Frente a la falta de alternativas para superar el paro por tiempo indeterminado que llevan adelante los transportistas de cargas liderados por la CNTA, que hoy entró en su cuarto día, el Gobierno amenazó con el uso de la fuerza contra quienes interrumpan el tránsito en las rutas. �Si hay un piquete que está amenazando a la gente, no podrá seguir funcionando, va a intervenir la Justicia y se van a adoptar las medidas necesarias�, expresó el secretario de Seguridad, Enrique Mathov, tras una reunión del Consejo de Seguridad Permanente. Una vez más, desde el Estado se invocó el fantasma de la presencia de �provocadores y agitadores� entre los camioneros que participan de los piquetes. Sin embargo, aunque extraoficialmente, el Ministerio de Infraestructura habría ofrecido a los camioneros un gasoil a 45 centavos en todas las estaciones. En los distintos sectores de la economía, en tanto, comenzó a mostrarse preocupación frente a un posible escenario de desabastecimiento. Aunque se mostró convencido de que con medidas preventivas no será necesario hacer uso de la fuerza, Mathov indicó que la policía o la Gendarmería podrán actuar en las rutas sin necesidad de la orden judicial si descubren que un camión interrumpe el tránsito. Por su parte, el secretario de Transporte, Jorge Kogan, minimizó la protesta al considerar que el paro involucra a unos 1200 camiones, un cifra �ínfima� en relación con el parque total del país. Uno de los mercados en los que más se sintió el impacto de la medida fue en el de Hacienda de Liniers. Contra las 10 mil cabezas de ingreso diario promedio, ayer entraron sólo dos camiones que totalizaron 97 animales. Sin embargo, algunos operadores estimaron que en los próximos 10 días no se registrarán problemas de abastecimiento. El viernes pasado se registró un ingreso record de hacienda, con el que supermercados y frigoríficos realizaron una fuerte acumulación de stocks. Así, al menos en los próximos días, los consumidores no se verán afectados por la medida de fuerza. No es igual la situación para los productores, quienes sufrirán las consecuencias de las demoras en el transporte de la hacienda de invernada, y consecuentemente en sus ingresos. Los animales que se excedan en el peso, o pierdan kilaje, tendrán que venderse como haciendas de otras categorías que cotizan a valores por debajo de los que fija el mercado para los novillos gordos. En el sector agrario el paro podría afectar la continuidad de la siembra de granos gruesos, en especial en el área pampeana, donde el implante de soja, girasol y maíz se encuentra en una etapa clave. La interrupción del ciclo productivo por falta de insumos provocaría mermas importantes en las proyecciones de siembra para este año. En el caso de los chacareros el problema es aún más grave, pues adquieren sus insumos a medida que avanzan en las siembras y sujetos a obtener fondos frescos o créditos de parte de sus proveedores. Estos productores acumulan deudas impagas que rondan el 40 por ciento del valor total de compras de insumos que realizaron durante la última campaña agrícola. En el Mercado Central de Buenos Aires, el ingreso de frutas y verduras fue ayer martes, al igual que el lunes, un 20 por ciento inferior al habitual. La merma no fue muy significativa porque muchos productores apuraron el envío de frutas y verduras durante el fin de semana. Recién a partir de hoy podrá tenerse un panorama más claro de la influencia de la medida de fuerza de los camioneros.
ANALIZAN UNA REBAJA DEL GASOIL El vicepresidente de la CNTA, Jorge Fernández, informó a Página/12 a última hora de ayer que el Gobierno propuso un gasoil a 45 centavos en todas las estaciones de servicio y sin necesidad de abonar con tarjeta de crédito especial. En contra de todos los anuncios hechos desde el Ministerio de Economía acerca de la imposibilidad de reducir el precio del gasoil, el nuevo valor sería resultado de un acuerdo entre el Ejecutivo y la petrolera española Repsol-YPF.
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