The
Guardian
de Gran Bretaña
Por
Maggie OKane
Desde Belgrado
Miles de partidarios de la oposición, agitando volantes que
proclamaban que el presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, estaba quebrado
como un sonajero, inundaron anoche el centro de Belgrado en una
prueba de fuerza luego de la disputada elección del domingo. Era
la cuarta noche consecutiva de enormes protestas. La policía ordenó
a los manifestantes que desarmaran un podio montado frente a las puertas
de Comisión Electoral Federal (CEF), pero de inmediato éstos
se reagruparon a poca distancia. Se espera que los resultados finales
de las elecciones presidenciales sean anunciados esta noche. Pero como
Milosevic controla la Comisión Electoral, muchos esperan que los
resultados sean fraguados.
El partido de Milosevic admitió que el principal candidato de la
oposición, Vojislav Kostunica, ganó la primera vuelta de
la elección, pero señaló que no logró superar
el 50 por ciento necesario para ganar en primera vuelta. En Belgrado,
a medida que la gente salía a la calle poco después de las
17, antes de la manifestación planeada para las 20, nadie parecía
contemplar la posibilidad de una segunda vuelta. Kostunica ya rechazó
de plano la propuesta de ballottage hecha por Milosevic.
Ya van tres días en que se ignoran los pedidos en Yugoslavia y
desde la comunidad internacional para que Milosevic acepte su derrota.
El presidente Bill Clinton acusó ayer al presidente yugoslavo de
tratar de robarle la elección a la oposición y dijo que
Estados Unidos apoyaría al pueblo de Serbia. A esta distancia
parece que tuvieron elecciones libres y que alguien se las trata de quitar,
afirmó. Sin embargo, Milosevic fue procesado por el Tribunal Internacional
de Crímenes de Guerra en La Haya, por lo que no tiene muchas alternativas
si decide abandonar el poder. De hecho, Washington ya ofreció una
recompensa de 5 millones de dólares por su captura para ser juzgado
en La Haya.
Había temores anoche de que Milosevic intentaría utilizar
a sus paramilitares para dispersar la manifestación. Antes que
comenzara el mitin, varias docenas de policías merodeaban por las
zonas céntricas de la capital con las manos en los bolsillos. Los
líderes de la oposición quieren evitar la violencia y temen
que el régimen inicie provocaciones. Nuestra posición
es evitar cualquier conflicto; somos los ganadores y no necesitamos conflictos,
dijo Zoran Djindjic, un dirigente opositor. Activistas estudiantiles advirtieron
que agentes del gobierno vestidos con la remera de la protesta podrían
provocar choques en la manifestación. Se rumorea que la policía
confiscó unas 4 mil remeras, impresas con un puño cerrado,
el símbolo del movimiento Otpor (resistencia en serbio).
Queremos advertir que no somos responsables por eso, porque nuestros
métodos no son violentos, enfatizó el militante Vukasin
Petrovic, un arquitecto de 32 años. Pero Petrovic señaló
que en estos momentos estamos ignorando a Milosevic. Es un nuevo
fenómeno psicológico que no vi nunca antes: puede hacer
lo que quiera. Puede decir que es el rey del mundo, pero a nadie le importa.
Mientras tanto, antiguos aliados de Milosevic se preparan para huir de
un barco que se hunde, y amenazan con abandonar la coalición oficialista
en el Parlamento serbio. Vojislav Seselj, líder del extremista
Partido Radical, está sopesando su salida, que significaría
la caída del gobierno de Milosevic. Es significativo que los seguidores
de Seselj que estuvieron entre las tropas de choque durante las
limpiezas étnicas de Milosevic en Bosnia y Kosovo
ya comienzan a desertar de sus filas. Otro ex aliado, el equívoco
Vuk Draskovic, también está pagando el precio por negarse
a integrar al frente unido contra Milosevic. Después de una devastadora
derrota para su partido, el Movimiento de Renovación Serbia, Draskovic
admitió públicamente ayer que se equivocó al no apoyar
la candidatura de Kostunica.
El régimen todavía no parece reconciliarse a su derrota.
Pero los medios de comunicación que tiene a sus órdenes
no saben cómo reaccionar. Los dos canales de televisión
del gobierno, BK TV y Studio B, sorprendieron ayer a sus espectadores
con extensas crónicas sobre la conferencia de prensa de la oposición,
donde se anunció que Milosevic había perdido las elecciones.
Por primera vez, parecería que Milosevic comienza a perder el control
sobre una de sus armas más poderosas.
|