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Un maratón para aprobar la nueva ley de fueros

La Cámara baja sancionó ayer a la tarde la nueva norma que limita los fueros de senadores, diputados y funcionarios. El Senado comenzó a debatirla pasada la medianoche.

Los sobornos a senadores pusieron en primer plano otra vez la cuestión de la inmunidad parlamentaria.


Por Eduardo Tagliaferro y Felipe Yapur

t.gif (862 bytes) Podría llamársela una ley express atípica. Después de dormir cinco años en el Congreso, diputados y senadores la debatieron y la aprobaron ayer en sesiones prácticamente simultáneas. Ayer a la tarde, la Cámara de Diputados le dio media sanción. Y al cierre de esta edición, el Senado se aprestaba a aprobar la norma que va a limitar los fueros de legisladores y funcionarios ante las investigaciones judiciales. De esta manera, los integrantes de la Cámara alta aspiran a descomprimir la crisis de los sobornos y evitar así la suspensión en sus funciones que el juez Carlos Liporaci solicitó de once legisladores.
La nueva norma modificará el Código de Procesamiento Penal, por lo que los jueces podrán tomar declaraciones a legisladores sin que medie un pedido de desafuero, salvo en el caso que el magistrado decida detener al funcionario. La iniciativa fue aprobada luego de una sesión en la que los diputados confrontaron, con encendidos discursos, sus puntos de vista sobre el escándalo del Senado. El punto más alto del debate fue el contrapunto entre el diputado frepasista Juan Pablo Cafiero y el peronista Humberto Roggero. Mientras Cafiero sostuvo que era �vergonzoso ver sentados en sus bancas y votando leyes importantes a legisladores que tal vez dentro de poco terminen imputados por la Justicia�, Roggero reivindicó su rol de dirigente político y exaltó valores como la lealtad, el verticalismo y la existencia de códigos en la actividad. A la hora de la votación, 42 diputados estaban ausentes. De los 215 presentes, 207 votaron por la afirmativa; 2 se abstuvieron y 5 estuvieron en contra. 
El primer proyecto para limitar la inmunidad de parlamentarios y funcionarios públicos fue presentado en la Cámara baja hace casi cinco años con la firma de los entonces diputados Carlos Alvarez, Graciela Fernández Meijide y la santacruceña Cristina Fernández de Kirchner. �Una no deja de sorprenderse en este país. A pesar de ser impulsora de este proyecto, voy a abstenerme�, dijo Fernández de Kirchner. Que curiosamente hace cinco meses concordó con el despacho al que llegó la Comisión de Asuntos Constitucionales y firmó al pie de la iniciativa.
Lo que pasó es que la discusión de los diputados excedió en mucho al contenido escrito del proyecto de ley. Muchos diputados sospechaban que los senadores creen que de esta forma los pedidos de desafuero presentado por Liporaci quedarían desactivados. Pero fuentes judiciales confiaron a Página/12 que el magistrado insistirá con ellos: �El juez quiere poder llevarlos al juzgado por la fuerza pública en caso de no presentarse a declarar y por ello necesita el desafuero�. 
Casi todas las intervenciones hicieron referencia a la oportunidad y al contexto en que éste era debatido. Anteayer, Néstor Kirchner, gobernador de Santa Cruz y esposo de la diputada, había denunciado un �pacto de impunidad� entre los senadores nacionales y el Gobierno. �Antes por prebendas votaban leyes, hoy votan leyes a cambio de libertad�, fue la elocuente frase con la que el gobernador definió el presunto pacto. La oportunidad fue el argumento esgrimido por muchos de quienes votaron por la afirmativa. La radical Elisa Carrió sostuvo que, �si bien para algunos ésta quizás no sea la mejor oportunidad para votar un proyecto que delimita el alcance de los fueros, lo cierto es que leyes como ésta no salen sino en un contexto de crisis�.
Incluso desde la oposición peronista se coincidía en que �éste es el momento� para tratarlo. Uno de los miembros informantes del bloque, el cordobés Eduardo Di Cola, dijo a Página/12 que �la aprobación de la limitación de los fueros es un paso adelante, aunque es cierto que debimos haberlo tratado hace tiempo�. 
La mayoría de los legisladores resaltaba que se estaba hablando del sistema político y la corrupción. Con todas las letras lo dijo el cavallista Franco Caviglia cuando opinó que �las coimas que se pagaron en el Senado son el emergente de una corrupción estructural que invade elsistema republicano�. El frepasista Juan Pablo Cafiero alternó la conducción de la sesión con su presencia en su banca. Después de reconocer las dudas que le generaba que el Poder Legislativo cediera atribuciones al Judicial, dijo que �los senadores a los que se les pidió el desafuero ponen al Parlamento en estado de sospecha y le quitan legitimidad a los actos del Congreso�.
Tocado por el discurso del vicepresidente de la cámara, Roggero, dio un alegato vehemente y acalorado. �La moda es destruir lo político. Yo soy político y no tengo una actitud vergonzante por ello�, dijo el titular de la bancada peronista. Luego de señalar que �no todo es mugre, ni miseria en la política�, Roggero convocó a los diputados a no perder de vista el poder como posibilidad para transformar la realidad. �Qué tenemos que ver los legisladores con la millonaria deuda externa, qué tenemos que ver con la concentración económica y la desocupación�, dijo. Por último a valores de la militancia política como la lealtad, la convicción y �los códigos que ésta tiene, al igual que cualquier otra actividad�.
Con el proyecto recién aprobado, el titular de los diputados Rafael Pascual le comunicó la novedad al presidente provisional del Senado, José Genoud. El texto cruzó raudo los pasillos y poco después estaba en el orden del día de la Cámara alta. Durante toda la tarde de ayer, representantes de los bloques del PJ y la UCR conversaron sobre la necesidad de aprobarla, pero antes debían debatir una ley importante para el Gobierno: la emergencia económica, lo que implicaba la presencia del ministro de Economía, José Luis Machinea.
La presencia del ministro dilató la sesión. Recién hacia la medianoche los senadores comenzaron a tratar la ley que limita los fueros a casos de un pedido de arresto, con una clara intención de aprobarla. 

 

 

Las claves del proyecto

El proyecto sobre limitación de la inmunidad a parlamentarios y funcionarios públicos aprobado ayer en Diputados contempla:
Que cuando un tribunal le impute un delito a algún legislador o funcionario se deberá seguir con el procedimiento judicial hasta concluir con la causa.
Si un legislador o funcionario no concurre a prestar declaración indagatoria el tribunal deberá solicitar su desafuero, remoción o juicio político.
Una vez solicitado el desafuero, la Comisión de Asuntos Constitucionales tiene un plazo de 60 días para emitir un dictamen. Con o sin dictamen de la comisión, la Cámara tendrá un plazo máximo de 180 días para tratarla.
�No se podrá ordenar el allanamiento del domicilio particular o de las oficinas de los legisladores ni la intercepción de su correspondencia o comunicaciones telefónicas sin la autorización de la respectiva Cámara�.

 

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