Por Felipe Yapur
 Cuando Fernando de la Rúa lo dijo por televisión, el senador radical Mario Losada y su familia gritaron de alegría. Es que el Presidente aprovechó su estadía en la provincia de Formosa para anunciar que el legislador misionero era el elegido para ocupar el puesto de presidente provisional del Senado, ocupado hasta el domingo pasado por el cuestionado José Genoud. Losada, virtual vicepresidente, aseguró a Página/12 que los lineamientos centrales de su gestión estarán destinados a �fortalecer la Alianza� y aclaró que comparte los reclamos de Carlos �Chacho� Alvarez sobre la necesidad de �trabajar en favor de la transparencia porque es una de las banderas� de la coalición gobernante.
Pero al parecer la sorpresa demostrada por Losada no era tal. Fuentes del radicalismo sostienen que el misionero recibió llamados de un par de colaboradores del Presidente quienes le anticiparon la decisión. La elección del sucesor de Genoud trae aparejada una nueva complicación para la bancada oficialista, que deberá elegir por segunda vez en un mes al presidente de bloque. En un principio el tema quedó postergado al menos hasta después de la sesión de hoy, donde se tratará la renuncia de Alvarez a la vicepresidencia. Sin embargo, anoche, mientras Losada se encontraba con De la Rúa en aeroparque, en los pasillos del Senado circuló con insistencia la versión de que el próximo jefe de bloque radical sería el puntano Jorge Agúndez, un legislador de marcado bajo perfil.
Losada se mostró exultante. No pudo disimular la alegría que le causaba ser el elegido a un cargo por el que ya había competido el año pasado y que había resignado ante el hoy renunciante Genoud, uno de los senadores más cuestionados por Alvarez durante el escándalo por los sobornos. El misionero consideró como un hecho �impensado� la designación y admitió �estar preocupado� por lo que significa el cargo que obtuvo ayer. Pero afirmó que piensa �responder a la responsabilidad sin temor. Me tocó un momento complicado, pero ya pasé otros momentos difíciles, como cuando estuve al frente del partido o durante la dictadura militar�, dijo.
Durante la mañana de ayer, el bloque radical buscó tranquilidad para continuar debatiendo el nombre del futuro presidente provisional de la Cámara alta. Es por ello que abandonaron los espaciosos salones del Senado para encontrarse en la sede del Círculo de ex Legisladores, ubicado en Bartolomé Mitre y Ayacucho. Estuvieron casi todos los senadores. El primero en hablar fue el catamarqueño Pedro Villarroel, quien anunció que no sería de la partida por entender que nadie lo había siquiera consultado para competir por el cargo. El cordobés Luis Molinari Romero también retiró su postulación, no sin antes sostener que a su opinión el mejor candidato era Losada. Con estas bajas todo pareció indicar que el misionero era el elegido, pero el porteño José María García Arecha recordó que él no había desistido de su deseo por ser el segundo de De la Rúa.
Entonces, acordaron entregar esta dupla al Presidente. El encargado de comunicar la decisión fue el veterano Luis León. Según relataron fuentes cercanas al bloque, el Presidente le habría recomendado al legislador chaqueño que era preferible una terna. El tercer nombre no tardó en aparecer y esta vez fue el chubutense Juan Carlos Altuna quien llamó a De la Rúa: �El tercer candidato es León�, dijo el legislador patagónico mientras el Presidente ascendía por las escalerillas del avión que lo trasladaría a Formosa.
Recién poco después de las 22, Losada pudo reunirse con De la Rúa. Una vez más frente a las cámaras de televisión, el Presidente reiteró su apoyo a la designación de Losada, y de quien dijo que �tendrá la responsabilidad de cuidarme cuando yo viaje a España la próxima semana�. Como todavía el Senado es el que debe votar el cargo de Losada, el Presidente no perdió la oportunidad para �agradecerle al bloque justicialista de senadores por su disposición y el reconocimiento de que el presidente provisional debe seralguien del mismo signo político del partido gobernante�. A su lado, Losada no paraba de sonreír.
MARIO PONTAQUARTO TAMBIEN RENUNCIO A SU CARGO
Ahora sólo queda Alasino
Por F.Y.
