No se equivocó el ex presidente Raúl Alfonsín cuando previno que lo que iba a decir �va a caer mal�, antes de caracterizar a la ley de convertibilidad como uno de �los dos episodios más graves para la Argentina del siglo XX�. Lo que no figuraba en las prevenciones era que el propio gobierno de la Alianza saliera a responderle. El jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, debutó ayer con su primera gran exposición pública enfrentando nada menos que al jefe de su propio partido y alabando las virtudes de la obra maestra de Domingo Cavallo. Precisamente, la posibilidad de un acercamiento del ex ministro al gobierno de Fernando de la Rúa, de la mano del gobernador bonaerense, Carlos Ruckauf, aparece como el entretejido que Alfonsín buscaría desarticular. Como para despertar aún más suspicacias, el ex presidente elogió en la misma entrevista al renunciante Carlos �Chacho� Alvarez, al que equiparó con De la Rúa al aludir a ambos como �dos argentinos que quieren lo mismo, que quieren la solución de los problemas nacionales�. �Le voy a decir una cosa que va a caer mal después cuando se repita, espantosa: yo creo que los dos episodios más graves para la Argentina del siglo XX son primero, en lo institucional, la revolución del 30; segundo, en lo económico, la ley de convertibilidad�, respondió Alfonsín al ser interrogado sobre el panorama político y sus rebotes en la economía por Víctor Hugo Morales, ayer en Canal 7. �Creo que nadie sabe cómo salir ni se puede salir, es una trampa tremenda. Sacarla podría ser un desastre para muchos�, continuó, antes de lamentar el paro anunciado por las entidades del agro y describir la situación señalando que �no hay rentabilidad en el campo, hay dificultad enorme para vender nuestras manufacturas, hay facilidad para que lleguen importaciones, de modo que la industria está sufriendo también mucho�. Aunque inmediatamente aclaró que no estaba pidiendo la salida de la convertibilidad, �porque creo que es muy difícil�, el gobierno nacional reaccionó sin disimular su indignación. Diferenciándose de Alfonsín, Colombo no habló de las limitaciones que impone la convertibilidad sino que apuntó a sus virtudes. �La convertibilidad es la piedra angular de nuestro mercado monetario crediticio y del mercado de capitales�, pontificó el jefe de Gabinete, que agregó que �su importancia es también central y decisiva en todos los contratos que dependan de ella�. Y no se privó de lanzar una exagerada advertencia: �Quebrar la convertibilidad generaría un colapso en el nivel de actividad de una magnitud nunca vista�, dijo Colombo, haciendo recordar la reiterada fórmula menemista �esto o el caos�. El reemplazante del alfonsinista Rodolfo Terragno rechazó incluso la posibilidad de plantear el debate en torno del tema. �Lograr esta institución le costó mucho a nuestra sociedad y generar discusiones acerca de ella impide analizar con calma las medidas que en términos de inversión, crecimiento y distribución del ingreso necesita la Argentina�. Una de las �recomendaciones� que le había llevado Domingo Cavallo al presidente De la Rúa, cuando éste lo recibió tres semanas atrás, había sido �tomar distancia� de Alfonsín. Es lo que ayer hizo el Gobierno, precisamente en el tema más preciado por el jefe de Acción por la República. Tanto en el Frepaso como en el alfonsinismo, se ve con malos ojos el acercamiento de De la Rúa a Ruckauf, quien habría tendido a su vez un puente entre Cavallo y el Gobierno. El miércoles, el gobernador bonaerense insistió en su idea de �un acuerdo histórico nacional� para reducir impuestos y reactivar la economía, en línea con el planteo de �cogobierno� que impulsa desde el justicialismo. Ruckauf se posicionó entre los dirigentes políticos más críticos hacia Alvarez cuando éste renunció a la vicepresidencia de la Nación y estuvo entre los primeros en ofrecer todo su apoyo a De la Rúa en esa instancia. Alfonsín, en cambio, volvió ayer a privilegiar el fortalecimiento de la Alianza y avanzar, a partir de ella, �hacia un pacto democrático� con los gobernadores para apoyar las medidas �que se requieren para el crecimiento del país�. Claro que en una línea diferente de la trazada hasta el momento. �Todavía estamos viviendo la inercia de una política neoliberal que dura más tiempo del que deseáramos�, refirió ayer Alfonsín, que indicó que estas condiciones impiden un crecimiento mayor. Si el año que viene se creciera un 4 por ciento, señaló, �seríamos Gardel�.
LOS ANALISTAS NO TEMEN A UNA MORATORIA ARGENTINA Los expertos de Wall Street que debatieron ayer sobre la economía argentina descartaron dos temores propios y ajenos: la posibilidad de una moratoria y la recalificación a la baja de la deuda externa. También señalaron que, por ahora, conviene no salir de la convertibilidad y que la solución a la actual crisis, que �es política y no económica�, dependerá de encontrar �soluciones creativas� y de la �valentía� del presidente Fernando de la Rúa.
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