CAFIERO DICE QUE HAY MAS NOMBRES EN SU DECLARACION JUDICIAL
�¿De dónde sacaron que eran tres?�

El escrito que presentó ante el juez Liporaci tiene varios nombres. Cuatro que sabían de los sobornos y uno que lo habría cobrado.  Antonio Cafiero sostiene que Palito Ortega �debería contar todo lo que sabe ante la Justicia�.

 En estos días, Antonio Cafiero se mantiene todo lo hermético que puede, o que quiere. No obstante, ayer, ante Página/12 se animó a especular sobre los nombres que la prensa viene publicando de los legisladores que pueblan el texto entregado por el veterano peronista al juez Carlos Liporaci. �Se manejaron algunos nombres que, por otra parte, no sé de dónde sacaron que eran sólo tres�, señaló el senador que desde hace ya casi dos meses presentó una cuestión de privilegio en la Cámara alta en la que demandaba investigar las versiones sobre los supuestos sobornos que habrían pagado a un grupo de senadores a cambio de la aprobación de la reforma laboral. �Palito debería contar todo lo que sabe ante la Justicia�, aseguró Cafiero en respuesta a los reclamos de Ramón Ortega, quien le exigió que desmienta haberlo involucrado entre los protagonistas del escándalo. 
Cafiero no llegó al juzgado de Liporaci con una mera esquela en sus bolsillos, tal como se dijo en su momento. En realidad el sobre que le entregó al juez Liporaci contenía cinco carillas tamaño carta escritas en letras de molde en las que el veterano dirigente narra cómo fueron llegando a sus oídos las versiones que daban cuenta del pago de sobornos a senadores a cambio de la aprobación de la ley. 
El texto que está en manos del magistrado contiene al menos media docena de nombres de legisladores, algunos de ellos pertenecientes a la bancada radical, otros al justicialismo, involucrados en el escándalo. 
�No son tres, sino cinco los senadores que figuran en la presentación de Cafiero�, le aseguró ayer a Página/12 un hombre que conoce la declaración del veterano dirigente peronista. Cuatro de ellos, según la misma fuente, �aparecen vinculados con los sobornos de manera indirecta, y el restante está mencionado como uno de los receptores de la coima�. 
Cafiero evitó ayer confirmar o desmentir las versiones periodísticas que reprodujeron el nombre de tres legisladores como los señalados por el ex gobernador ante la Justicia: Eduardo Bauzá, Angel Pardo y Ramón Ortega. Anoche, se reunió con Bauzá y Corach, para hablar del conflictivo tema.
Senadores justicialistas, profundamente ofendidos con Cafiero por su afán moralizador, le comentaron a este diario que la difusión de los nombres de los implicados por el senador bonaerense ante la Justicia fue una respuesta a las declaraciones de Liporaci, a cargo de la causa, quien el miércoles declaró que �las pruebas con las que contaba hasta el momento eran muy débiles como para avanzar en la investigación�. 
Liporaci tiene desde el lunes la declaración de Cafiero, que según el magistrado no representa un aporte de contundencia al expediente que crece día a día con los testimonios de los senadores que hacen cola en la puerta de su despacho. 
�Antonio tira para adelante con una energía que está fuera de control�, le confesó a este diario uno de los colaboradores del histórico peronista. En rigor, el comportamiento de Cafiero desconcierta a propios y extraños: nadie se anima a elaborar una especulación que acierte en el objetivo de su estrategia. Eduardo Duhalde y Carlos Ruckauf aseguran que si bien mantienen un diálogo abierto con el senador, su accionar no está vinculado con ellos. Lo mismo aseguran sus pares de la Cámara alta que no le encuentran la vuelta a una oferta que logre sentarlo a una mesa de negociación. Incluso sus hijos, los diputados Juan Pablo (Frepaso) y Mario (PJ), aseguran desconocer el horizonte al que se dirige su padre. �Nos limitamos a respaldarlo, ¿qué otra cosa podemos hacer?�, dicen.