Mario �Tato� Pontaquarto dimitió ayer de manera indeclinable a la estratégica Secretaría Parlamentaria del Senado. De esta manera, se convierte en la segunda baja de aquel trío que ejerció el poder real en la Cámara alta y que integró junto al también renunciado presidente provisional del cuerpo, José Genoud, y por el ahora único sobreviviente, el justicialista Augusto Alasino.
�Ya la presenté y espero que mañana (por hoy) los senadores la acepten durante la sesión�, dijo Pontaquarto a este diario, quien además recordó que la decisión la había tomado hace varios días �cansado por toda la polémica que se había desatado� por el escándalo de los sobornos. �Yo quería irme, pero después de que lo hiciera (el senador justicialista Emilio) Cantarero. Pero con la renuncia de (Carlos �Chacho�) Alvarez primero, y ahora con la de Genoud, yo no tengo razones para continuar dilatando mi permanencia�.
Pero Pontaquarto no pasará a integrar la interminable lista de desocupados: es empleado de la planta permanente de la cámara. Pero también porque afirma que primero debe saber si en el bloque radical continuarán requiriendo sus servicios. Si por si acaso aquello no resultase tiene, como un as en la manga, �la oferta que recibí del Ministerio del Interior�, dijo, misterioso.
Tato, como lo llaman propios y extraños en la cámara, llegó a la Secretaría Parlamentaria en diciembre del año pasado gracias al fuerte apoyo que le brindó Genoud y al beneplácito de Alasino. Los tres conformaron el grupo que más hostigó Alvarez en su pelea por transparentar el Senado. Estos ejercían el poder en el cuerpo y tenían la potestad de impulsar, controlar y hasta ignorar cualquier iniciativa parlamentaria. La buena estrella del trío comenzó a decaer cuando estalló el escándalo de los sobornos. Los tres aparecen nombrados en el anónimo que relató �la trama secreta� de los sobornos. Curiosamente, Pontaquarto no fue convocado a declarar ante la Justicia por este hecho.
UN RADICAL DE VIEJO ESTILO
Siempre en las crisis
Es cauto, moderado y prudente. Al menos eso dicen quienes lo conocen. Y en estos tiempos agitados, esas virtudes le serán más útiles que nunca. Radical de pura cepa y viejo estilo, el destino le jugó una mala pasada desde su propio nacimiento, el 13 de julio de 1938 en la localidad misionera de Apóstoles. Porque Mario Losada (62) no es un hacedor de milagros, ni promete la salvación eterna. Al contrario, siempre tuvo que ocupar puestos clave en momentos de crisis. Y esta vez no es la excepción: a partir de hoy presidirá las sesiones del Senado, en donde intentará calmar las aguas y acordar con el PJ con sus armas de siempre: el diálogo y la negociación política. �Yo nunca creí que dialogar fuera un pecado�, comentó hace un mes.
No es un recién llegado, menos un novato. Once años como senador le han dado experiencia y, sobre todo, una muy buena relación con las dos bancadas de la Cámara. Apenas asumió como jefe del bloque radical, en reemplazo del riojano Raúl Galván, adelantó a Página/12 que la relación con los peronistas sería �la de siempre: cordial pero frontal�. Su tacto, su cautela y su obediencia lo acercaron más de una vez a su primo, el sinuoso Enrique �Coti� Nosiglia, quien una vez lo citó a una reunión con Carlos Menem que luego desembocó en el Pacto de Olivos.
Pero no fue aquélla la primera vez que a Losada le tocó bailar con la más fea. En pleno gobierno de Menem, con la UCR todavía no repuesta de la derrota de 1989, nadie quería aceptar la conducción del partido. El no pudo sortear su destino y se convirtió en titular del radicalismo, desde 1991 hasta 1993. Dos años antes había finalizado su mandato como diputado y había sido elegido senador por Misiones, cargo en el que fue reelecto en 1998. Hoy, varios años después, tras la renuncia de Chacho, se convirtió en el virtual vicepresidente y ejercerá la presidencia cada vez que el Presidente viaje al Exterior, como por ejemplo dentro de diez días.
Informe: Martín Piqué.
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