Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira


KIOSCO12

LIPORACI BUSCA PRUEBAS EN EL CONGRESO Y LA SIDE
Una ofensiva en dos frentes

El juez que investiga las presuntas coimas postergó una inspección ocular en el Senado a la espera de una decisión de los senadores. De Santibañes está cada vez más cerca de ser citado como acusado.

Por Adriana Meyer

t.gif (862 bytes)  La pulseada entre el Senado y la Justicia en el escándalo de los sobornos se empezará a jugar fuera de los Tribunales. El juez federal Carlos Liporaci pensaba presentarse a las once en el Parlamento con la intención de encabezar una “inspección ocular” al despacho del cuestionado senador Emilio Cantarero y a otras dependencias de la Cámara alta. Pero suspendió la medida hasta que el Senado vote la autorización que necesita, según la nueva Ley de Fueros. El magistrado también forcejea con el Poder Ejecutivo. El director del diario Río Negro, Julio Rajneri, reveló ayer que el titular de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE), Fernando de Santibañes, le confirmó que hubo una diferencia de seis millones de pesos en las cuentas de la SIDE (ver aparte). El jefe de los espías está cada vez más cerca de ser convocado a dar explicaciones pero no como testigo sino como acusado.
Ese movimiento de fondos ocurrió entre el 12 y 13 de abril, y al día siguiente el Gobierno anunció que las negociaciones por la reforma laboral se habían desbloqueado en el Congreso. Rajneri, ex ministro de Educación radical, ratificó el contenido del artículo que había publicado el matutino que dirige el lunes 18 de agosto. Río Negro había revelado que hubo un “movimiento de fondos” por “algo más de seis millones de pesos” entre las tres cuentas que la SIDE posee en el Banco Nación (BNA). Ante la Oficina Anticorrupción (OA), De Santibañes explicó que esa baja se debió a que “se agotaron los stocks en efectivo de la cuenta del Tesoro” y que “recibimos dos millones menos de lo previsto del Ministerio de Economía”.
Liporaci solicitó al BNA informes sobre los movimientos en todas las cuentas que la SIDE tiene en esa entidad porque aún no cuenta con los datos completos. Lo que recibió el viernes son los mismos documentos que posee la OA y le resultan insuficientes. El encargado de las finanzas de la SIDE, Juan Gallea había informado sobre la cuenta 737/94 del BNA, que se utiliza para salarios y otros gastos, pero no sobre la 1581/11 y la 636/87. Cuando declaró como testigo este funcionario se amparó en el secreto de Estado ante varias preguntas que le fueron formuladas.
Aunque evaluaba la posibilidad, Liporaci no llegó a pedirle a De la Rúa el levantamiento del secreto de Estado. El Presidente firmará hoy un decreto por el cual se le permitirá a la SIDE suministrar, exclusivamente al juez del caso, la información secreta que reclama (ver página 6). La iniciativa fue del propio De Santibañes con el propósito de demostrar que el organismo a su cargo no habría tenido nada que ver en el supuesto pago de sobornos en el Senado.
Si bien el Gobierno permitirá el acceso a los manejos secretos del dinero de la SIDE, anticipó que descargará sobre el juez toda la responsabilidad si trascienden esos datos confidenciales. Esto no cayó muy bien en el juzgado de Liporaci, donde ya estudian alternativas para esquivar la carga. Una posibilidad sería la indagatoria de De Santibañes sobre la que el juez no quiso opinar ayer pero que sus allegados dan como un hecho. “Sería una forma de cortar por lo sano porque de ninguna manera se puede responsabilizar a la Justicia por una eventual filtración de datos tan sensibles”, comentó uno de sus colaboradores a Página/12.
Liporaci interrogará hoy como testigo a la subsecretaria de Legal y Técnica de la Presidencia, María Elena Machinea, para que indique si hubo reasignación de fondos reservados a través de decretos presidenciales. Los fiscales habían pedido un allanamiento a esa dependencia pero Liporaci prefirió citar a la funcionaria, prima del ministro de Economía.
El anunciado allanamiento al Senado sería tratado hoy en la Comisión de Asuntos Constitucionales pero la comisión judicial recién podrá concretarlo si lo aprueba la mayoría de los senadores en el recinto.

 

PRINCIPAL