Por Raúl Kollmann
�En concreto, le pedimos a Madeleine Albright que Estados Unidos aporte la información secreta que tiene sobre los atentados. Seguramente la tiene y, de hecho, la secretaria de Estado no rechazó el pedido, no dijo que no, sino que iba a hacer lo posible�. De esta manera, resumió el encuentro uno de los participantes de la reunión de ayer entre la funcionaria norteamericana y los dirigentes de la comunidad judía. También le pidieron a Albright colaboración con las investigaciones destinadas a ubicar los cuerpos de los desaparecidos judíos, para que fueran enterrados de acuerdo con el rito religioso correspondiente. Al encuentro entre Albright y los dirigentes se le bajó el tono y los riesgos políticos: no se invitó a los familiares de las víctimas y, además, estuvo presente el canciller Adalberto Rodríguez Giavarini.
La secretaria de Estado llegó bien temprano a la AMIA acompañada por unos veinte guardaespaldas. Entró al edificio y se detuvo por un largo rato ante el hermoso monumento que evoca a las víctimas del atentado. De inmediato se dirigió al salón en el que se produjo el encuentro con los dirigentes de la comunidad judía.
Hubo una breve bienvenida a cargo del presidente de la DAIA, Rogelio Cichowolsky, una también breve respuesta de Albright y después un intercambio de opiniones de unos 25 minutos.
Los dirigentes judíos no formularon un pedido puntual de ayuda ni sugirieron, por ejemplo, el regreso a Buenos Aires de una misión del FBI que el año pasado hizo un análisis de la pesquisa. Aquel viaje de los investigadores norteamericanos, producto de un pedido de las instituciones judías y los familiares de las víctimas, desató más de una polémica con los argentinos. Es que el equipo del FBI entregó un informe que �aunque tenía notorias fallas� desnudó una parte de los agujeros negros de la pesquisa argentina.
Esta vez, en lugar de pedidos concretos, los dirigentes de la comunidad judía hicieron un reclamo elíptico: partieron de la base de que Estados Unidos tiene información confidencial sobre los atentados perpetrados en Buenos Aires y por alguna razón nunca la quiso aportar. Albright, en lugar de decir �nosotros ya le entregamos al juzgado, a la policía y a los servicios de inteligencia todo lo que teníamos�, señaló que �haré todas las gestiones posibles para cumplir con el pedido�.
Al final, la funcionaria volvió a pasar por el monumento a las víctimas, se detuvo para rendir un breve homenaje y se retiró acompañada por la caravana de vehículos de seguridad. �Lo importante del encuentro fue la reafirmación del compromiso del gobierno norteamericano de colaborar con la Argentina en el marco de asistencia entre países con experiencia en estos hechos�, señaló Cichowolsky. Para Hugo Ostrower, titular de la AMIA, �la reunión fue muy positiva. Le pedimos que abran los archivos y que, además, presten colaboración para encontrar a los desaparecidos judíos, que merecen que se los entierre como corresponde. Vi buena predisposición en la secretaria�.
Más allá de lo que resulte de la visita de Albright a la AMIA, lo cierto es que el solo hecho de que haya ido hasta Pasteur 633 implica un gesto fuerte. Incluso un mensaje al gobierno nacional de que la investigación de los atentados es un punto de máximo interés para Estados Unidos. Tácitamente quedó expresado que, si las pesquisas no avanzan, es probable que Washington sea potable a nuevos reclamos de los familiares.
ATENTADO A LA EMBAJADA DE ISRAEL
Indagan a un paquistaní
Por I.H.
Un paquistaní detenido en Estados Unidos, que estuvo bajo sospecha de haber participado en el atentado contra la Embajada de Israel, será interrogado como testigo por el secretario penal de la Corte Suprema, Esteban Canevari, que tiene a cargo la investigación. Mohamed Abass Malik Malik fue arrestado días atrás en Los Angeles como inmigrante ilegal. Aunque el pedido de captura argentino fue dejado sin efecto en enero de este año, Canevari viajará igual para obtener su testimonio. De todos modos, en la Corte �no hay demasiadas expectativas al respecto�.
Malik Malik quedó implicado en la investigación por el ataque a la embajada a raíz del testimonio de un taxista, que lo encontró parecido a un hombre que pasó en moto por la embajada minutos antes del estallido, el 17 de marzo de 1992. Por eso la Corte libró una orden de captura internacional. Cuando en aquel entonces comenzó la instrucción de la causa, fueron detenidos varios ciudadanos también paquistaníes que finalmente quedaron sobreseídos.
Cuando el Gobierno recibió esta semana la confirmación de la detención de Malik Malik, le consultó a la Corte si aún tenía interés en interrogarlo. De ahí la decisión del viaje de Canevari, que aún no tiene fecha precisa. Teniendo en cuenta que el alto tribunal siempre intentó focalizar algún sospechoso del atentado y que finalmente desestimó el pedido de búsqueda del paquistaní, su declaración no suena demasiado prometedora. �No tenemos mucha fe, pero no sabemos, siempre puede haber sorpresas�, dijo un alto funcionario del tribunal.
En la causa judicial no hay detenidos. Sólo una resolución del alto tribunal que responsabiliza del ataque terrorista a la Jihad Islámica. El titular saliente de la Embajada de Israel dijo ayer: �Me voy con la promesa de la Corte Suprema de que va a salir una nueva declaración, aclarando la conexión local del atentado a la embajada, porque hay involucrados fronteras adentro, más allá de que como ellos me explican, falte sustento jurídico para un juicio�. Voceros de la Corte, contestaron: �Eso es lo que quiere Aviran, estamos trabajando en eso, pero todavía falta un trecho�.
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