Por Carlos Rodríguez
Desde Bahía Blanca
 La alternativa más terrible, lacerante para los familiares y también para los habitantes de esta ciudad, sigue afianzándose: las primeras pericias parecen corroborar que el crimen fue antecedido por una agresión sexual a la víctima. Los análisis confirmarían que las muestras de semen tomadas señalan la existencia de dos grupos sanguíneos diferentes, A y B. Esto significa que hubo terceras personas dentro del auto en el que iban Horacio Iglesia y María Victoria Chiaradía y que el móvil del crimen toma un cariz que podría ser el definitivo. Al mismo tiempo, en operativos de rastrillaje que se vienen realizando desde hace dos días a lo largo de la ruta 76, entre las localidades de General Lamadrid y Coronel Suárez, se está en la búsqueda de galpones donde podría haber estado oculto el Corsa gris en el que iban los jóvenes y que les fue robado por los asesinos. En las últimas horas aparecieron dos nuevos testigos que vieron el vehículo, con tres hombres a bordo, en las proximidades de esas dos ciudades. Ayer una gran movilización reclamó justicia.
Ayer por la tarde, fuentes de la fiscalía a cargo del doctor Eduardo D�Ampaire admitieron la existencia de semen, anticipada por Página/12. Insinuaron que habría que esperar el análisis de ADN, que puede demorar mucho tiempo, pero otras fuentes confirmaron que los análisis del semen recolectado en varios hisopos determinaron la presencia de dos grupos sanguíneos. Al grupo B pertenecía el joven Horacio Iglesia, pero también hay restos del grupo A, lo que está indicando casi sin errores que hubo una tercera persona y que hubo violación, aunque no aparezca ningún signo de violencia física en la chica.
Para respaldar los exámenes están las muestras de vello púbico. En principio, los peritos hallaron muestras que confirman que hubo por lo menos tres personas en el interior del automóvil.
Los investigadores, provistos del identikit de uno de los presuntos asesinos, comenzaron a realizar una reconstrucción posible del camino que recorrieron los jóvenes. La búsqueda está orientada sobre todo a la posible existencia de galpones dedicados a reducir vehículos robados. El hallazgo de algún refugio de ese tipo permitiría, cuando menos, ubicar al reducidor con el que se habrían contactado los asesinos para deshacerse del auto, que luego fue abandonado en un camino de tierra en la zona de Gral. Lamadrid. Los dos nuevos testigos, cuya identidad tampoco fue difundida, serían vitales para impulsar la investigación.
Anoche, por la TV local, grupos de oficiales de la policía de Bahía Blanca salieron a desmentir las versiones periodísticas que indican la presencia de casos de corrupción en la fuerza. Sin embargo, tanto los ediles del Partido Justicialista como de la Alianza, en declaraciones a este diario, coincidieron en señalar taxativamente que �esto tiene olor a venganza�.
En ese marco de renovadas sospechas, el Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires está a punto de ofrecer un rescate de 50.000 pesos para el que aporte datos de importancia, y comprobables, para favorecer la investigación. El misterio central es el recorrido del automóvil, que podría ser reconstruido en su totalidad durante el fin de semana, analizándose varias alternativas. De todos modos el eje central está puesto en la ciudad de Coronel Suárez. Los investigadores creen que allí podrían tener su ratonera los delincuentes que cometieron el crimen.
Como colofón, casual o no, se supo ayer que el 31 de agosto, cuando los chicos ya estaban desaparecidos, se tomaron medidas procesales para activar la investigación del caso de la prostituta que denunció hace tres años al comisario Héctor Iglesia, padre del muchacho. La semana próxima llegará una comisión de Homicidios, enviada desde La Plata, para ponerse a las órdenes del juez López Camelo, a cargo de la causa, que estaba virtualmente paralizada.
| �Que no quede impune�
Por C.R.
�Esto es lo mínimo que podemos hacer por ellos.� Sin gritos, apenas en un murmullo, la mujer que está en la cabeza de la marcha de silencio que reunió a más de 500 personas da la vuelta a la enorme manzana de la céntrica plaza Rivadavia, mientras desliza otra consigna de la movilización: �Que no quede impune, por favor�. La concentración fue convocada por los chicos de la ENET número uno, colegio al que concurre Martín, el hermano menor de Horacio Iglesia.
