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DISGUSTO EN EL BLOQUE DE SENADORES DEL PJ CON EL SANTAFESINO
Massat pidió licencia y no explicó

Sus colegas del Senado esperaban que volviera de Santa Fe y les explicara las acusaciones en su contra. Lo único que recibieron fue una llamada pidiendo una licencia sin sueldo de 60 días �para defenderme ante la Justicia�.

Massat es el segundo que
 pide licencia en el bloque.

Su propia sobrina lo acusó por enriquecimiento ilícito.


Por Felipe Yapur

t.gif (862 bytes) Podría considerarse un preaviso. Al menos eso pensaron en el bloque de senadores justicialistas luego que el representante por Santa Fe, Jorge Massat, le anunciara telefónicamente a su jefe de bancada, José Luis Gioja, que había decidido pedir una licencia por 60 días sin goce de sueldo �hasta que se aclare mi situación en la Justicia�. Pero a pesar de que Gioja dijo que el bloque accedería a la solicitud, Massat todavía no envió una comunicación oficial. De esta manera, el bloque del PJ ya suma dos senadores que piden licencia �el primero fue el salteño Emilio Cantarero�, ambos por encontrarse sospechados de haber participado en hechos ilícitos. 
Massat no goza de la simpatía de los integrantes del bloque. Y con la actitud de ayer no logró mejorar su situación. Tal vez creyó que la licencia aflojaría la tensión que se generó en la bancada debido a su prolongada ausencia y a la falta de explicaciones, pero se equivocó de cabo a rabo. �No dice nada, lo que sabemos es lo que dicen los diarios. Y ahora nos llama diciendo que se tomará una licencia. Este muchacho es una máquina de equivocaciones�, confió un malhumorado senador justicialista.
Los yerros del santafesino podrían deberse a su cada vez más complicada situación jurídica. Es que su sobrina, Silvina Fantín, profundiza cada vez más sus denuncias por enriquecimiento ilícito, evasión fiscal y lavado de dinero del senador. El miércoles relató a este diario la oportunidad en que el legislador le entregó, en Buenos Aires, 80 mil pesos en efectivo para que transportara a Corrientes. En su denuncia, Fantín implicó también a los hermanos del legislador, Gladys y Omar Massat, este último senador provincial por el PJ.
Massat cometió una de sus primeras equivocaciones el martes pasado, día en que se había comprometido a regresar a Buenos Aires para dar las explicaciones del caso y en que el bloque lo esperaba. Toda la tarde sus colaboradores juraron que en cualquier momento llegaba, pero los senadores tuvieron que escucharlo en el programa de Mariano Grondona. Obviamente, esta actitud acrecentó el desagrado en el bloque.
Ayer, cuando esperaban nuevamente alguna señal del santafesino, llegó la llamada telefónica. Luego de que Massat le dijera a Gioja que no pensaba volver porque primero pretendía �defenderse� ante la Justicia �debe comparecer en dos juzgados, uno de la ciudad santafesina de Reconquista y otro en Corrientes�, le comunicó que había decidido actuar de la misma forma que su colega Cantarero: solicitar una licencia por 60 días sin goce de haberes. Gioja prácticamente se quedó sin habla, pero le adelantó que cuando envíe la solicitud, el bloque se la aceptará. 
El miércoles, el jefe del bloque opositor había revelado que la falta de explicaciones por parte de Massat había generado un malestar generalizado en el bloque. El preaviso telefónico produjo otra vez un malhumor sólo atenuado por la inquietud que produjeron los cambios en el gabinete del presidente Fernando de la Rúa.
Pero éste parece que no será el último pedido de licencia que reciba el bloque justicialista. Ayer hubo fuertes versiones que sostenían que un tercer legislador del PJ asumirá igual actitud que Cantarero y Massat, y todas las miradas se dirigen al rionegrino Remo Costanzo. Fuentes legislativas sostienen que la decisión de Costanzo tiene al menos dos razones. Por un lado existe un problema familiar; por el otro, recuerdan que el senador enfrenta una virulenta interna en su provincia. La semana pasada, el PJ rionegrino le pidió la renuncia.

 

 

La Tablada sin debate

La Alianza no pudo tratar en Diputados el proyecto de ley que, como reclama la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), promueve una segunda instancia judicial para los trece presos por el ataque al cuartel de La Tablada. Sólo 80 diputados estuvieron presentes en el recinto, semivacío por la inasistencia de los bloques completos del PJ y Acción por la República. Ante esta situación, y después de meses de debates y de sesiones levantadas por falta de quórum, los diputados del oficialismo dieron por concluido el último intento de aprobar la referida ley. Entre tanto, el recién nombrado ministro de Justicia, Jorge de la Rúa, instó a los legisladores a tratar el proyecto en el Congreso. Aunque después aclaró que �lo que se está debatiendo es exclusivamente� el tratamiento de la ley, rechazando así la posibilidad del indulto. Ayer, mientras en la Cámara Baja la sesión volvía a fracasar, los presos cumplieron un mes de huelga de hambre en reclamo de un nuevo juicio.

 

 

REACCION ENTRE SENADORES DE LA UCR
Poco Frepaso, poca UCR

Los cambios en el gabinete nacional obligaron a que la anunciada reunión entre el bloque de senadores radicales y el presidente de la UCR, Raúl Alfonsín, se postergara por unas horas. Pero una vez terminado el acto de asunción de los nuevos funcionarios, casi la totalidad de la bancada se encontró con el ex presidente. Oficialmente, surgió un respaldo a los cambios ordenados por el presidente Fernando de la Rúa. Pero pocos senadores pudieron disimular su �molestia� ante la sensación de que la estructura partidaria no fue beneficiada. Uno de ellos fue contundente al graficar la opinión generalizada en el bloque: �Poco Frepaso, poca UCR, muchos amigos�.
En principio, la reunión estaba planificada para que las nuevas autoridades de la bancada oficialista se presentaran ante el presidente del partido. Pero, enterados de los recambios ministeriales, fueron llegando al edificio anexo al Comité Nacional de la UCR la casi totalidad de los integrantes del bloque. Hasta el renunciado senador santacruceño Juan Ignacio Melgarejo estuvo presente. 
Se notó la ausencia del riojano Raúl Galván, quien no disimula su enojo con el Presidente y las autoridades partidarias porque tuvo que renunciar a la presidencia del bloque por expreso pedido de De la Rúa, frente a la crisis de los sobornos en el Senado.
Durante una hora y media conversaron, dos rondas de café se consumieron durante la reunión. Alfonsín eludió toda posibilidad de hablar con la prensa y dejó que el único que lo hiciera fuera el jefe del bloque, Mario Losada, quien reconoció que se habló de los cambios en el gabinete pero sólo �para darle todo el respaldo al Presidente, que fue elegido para adoptar este tipo de decisiones�. Losada negó que se hubiera evaluado puntualmente cada una de las modificaciones en el equipo. Pero igualmente trascendió que muchos de los legisladores creen que la decisión de De la Rúa terminó fortaleciendo la participación de hombres de confianza del Presidente, prescindiendo de la vinculación partidaria.

 

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