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Ahora Bein podrá decir que pierde
quien vaya contra la reactivación

El secretario de Programación Económica estafa eufórico. Pudo mostrar que la producción industrial de julio registró una variación positiva
respecto al mes anterior. �Hay que ver si se afirma la tendencia�, dijo.

Miguel Bein, secretario de Programación Económica. Con el dedo señala a los economistas de la city.


t.gif (862 bytes) Después de cuatro meses consecutivos de caída, la producción industrial logró en julio el mayor aumento desde diciembre de 1999. Fue un respiro para el equipo económico, cada vez más jaqueado por múltiples problemas. Miguel Bein, secretario de Programación Económica, mostró su desahogo al calificar el resultado de �francamente espectacular�. El entusiasmo del funcionario parece exagerado frente a las cifras. El incremento contra junio fue de 4,9 por ciento en la versión con estacionalidad y de 3,1 sin ella. No obstante, estos anticipos serán modificados por el INdEC. Bein adelantó que ese organismo corregirá los indicadores de junio �fueron 0,7 por ciento más bajos de lo que se informó en su momento�, por lo cual en julio el crecimiento de la actividad fabril quedará en 4,2 y 2,5 por ciento, con y sin estacionalidad, respectivamente.
�En julio se aceleró la recuperación de la actividad económica, pero hay que darles tiempo a los indicadores para determinar si se afirma la tendencia�, dijo Bein, más cauto, cuando se le preguntó si la economía ha comenzado a despegar. Mientras Machinea inició ayer en Estados Unidos las negociaciones con el FMI para corregir la meta de déficit fiscal de este año, el equipo económico pudo disfrutar en el frente interno de un día alentador. Además de la suba del Estimador Mensual Industrial (EMI), el Congreso sancionó las leyes de fomento a las pymes y la modificación de la carta orgánica del Banco Nación (ver aparte).
El crecimiento de la industria contra julio del �99 fue de 4,0 por ciento con estacionalidad. Es el valor más alto desde el 7,6 de diciembre pasado. Con excepción de esa oportunidad, no se registraba una suba mayor desde mediados de 1998. En la versión desestacionalizada, el aumento interanual alcanzó a 6,9 por ciento. 
�No hay que desilusionarse si el mes que viene tenemos una tasa de crecimiento menor�, se adelantó Bein, quien prefirió no arriesgar un pronóstico sobre el comportamiento de la industria en lo que queda del año. �La recuperación de la economía no es pareja, con meses de fuertes alzas como marzo y abril y otros más suaves, como mayo y junio.� �No hay que comerse los amagues�, aconsejó el funcionario, y observó que cuando se analizan los indicadores �a veces hay que darle tiempo a la tendencia para que se afirme�. De todos modos, insistió en que �la economía se está recuperando y la discusión está planteada sobre su dinamismo�.
Al anticipar el resultado del EMI, el INdEC entrega sólo algunos datos de información sectorial, necesaria para analizar el perfil de la recuperación de la industria. Sin embargo, Bein destacó que esta vez el crecimiento se explica no sólo por una buena performance de los rubros exportadores, sino también por el buen desempeño de aquellos vinculados al mercado interno. Por caso, los insumos de la construcción cayeron en promedio 3,7 por ciento, contra el descenso de 23 por ciento acumulado en el primer semestre. Algo similar ocurrió con la industria metalmecánica, excluida la automotriz, que cayó 1 por ciento, luego de haber bajado 16 por ciento en la primera mitad del año. Otros sectores que mostraron mejoras fueron metálicas básicas (subió 12,5%), papel (10%), neumáticos (7,8%) y textiles (2,4%). Pero el alza más importante fue la de producción de sustancias químicas, del 288 por ciento contra julio del �99.
A pesar de estos comportamientos, la Encuesta Cualitativa Industrial reveló que el 73,8 por ciento de los industriales no espera cambios en la demanda interna en el corto plazo, mientras que el 15,4 aguarda una baja y sólo el 10,8 por ciento considera que crecerá. Entre los exportadores, 62,3 por ciento no supone variaciones en sus ventas, el 27,9 por ciento dijo que subirán y el 9,8 espera que caigan. Finalmente, con respecto a las importaciones, el 78 por ciento no aguarda cambios, el 11,8 por ciento aseguró que bajarán y el 10,2 dijo que aumentará su nivel de compras en el exterior.

 


 

SIGUE TRABADO EL REGIMEN DE AUTOS
Acuerdo en punto muerto

La presión por la medición del componente nacional sigue siendo la piedra de la discordia para que finalmente entre en vigencia el acuerdo automotor bilateral entre Brasil y Argentina. Luego que se reunieran ayer en Río de Janeiro las delegaciones de ambos países no fue posible llegar a un entendimiento. Ahora habrá que esperar la reunión en Buenos Aires del próximo 23 de agosto.
La secretaria de Industria, Débora Giorgi, ratificó que Argentina aplica la medición de su componente nacional de autopartes del 30 por ciento de la misma manera en que figura en el tratado firmado en Buenos Aires en junio pasado. Pero el brasileño José Botafogo Goncalves, ministro extraordinario para asuntos del Mercosur, aseguró que será necesario revisar la forma de medición de componentes que pretende Argentina. �Las diferencias de interpretación del acuerdo se mantienen�, afirmó.
La reacción de Brasil se inició luego de que Argentina puso en marcha el régimen incluyendo la medición de componentes netos de toda importación, algo que disgustó a las terminales automotrices, que pretendían no incluir las piezas importadas de los componentes considerados nacionales.

 

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