LA NOCHE DE LOS �CENADORES� DE CONCIENCIA
De Santibañes jugó de local

Por Romina Calderaro

�Hoy somos todos senadores... porque estamos acá cenando�, dijo Ari Paluch, presentador oficial de la primera cena anual de la asociación Conciencia a la que Fernando de la Rúa asistió como presidente de la Nación. De la Rúa no estaba para bromas. Intentó sonreír varias veces, pero se le notaba el esfuerzo. El ministro de Trabajo, Alberto Flamarique, ni siquiera disimuló: estuvo serio toda la noche y no quiso hablar con ningún periodista. Parecían felices, en cambio, el jefe de la SIDE, Fernando de Santibañes, el jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra �quien fue elogiado en su discurso por De la Rúa�, el ministro de Justicia, Ricardo Gil Lavedra, y el vicegobernador bonaerense, Felipe Solá. El vicepresidente, Carlos �Chacho� Alvarez, brilló por su ausencia. 
A las siete de la tarde de ayer, las organizadoras de la cena anual de Conciencia, que se hizo en un salón de la Rural, tuvieron que rediagramar todas las mesas: el ex presidente Carlos Menem, el gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, y Carlos Ruckauf, gobernador de la provincia de Buenos Aires, avisaron que no iban a ir. El problema es que hubo un importante número de empresarios que pagaron carísimo el cubierto para estar en la mesa de los candidatos presidenciables y se terminaron sentando con perfectos desconocidos o con políticos menos rutilantes.
Hongo Portobello sobre lecho de verduras orientales, crêpes souflé de colores y salsa de cuatro quesos con kirsch. Postre de frambuesas con salsa de chocolate y pequeños alfajores. Vino, champagne Barón B y café. Ese fue el menú. En una mesa, la diputada cavallista Martha Oyhanarte charlaba animadamente con el periodista Oscar González Oro. 
En otra, Flamarique refunfuñaba contra Enrique �Coti� Nosiglia. �Es el responsable de mi desgracia. Pero a mí me banca ése�, dicen que decía señalando la mesa del presidente Fernando de la Rúa.
En su discurso, el Presidente dijo sobre el Senado lo mismo que había dicho a la tarde en la Casa Rosada, elogió a las mujeres de Conciencia �por esta gesta de amor y solidaridad� y le dedicó un párrafo al jefe de Gobierno porteño. �Me ha dado emoción escucharlo a Aníbal Ibarra, me recuerda a cuando ocupé su cargo. Es un jefe de Gobierno joven y pujante�, dijo. ¿Viste?, comentó Ibarra un rato después a un periodista que le recordaba los elogios presidenciales. Ibarra estaba sonriente. Llegó tarde, pero se quedó hasta el final y hasta se permitió bromear sobre los difíciles momentos que pasa el Presidente. �Tengo para mis adentros que este tema se tiene que resolver�, dijo, serio. �Por estos días, debe querer volver al gobierno de la ciudad�, agregó, pícaro.
Tal vez tocada por las críticas que suele recibir por la elección de su ropa, la vicejefa de Gobierno porteño, Cecilia Felgueras, estaba especialmente elegante. Eligió un traje negro, color que favorece a las rubias, con blazer escote en �V� y un cuidado peinado recogido. La ex ministra de Educación, Susana Decibe, Domingo Cavallo, Jorge Domínguez, Mario �Pacho� O�Donnell, José Octavio Bordón, Felipe Solá, Daniel Filmus, Jorge Telerman, Fernando de Santibañes, Diego Santilli �que será uno de los directores del Banco Ciudad�, Débora Giorgi y Raúl Portal también fueron de la partida. 
Promediando la cena, los comensales participaron de una votación sentados en sus mesas. Un aparatito con botones numerados permitía optar. Según ese sistema, el 36 por ciento de los presentes aseguró que no se siente representado por el actual sistema político y más del cincuenta por ciento de los invitados opinó que las listas sábanas deben ser eliminadas.
Uno de los últimos en irse fue el jefe de los espías, Fernando de Santibañes. No se lo notaba muy perturbado por el escándalo del Senado, en el que aparece señalado como el hombre que puso la plata de las coimas. �A él le preocupa que sólo se hable de este tema porque la Argentina tiene muchos problemas. Por ejemplo, si hay crecimiento o no hay crecimiento�, dijo a este diario un hombre cercano a De Santibañes. Era más demedianoche, llovía y en el salón de la Rural había empezado a sonar la música, pero ya casi no había caras conocidas.

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