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Un hincha de Talleres fue muerto
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 Un hincha de Talleres de Córdoba, Roque Pablo Miranda, murió en forma casi inmediata como consecuencia de una herida de arma blanca en el pecho que recibió en un enfrentamiento entre barrabravas del club cordobés, en el entretiempo del partido frente a Lanús. A pesar de la gravedad de la lucha y de la muerte de Miranda, quien quedó tendido en el piso de la cabecera norte, el cotejo siguió como si nada hubiera pasado. El árbitro Daniel Giménez fue informado del hecho por el titular del operativo policial, comisario Omar Castelino, una vez concluido el partido y aclaró que, de haberlo sabido antes, lo hubiera suspendido. Miranda recibió un cuchillazo a la altura del pecho y cinco médicos no lograron reanimarlo. El fallecimiento se produjo por desangramiento, según precisaron las fuentes. La pelea fue entre miembros de dos fracciones de la barra brava de Talleres, Las Violetas, y el grupo de Juan. Miranda pertenecía a Las Violetas, pero en el combate también resultó herido de arma blanca José Antonio Mercerich, de 27 años, de La Barra de Juan, quien por tres cortes profundos en un glúteo fue trasladado hasta el Hospital de Urgencias, y Daniel Escalzadoni, de 19, recibió un tajo en un dedo meñique, por lo que fue derivado al mismo centro médico. Al enterarse de la situación, el titular de Talleres, Carlos Dosetti, sufrió una lipotimia y una vez recuperado procuró aclarar a la prensa que �la disputa no se produjo entre barrabravas, sino entre integrantes de distintas agrupaciones del club�, como queriendo negar la existencia de facciones en la barra. �Esto nos sorprendió, porque nada hacía presumir un enfrentamiento entre miembros de la propia hinchada de Talleres. Nosotros habíamos montado un operativo con 380 agentes, porque de Lanús vinieron sólo quince personas, pero evidentemente no alcanzó�, trató de justificar el comisario Castelino. Aparentemente, la detención de Lucho, cabecilla de la barra de Talleres, quien se encuentra en prisión, habría generado un vacío de poder en el seno de la hinchada y los candidatos quisieron dirimir la sucesión a cuchilladas. El subcomisario Elio Gómez anticipó que pasadas las 22 se estaban produciendo las primeras detenciones en torno del esclarecimiento del hecho. Siete personas fueron demoradas y junto a varios testigos fueron llevados esta noche a la División Homicidios de la Policía de Córdoba. Pero Castelino aclaró que no estaban en condiciones de establecer si entre los demorados se encuentra el autor del crimen.
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