Por Andrés Osojnik
 ¿Es posible diseñar la reconstrucción de Sarajevo, esa ciudad destruida por la más nefasta de las guerras de los últimos tiempos, sin salir de La Plata? El arquitecto y urbanista Alberto Sbarra lo creyó posible. Durante seis meses, elaboró un proyecto junto a un grupo de docentes, graduados y estudiantes de la Facultad de Arquitectura de la Universidad platense, de la que es decano. Lo presentó en un concurso de ideas, convocado por la propia ciudad, que cosechó 174 propuestas de todo el mundo. Y acaba de obtener el cuarto premio. El primero fue declarado desierto. �Ahora aspiramos a participar concretamente en la reconstrucción, porque todos los proyectos premiados son similares�, se entusiasma Sbarra, que ya planea usar los 6000 dólares del premio para viajar a la ciudad medieval a la que sueña hacer de nuevo.
Sarajevo, una de las ciudades con más historia y cultura en los Balcanes, quedó devastada por tres años de guerra civil. Y quedó convertida en el símbolo de la intolerancia luego de la limpieza étnica que los serbios emprendieron contra los bosnios entre 1992 y 1995.
Ahora, levantar la capital bosnia de nuevo tiene también un gran contenido simbólico. �Para mí es un lugar donde se ven con más claridad las contradicciones del mundo contemporáneo, que no puede resolver las cuestiones más elementales del hombre�, expresa Sbarra. Su proyecto se basa en esa idea: �No es sólo una solución urbana. Es la reconstrucción de la dignidad humana a través de la construcción de un lugar�.
El concurso lanzado en febrero pasado por la Unión Internacional de Arquitectura, la Universidad de Sarajevo y el cantón (municipalidad) de esa ciudad apuntaba a recolectar ideas para reedificar las 40 hectáreas que componen el corazón de la ciudad, allí donde en la era socialista funcionaron las �barracas de Tito�, el comando central del Ejército. Los edificios fueron el epicentro de los bombardeos. Lo que aún queda en pie, debe ser demolido para dar lugar a la nueva ciudad.
La zona está ubicada entre el casco medieval y la �ciudad funcional� construida con la monótona arquitectura socialista. Todo, en el valle del río Miljacka, donde se levanta Sarajevo. �Nuestro proyecto apunta a recuperar la vida social tan perseguida, tan reprimida�, señala Sbarra rodeado por su equipo, en el estudio donde elaboraron la propuesta. Sbarra es decano de la Facultad desde hace seis años y con ese grupo trabaja desde hace tres, aunque en su vida viene participando regularmente en concursos desde el �72. El urbanista, de 53 años, integró el equipo que reconstruyó el Teatro Argentino de La Plata, reinaugurado el año pasado.
Sbarra y su grupo se enteraron del concurso de Sarajevo por Internet. Y pidieron las bases, sobre las que emprendieron el trabajo.
�¿Cómo es posible diseñar una ciudad sin conocerla?
�Las bases proporcionan el material básico: la geografía, el clima, la historia, el aspecto sociológico. Y el programa: qué actividades se van a incluir en esa porción de la ciudad. El hecho de ser ajeno al lugar muchas veces abre más posibilidades pues uno de no está tan esquematizado.
El programa incluyó un campus universitario, instalaciones culturales y deportivas, centros comerciales, oficinas, tres embajadas, espacios verdes y viviendas. �El concepto central de nuestro proyecto fue la construcción de un lugar con una fuerte carga simbólica�, explica el urbanista.
Para ello, estructuró la zona en dos ejes: un �eje monumental�, que coincide con el eje del valle y uno transversal, que comunica la montaña la ciudad y el río. �Donde se cruzan ambos ejes hay un gran vacío �cuenta�. Es el Parque de la Paz y la Memoria, en el que sólo hay césped y cuya única infraestructura son algunos juegos para chicos: los usuarios por excelencia son los niños, como idea del futuro.�
La cuadrícula propuesta para el tejido urbano es novedosa para el lugar: una división en manzanas �que garantice las 24 horas de vida cotidiana�. La altura de los edificios no supera los veinte metros. Pero hay cuatro torres cilíndricas de cien metros: �Funcionan como faros, que representan la Sarajevo que vendrá y que podrán ser vistas desde toda la ciudad�.
