Por Ariel Greco
  Anoche, en la tercera fecha de la Zona D de la Copa Mercosur, jugaron en La Bombonera los dos punteros e invictos. Y siguen así. Boca no pudo ganarle a Nacional e incluso �aunque le haya quedado un cierto sabor de frustración final por no acceder a un triunfo que pareció cercano sobre el epílogo� hubo momentos en que pudo perder el partido. Ahora siguen los dos con siete puntos y la clasificación no parece problemática.
En realidad, Boca sobró el partido y terminó teniendo que �poner� todo y sin embargo no le alcanzó. Arrancó displicente, tratando de cuidar la pelota pero sin presión sobre el rival ni movilidad de los receptores. A ese ritmo se hizo lento, repetitivo y con carencias clave: no tuvo velocidad para sorprender ni presión para cortar ni agresividad arriba. Un problema de actitud colectiva y de desempeños individuales. En el medio, porque el reaparecido Serna todavía está lento y desprolijo con la pelota, lo que hizo que, ante la imposibilidad de salir a cortar con autoridad, se recostara �naturalmente� entre los centrales; porque Marchant tuvo una mala noche; porque Basualdo flotó sin hacer nada positivo. Se notó la falta de Battaglia. Quedaba Riquelme, el único que a ese ritmo podía generar, con manejo, fútbol. Y lo hizo pero no alcanzó. Porque arriba, ni Pandolfi ni Delgado tuvieron peso. Así jugó 40 minutos hasta que apretó y creó tres posibilidades al final: Delgado, afuera; Riquelme tras amagar y Fagiani de lejos.
Nacional sólo esperó con dos líneas de cuatro y Regueiro tirado bien a la izquierda para tapar la subida de Ibarra, que no pasó nunca. Cuidó la pelota y no atacó, con el Polillita de enganche y Sergio Martínez solo arriba. Con eso, llegó una vez con el Manteca.
En el segundo, Boca volvió a salir tibio y fue el mejor momento de Nacional. El shock de los cambios de Bianchi (Palermo, Barijho y Gustavo) se encontró con un gol en contra quinielero de Bermúdez y la necesidad de remontar. Lo hizo con ganas de Palermo y sutilezas de Román, que reventó el travesaño en la jugada que era el triunfo. No fue. Boca había dado demasiadas ventajas.
CHILAVERT CONVIRTIO UN GOL Y MEDIO
Gran triunfo de Vélez ante la U de Chile
Vélez venció a la Universidad de Chile en el Amalfitani en partido por el Grupo A de la Copa Mercosur. De esa manera, Vélez sumó sus primeros tres puntos en la Mercosur, mientras que el equipo chileno debutó sin éxito en el torneo. El grupo lo lidera River con seis unidades en dos partidos.
Chilavert tuvo participación en dos de los tres goles de su equipo. Primero ejecutó un tiro libre a los 12 minutos del primer tiempo, que fue oportunamente desviado por Rolando Zárate para poner en ventaja al local, y luego convirtió un tiro penal a los 62 minutos, con fuerte remate al palo izquierdo de Vargas. El descuento chileno, a los 69, fue un penal de Leo Rodríguez por falta de Falcón a Musri. Sobre el final, Federico Domínguez convirtió el último tanto con un fuerte tiro cruzado.
PALMEIRAS LLEGA MUY DESINFLADO
Piazza quiere ganar
Independiente buscará hoy un triunfo ante Palmeiras, que le permita festejar por primera vez desde la llegada de Osvaldo Piazza. Por la segunda fecha del Grupo B de la Copa Mercosur, el conjunto de Avellaneda (perdió 3-0 con Cruzeiro hace dos semanas) recibirá a los brasileños, que vienen de empatar con la Católica de Chile. Piazza tendrá dos ausencias sensibles: Cambiasso y Rambert no están incluidos en la lista de buena fe, no podrán jugar hasta la segunda fase de la Copa. Igualmente, el técnico anunció que en lugar de Cambiasso ingresará Cristian Domizi, y Francisco Guerrero reemplazará a Rambert. Por su parte, el Palmeiras tampoco atraviesa uno de sus mejores momentos.
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