Por Eduardo Videla
 Algún día, los porteños podrán volver a ver la 9 de Julio, la calle Florida o la avenida Callao libres de los carteles publicitarios y marquesinas que ocultan los frentes de edificios. La eliminación de la contaminación visual es uno de los ejes del programa de recuperación del espacio público, que lanzó ayer el gobierno porteño, y que prevé además restricciones a la ocupación de las aceras con puestos de venta y mesas de locales gastronómicos y la eliminación de los cableados aéreos en 12 mil cuadras de la ciudad. Los anuncios se realizaron en coincidencia con la asunción del titular de la flamante Unidad de Gestión del Espacio Público, el arquitecto Juan Carlos Poli.
La apuesta es fuerte. Para el acto de asunción, el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra, convocó a representantes de la Cámara Argentina de Anunciantes en la Vía Pública, la Cámara Argentina de Agencias de Publicidad en la Vía Pública, las empresas de servicios públicos y las de televisión por cable, entre otras. �Vamos a recuperar el espacio público, pero no contra una determinada actividad sino mediante la búsqueda de racionalidad y consenso con los distintos sectores�, dijo Ibarra frente a los representantes del sector empresario.
Para esa misión, el jefe de Gobierno designó a un hombre que no proviene de los equipos técnicos de la Alianza, pero cuenta con antecedentes tales como haber sido gerente de Gestión del Programa de Revitalización de la Avenida de Mayo, coordinador del proyecto de Restauración de la Catedral y vicepresidente de la Comisión Nacional de Museos, Monumentos y Lugares Históricos.
�Es la primera vez que la ciudad se propone recuperar su espacio público�, dijo Poli a Página/12. El flamante funcionario tiene dos misiones arduas: la redacción de un nuevo Código del Espacio Público y la elaboración de las bases para la licitación del mobiliario urbano de la ciudad, que incluye desde las paradas de colectivos y puestos de flores hasta los carteles publicitarios.
Mientras tanto, deberá abocarse a �hacer cumplir las normas vigentes�. La primera medida que adoptará en su gestión será �la remoción de todos los elementos ubicados en las ochavas, como kioscos, puestos y carteles, que impiden la visión a los conductores de vehículos y disminuyen la seguridad en las esquinas�. De acuerdo con un relevamiento, unas 2600 esquinas que presentan obstáculos visuales a los automovilistas.
El acto de asunción se llevó a cabo en un colmado Salón Blanco del Palacio de Gobierno. Antes, se exhibió un audiovisual que plasmó en imágenes la degradación del espacio público, que podría haber llevado el título �Buenos Aires, ciudad hostil�. También hubo imágenes que permitieron imaginar a Corrientes, Boedo o Florida sin los letreros y marquesinas estridentes de la actualidad.
�Nuestra ciudad hoy está abrumada de publicidad �sentenció Poli�. En una sociedad de libre mercado la publicidad tiene un rol, pero la forma en que se usa en nuestra ciudad no le sirve a nadie: hay una deslealtad entre los propios comerciantes, que compiten para ver quién pone su cartel más grande o más afuera de la línea de edificación.�
Las acciones que encarará el nuevo organismo comprenden, además:
 La recuperación de las calles y avenidas más tradicionales �Florida, Callao, Cabildo, Caseros, Rivadavia, Sáenz y Santa Fe�, poniendo en valor sus elementos más distintivos.
Liberación del espacio público de la ocupación indebida de elementos que impiden el libre tránsito. Las veredas porteñas, se comprobó, están ocupadas por 1974 elementos como heladeras o expendedores.
Ordenar la ubicación de mesas y sillas frente a establecimientos gastronómicos. Según el relevamiento realizado, 762 establecimientos gastronómicos ubican a sus clientes en las veredas.
Remoción de columnas (tipo jirafa) con publicidad, en cumplimiento de la ordenanza que dispuso su eliminación. Hay 412 columnas junto a las autopistas, que generan distracción a los automovilistas, y otras 1417 instaladas en el cordón de las veredas.
Curar los árboles dañados y completar el arbolado urbano.
Soterramiento de cables aéreos de televisión por cable, teléfonos y electricidad.
Retiro de marquesinas y carteles para poner en valor los frentes y garantizar la seguridad de los peatones ante eventuales desprendimientos.
Retiro de publicidad informal pegada en postes de semáforo y luminarias.
Según anunció Ibarra, habrá un período de gracia para consensuar las acciones y para que los comerciantes se ajusten a la ley. �Cuando venzan los plazos, vamos a ponernos firmes en aplicar las sanciones que correspondan�, advirtió el jefe de Gobierno.
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