Un jurado compuesto por nueve urbanistas de Bosnia, Italia, Alemania, España, Francia y Egipto emitió su fallo el miércoles pasado. Consideró desierto el primer puesto. Otorgó el segundo a dos proyectos (uno de Alemania y otro de Croacia); el tercero a uno de la propia Sarajevo. El cuarto fue también compartido: uno también de Sarajevo, y el de La Plata.
A Sbarra aún le cuesta creerlo: �Hicimos un gran esfuerzo, con el empuje de los chicos de la Universidad. Un estudio privado nunca podría hacer una cosa así�, se entusiasma. �Esto es como haber hecho una película con lo que se tiene, mandarla a San Sebastián y ganar un premio�, dice y ya sueña con ser llamado desde Sarajevo: �El jurado premió una idea central que aparece en todos los proyectos seleccionados. Es lógico suponer que todos participaremos concretamente en la reconstrucción�.
DENUNCIA DE ORGANIZACIONES AMBIENTALISTAS
Residuos nucleares al país
La organización ecologista Greenpeace y la Fundación para la Defensa del Medio Ambiente (Funam) denunciaron que la Argentina se verá obligada a recibir residuos radiactivos como contrapartida por la venta de un reactor nuclear a Australia que realizó el Instituto Nacional de Investigaciones Aplicadas (Invap). El titular de ese organismo respondió que el reingreso del material sería �temporario�, ya que Australia carece de una planta apropiada para procesarlo.
Dentro del contrato firmado entre el Invap y el gobierno australiano se especifica que el proveedor del reactor debe �garantizar que el combustible agotado que produzca el reactor no permanezca en Australia de manera indefinida ni temporaria ni tampoco puede ser reprocesado en ese país�. En declaraciones a Página/12, Juan Carlos Villalonga, coordinador de la campaña de energía de Greenpeace Argentina, explicó que ese combustible �es un residuo radiactivo con radioisótopos de altísimo riesgo, entre los que se encuentran Estroncio 90, Cesio 137 y Plutonio 239, sustancias altamente cancerígenas y con una extensa vida media. Pueden permanecer en el ambiente por cientos de años�.
El titular del Invap, Héctor Otheguy, aclaró que se trata de una propuesta que se le realizó al organismo nuclear australiano �para procesar el combustible, debido a que ese país carece de una planta apropiada para hacerlo�. El retorno del material en cuestión sería �temporario�, aclaró Otheguy a este diario, y se reenviaría a Australia para su almacenamiento definitivo. �De todas maneras �agregó�, actualmente este procedimiento se está haciendo en Francia y nuestro proyecto es una alternativa para el futuro, para acondicionar el combustible que nosotros mismos proveeremos. Esto se ajusta a lo establecido por la Autoridad Regulatoria Nuclear, que es el organismo que aprueba el ingreso y el transporte de material radiactivo.� Para Otheguy, el motivo por el cual las organizaciones defensoras del medio ambiente cuestionan este punto es �una cuestión dogmática: se habla de energía nuclear y ya están en contra�.
Desde Greenpeace, Villalonga sostuvo que la existencia de residuos nucleares en el país, aunque sea en forma provisoria, �constituye una violación a la Constitución, ya que la misma prohíbe el ingreso al territorio nacional de dichas sustancias� y agregó que �este tipo de procesamiento no se está realizando actualmente en nuestro país y, para que esto sea posible, se necesita la aprobación del Congreso, donde nunca fue presentado el proyecto para habilitar las instalaciones necesarias�.
Raúl Montenegro, presidente de Funam y profesor titular de Biología Evolutiva de la Universidad Nacional de Córdoba, fue contundente: �La Argentina no es el patio de atrás de ningún país, no aceptamos ser el basurero de Australia�.
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