Por José Natanson
 Contra lo que se pensó en un primer momento, el famoso �relanzamiento� del Gobierno se haría de manera escalonada, a lo largo de varios días y no de un solo golpe. El primer cambio, que se produjo el viernes, fue la salida anunciada de Juan Llach del Ministerio de Educación. Ayer, una fuente muy cercana a Fernando de la Rúa aseguró a Página/12 que la siguiente renuncia sería la del jefe de la SIDE, Fernando de Santibañes, uno de los funcionarios más comprometidos por el affaire del Senado. En las últimas horas, el Presidente comenzó la complicada tarea de buscarle un sucesor al ex banquero.
Las versiones sobre cambios en el Gabinete comenzaron a circular no bien se desató el escándalo por los supuestos sobornos. Diez días atrás, cuando volvió de su gira, De la Rúa intentó bajar la ansiedad general. Decidido a manejar sus propios tiempos, no quería maniobrar bajo presión y por eso esperó más de una semana antes de aceptar la primera renuncia.
Fue la de Juan Llach, que ya le había dicho en dos oportunidades que quería abandonar el cargo. El Presidente le pidió un tiempo, hasta que el viernes aceptó la salida de su amigo. �Van a pasar algunos días para los próximos cambios. La idea era despegar a Llach del escándalo del Senado�, señalaban ayer en el Gobierno. Algo de esto reconoció ayer el Presidente, quien �por primera vez� admitió las próximas modificaciones. �Ya vendrán otras renuncias, pero lo que no hay son fechas y plazos�, aseguró.
Ayer, una fuente de acceso cotidiano al despacho presidencial aseguró a este diario que el �relanzamiento� de la gestión no se hará de una sola vez. �Los cambios se van a ir produciendo uno por uno, con el paso de los días�, señaló la fuente. Y agregó que la próxima renuncia sería la de De Santibañes a la jefatura de la SIDE.
La idea de aplicar los conceptos del management empresarial a la gestión pública no pareció darle buenos resultados, ya que su gestión estuvo sembrada por enfrentamientos y desmanejos prácticamente desde que asumió. El escándalo del Senado sólo contribuyó a complicar las cosas. Todas las versiones coincidieron en que los fondos para los supuestos sobornos habrían salido de la SIDE, el único organismo que dispone de dinero en cantidad sin necesidad de rendir cuentas. Para colmo, Carlos Liporaci no quedó conforme con las explicaciones sobre los movimientos financieros de la secretaría y planea llamarlo a declarar nuevamente.
Todo esto convirtió a De Santibañes en uno de los funcionarios más comprometidos en el affaire. Sus allegados dicen que está cansado, que hace varios días que no pasa por la SIDE y que está dispuesto a asumir con tranquilidad su renuncia. Por eso, en las últimas horas De la Rúa comenzó la difícil tarea de buscarle un reemplazante.
En un principio, el Presidente evaluó la posibilidad de ascender a Darío Richarte, el número dos de la secretaría, amigo del ex banquero y hombre de Antonio de la Rúa. Pero todo indica que cambió de opinión. �No va ser Richarte. De la Rúa quiere a alguien de más confianza�, señaló un funcionario muy cercano al Presidente. En la ronda de nombres, el que sonaba con más fuerza era el del delarruista histórico Enrique Olivera.
La eyección del ex banquero sería el primer cambio de Gabinete ligado a la crisis del Senado. Se produciría en los próximos días, seguido por las demás modificaciones. Aunque hubo rumores sobre el alejamiento de Rodolfo Terragno de la jefatura de Gabinete y de Graciela Fernández Meijide de Desarrollo Social, lo más probable es que la siguiente salida sea la de Alberto Flamarique. El ministro de Trabajo es, junto a De Santibañes, el otro funcionario sospechado por la crisis del Senado. Sin embargo, De la Rúa lo sigue considerando uno de sus colaboradores más valiosos. Si bien ya aceptó su salida del ministerio, planea designarlo en algún otro lugar de su administración, un lugar con un perfil público más tenue y que al mismo tiempo le permita continuar muy cerca del Presidente.
EN URUGUAY
De la Rúa y los sobornos
El presidente Fernando de la Rúa negó ayer, desde Montevideo, que el presunto pago de sobornos en el Senado haya desprestigiado a la Argentina en el mundo. Al arribar a esta ciudad donde participó junto al presidente uruguayo Jorge Batlle de los actos conmemorativos por el 150º aniversario de la muerte del general José Gervasio de Artigas, De la Rúa señaló respecto del escándalo en la Cámara alta que �hay una firme posición institucional y está actuando la Justicia. Así que ése es el camino. Es decir, que actúen las instituciones y, en este caso en particular, la Justicia�. El Presidente también manifestó su deseo de recuperar el sentido del patriotismo, �que no es una palabra vana sino una necesidad de estos tiempos hacia nuestros pueblos que tenemos que hacer grandes esfuerzos para salir adelante�. |
|
