad: no sólo obtuvo la palabra de que la Iglesia acompañará las acciones que implemente su gestión para atender a los sectores más vulnerables, sino que también se llevó un reconocimiento por el tono social del discurso que pronunció en la Legislatura después de jurar en el cargo y de su primera semana al frente de la administración porteña. �Aníbal considera que la acción de la Iglesia es muy importante en materia de contención social y por eso quedó muy conforme con la entrevista�, explicaron los mismos hombres de su entorno que revelaron los detalles de su encuentro con Bergoglio.
La reunión entre Ibarra y Bergoglio la alentó el mismo jefe de gobierno. Ambos hablaron por teléfono la semana pasada y quedaron en verse en cuanto la agenda de uno y otro lo permitiera. Ese hueco se abrió finalmente anteayer. Poco antes de las 18.30 �la hora pactada para el encuentro� Ibarra dejó su despacho para cruzarse hasta el arzobispado porteño, al lado de la Catedral. Lo acompañó su vice, Cecilia Felgueras, quien tejió una buena relación con los representantes de la Iglesia.
El modo en que los recibió el arzobispo dejó satisfecho a Ibarra y los suyos, aunque no sorprendió a aquellos que están al tanto de la forma en que funcionan las cosas dentro de la Iglesia. Bergoglio ha dado muestras de ser un hombre que en los casos en que estén en juego los intereses católicos preservará la relación institucional con el jefe de gobierno y no irá al choque personal, sino que avanzará a fondo por otro lado.
Por ejemplo, no ha sido el prelado el vocero de las cuestiones más ríspidas de la Iglesia en las cuestiones educativas, sino el director de la Vicaría Episcopal de Educación porteña, Juan Torrella, quien ha bregado para que las escuelas públicas se abran a la enseñanza religiosa como �algo optativo� para garantizar �el derecho de los padres a elegir� qué aprenden sus hijos. También en el Consejo Superior de Educación Católica ha recaído la defensa pública de las posiciones de la Iglesia.
La educación es precisamente uno de los temas centrales de preocupación de la Iglesia en la ciudad. Los otros dos son la situación social y la política de salud reproductiva, en particular la posibilidad de que desde esferas oficiales se abra la discusión sobre el aborto.
Los hombres de la Iglesia porteña desconfían de Ibarra, pero por el momento su máximo referente lo recibe con palabras de reconocimiento, que reconfortan a su entorno. �Aníbal no es católico y no hace demagogia con la religión; es con eso que, de alguna manera, se ha ganado el respeto de los católicos�, evaluó un funcionario del gobierno de la ciudad.
El entusiasmo de los colaboradores de Ibarra radica en que Bergoglio �le dijo que le había gustado mucho el discurso del día en que asumió, que lo veía comprometido con los sectores más vulnerables y con el desarrollo de la zona sur de la ciudad y que la Iglesia estaba dispuesta a trabajar en conjunto lo social�.
Los mismos voceros aseguraron que durante la hora que duró la reunión �Bergoglio no formuló ni una sola sugerencia sobre educación�. De todos modos, Ibarra lo tranquilizó explicándole que se propone establecer una �nueva relación entre público y privado y que se pueden hacer cosas conjuntas en beneficio de todos�.

 


 

CAVALLO QUIERE OPOSICION FRONTAL, BELIZ DISCREPA
Pimpinela se mudó a la Legislatura

Por Romina Calderaro

Eduardo Lorenzo �Borocotó� llegó un día a la Legislatura porteña a las siete de la mañana, y se quejó de que su bloque estuviera cerrado. Domingo Cavallo ordenó hacer una �oposición sistemática� a la gestión de Aníbal Ibarra, pero los belizistas se niegan a obedecerlo. Jorge Argüello y Marta Oyhanarte tienen compañeros de bancada que creen que ellos �sólo buscan prensa� y hasta hay quienes opinan respecto de Irene López de Castro, una flamante legisladora cavallista, que �tiene ideas tan poco democráticas como las de Elena Cruz, sólo que no las expuso en la campaña�. El bloque de Encuentro por la Ciudad, la alianza que Domingo Cavallo y Gustavo Beliz sellaron para las elecciones del 7 de mayo, no se caracteriza por su unidad. Lo que sigue es un resumen de las desavenencias del grupo de veinte diputados que si no se ponen de acuerdo le facilitarán la tarea al jefe de Gobierno porteño. 
El miércoles pasado, Domingo Cavallo se reunió con los veinte legisladores de su bloque y les explicó su proyecto en la Ciudad: hacer una oposición sistemática a la gestión de Aníbal Ibarra. �La idea no es obstaculizar, pero el 35 por ciento de la gente nos votó a nosotros y no se puede defraudar a esas personas. Además, Ibarra nos ha sometido a una situación de ninguneo que no podemos permitir. No somos Irma Roy�, explicó un estrecho colaborador del ex ministro de Economía.
Pero la directiva de Cavallo generó rebeldía en la gente de Beliz. �Tenemos que votar positivamente las leyes que consideremos buenas. La oposición sistemática no sirve en una democracia madura�, explicó Enrique Rodríguez, un hombre del ministro del Interior de Carlos Menem. �Yo voté en contra de muchísimas leyes del último paquete, pero voté a favor de la Corporación del Sur. Y gracias a que fui al recinto pude modificar muchas cosas que si no se hubieran aprobado a libro cerrado�, ejemplificó. Rodríguez se refiere al paquete de 140 leyes que se aprobaron en la Legislatura el viernes 4 de agosto, dos días antes de la asunción de Ibarra. Ese día quedaron claros los posicionamientos del bloque y las internas que amenazan profundizarse. Mientras Argüello, jefe del bloque de Encuentro por la Ciudad, y Marta Oyhanarte, primera legisladora, anunciaron que se irían del recinto y que lo que estaba sucediendo era �vergonzoso�, los legisladores de Nueva Dirigencia decidieron sentarse a sus bancas porque habían acordado dar quórum aunque votaran en contra. Argüello tuvo un pico de presión. No era para menos. Un legislador lo abordó en un pasillo acusándolo de no respetar los acuerdos, mientras otro le recordaba a Oyhanarte que hasta meses atrás era militante radical y que por entonces no solía indignarse. Desde ese día, muchos belizistas sostienen que Oyhanarte y Argüello �lo único que quieren es prensa�.
No es mucho mejor la situación de los nuevos legisladores cavallistas. �Hay algunos que son muy nuevitos en la política�, dijo a este diario uno de los encargados de aunar criterios y consensuar políticas en el grupo. Y hasta hubo alguien que se mostró preocupado por �las ideas poco democráticas de Irene López de Castro, una legisladora nueva del cavallismo, esposa de un marino, que no cree que haya habido terrorismo de Estado durante la última dictadura militar�. Como si lo anterior fuera poco, el médico Eduardo Lorenzo �Borocotó�, hombre de Cavallo, no se acostumbra a los horarios de la política y pretende que el bloque se abra a las 7 de la mañana. �Mucho madrugar, pero si lo buscás a las tres de la tarde no está: manda de reemplazo al hijo�, lo criticó un compañero.

 

PRINCIPAL