Estuvieron presentes los presidentes de los bloques de concejales de la Alianza, Francisco Arnaudo, y del PJ, Marcelo Feliú, y también el titular de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) de Bahía Blanca, Ernesto Malisia, pero los jóvenes son los verdaderos protagonistas. Al llamado de los chicos de la ENET, respondieron las chicas del Colegio Claret y del María Auxiliadora. La marcha comenzó puntualmente a las 18 y ya estaban las 500 personas. Con el correr de los minutos el número fue creciendo y seguía cerca de las 20, cuando los estudiantes llamaron a una reunión en el Claret para �seguir organizándonos porque esto no termina aquí�, aclara una alumna rubia con un aire a María Victoria. �Cualquiera de nosotras pudo ser ella y eso es lo que nos moviliza�, sentencia. |
EL TESTIMONIO DEL PADRE DE MARIA VICTORIA
�El llamado fue natural�
Por C. R.
�Le gustaba poder enseñarles a los chicos, tal vez por ser hija de una docente. Era inteligente...� La frase de Roberto Chiaradía, quien recuerda con dulzura que su hija María Victoria estudiaba para ser profesora de inglés, se interrumpe de pronto con una reflexión entre líneas que lo define todo: �Me cuesta decir �era��. En diálogo con algunos medios nacionales �entre ellos Página/12�, con los que aceptó reunirse en forma conjunta a pesar del dolor que lo atraviesa, el ingeniero Chiaradía aseguró que tiene un �excelente concepto� del comisario Héctor Iglesia, el padre de Horacio, asesinado junto con María Victoria. El papá de la joven dice que no quiere pensar en los móviles de lo que para él es �un hecho imposible, realizado en una forma que, para mí, es como si estuviera fuera de la galaxia�.
Roberto, ingeniero civil, tiene 53 años y su esposa, Mirta, 52. �Ella está más fuerte que yo, que ante ustedes puedo parecer fuerte, hecho por una estructura de hierro, pero cuando llegue a mi casa me voy a quebrar.� Más que hablar, Roberto desnuda el alma. Y se quiebra mucho antes, cuando apenas se levanta de la mesa del bar del Hotel Argos, donde se realizó el encuentro. A lo largo de la charla expresó la única satisfacción que guarda en el corazón y que lo acompaña a pesar de todo: �Ella fue feliz, de eso soy consciente. Fue feliz desde que nació hasta la semana pasada...�
Dijo que Horacio y su hija estaban �iniciando una relación� y que todavía no pensaban en casarse. Por eso, el trato entre las dos familias �era normal, amable, pero todavía no actuábamos como consuegros�, de manera que no había reuniones formales entre los Chiaradía y los Iglesia. Como muestra de que la relación era �muy buena�, dice que el velatorio y el sepelio conjuntos fueron �una decisión espontánea�.
Hasta el hallazgo de los cuerpos, la espera de los Chiaradía fue �con mucha esperanza de que no hubiera pasado nada� porque el último llamado que hizo María Victoria, a las 5.29 del 27 de agosto, día de la desaparición, �fue totalmente natural�. La chica les dijo que habían sufrido un contratiempo con el auto y que �en una hora más� estaría de regreso en la casa. �Avisale a la mamá de Horacio�, fue el último pedido que hizo la chica y después vino el silencio.
Roberto Chiaradía se lamenta por no haber obtenido de inmediato, por medio de la investigación policial, el dato preciso sobre el lugar desde donde se hizo la llamada. �Eso hubiera servido para tener la punta del ovillo.� Cuenta que todavía no han recibido el listado de llamados, información que no puede ser aportada por la empresa Telefónica porque �carece de los elementos técnicos necesarios�. Les pidieron un plazo de siete días a partir del ingreso del llamado, pero todavía no hay dato alguno. Los investigadores les dijeron que el secuestro puede haber ocurrido �después del llamado, porque es raro que ella hablara con tanta tranquilidad�.
Durante los ocho días que duró la búsqueda de los chicos �en ningún momento hablamos con (el comisario) Iglesia sobre la posibilidad de una venganza contra él. Nuestra única preocupación era: hoy ¿por dónde salimos a buscarlos?�. Agobiado por el recuerdo de la búsqueda, estima que habrán caminado �mil kilómetros por día�. Ahora dice que lo único que quiere es que el crimen �se esclarezca lo antes posible� porque �lo único que importa es que la Justicia sea implacable�. Y remarca: �Implacable�. Aclara que sabe �cómo están en la Argentina las cosas en materia de justicia, pero espero que a partir de este caso empiecen a cambiar�. Y se va recordando que a su hija le gustaba �toda la música�, desde Rodrigo hasta la clásica. Y que fue feliz hasta que la dejaron.
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