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MAÑANA HABRA UNA CUMBRE TRIPARTITA EN POS DE UN ALTO EL FUEGO
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 Está confirmada y parece la última esperanza para la paz. Luego de una semana que mostró una radicalización máxima en el conflicto palestinoisraelí (con el linchamiento de dos soldados israelíes en una comisaría palestina, con el bombardeo israelí de represalia a objetivos en la palestina ciudad de Ramalá, y con cifras de más de 100 muertos y 3000 heridos en dos semanas), finalmente habrá una cumbre entre el premier israelí Ehud Barak y el líder palestino Yasser Arafat para lograr un cese del fuego y de la violencia. La cita será en la ciudad egipcia de Sharm el-Sheij, donde Barak y Arafat relanzaron alguna vez las negociaciones de paz y estarán (por ahora) el secretario general de la ONU, Kofi Annan, el presidente anfitrión, Hosni Mubarak, el presidente norteamericano Bill Clinton y su secretaria de Estado, Madeleine Albright. Ayer casi ni hubo incidentes en la región (�sólo� dos palestinos heridos) y tanto israelíes como palestinos tomaron medidas para aplacar la tensión. Barak se reunió por segunda vez con el líder derechista israelí Ariel Sharon (que desató todo este conflicto) para estudiar la formación de un gobierno de unidad. Según el ministro de Cooperación Internacional (canciller) palestino, Nabil Shaat, Israel aceptó reabrir el aeropuerto palestino de Dahaniya en la franja de Gaza, desbloquear los territorios bajo control palestino, retirar sus tropas de las posiciones en las que se habían desplegado en los últimos días y controlar a los colonos judíos asentados ilegalmente en territorio destinado a formar parte del futuro Estado palestino. El gobierno israelí también le confirmó a la ONU que no pondrá más trabas a la entrega de ayuda humanitaria a los palestinos, de acuerdo con el canciller interino israelí Shlomo Ben Ami. Por su parte, fuentes palestinas confirmaron que la ANP ordenó la detención de varios integrantes de las organizaciones terroristas islámicas Hamas y de Jihad Islámica, con la excusa de que anteayer incendiaron cuatro restaurantes y un hotel en Gaza. Algunos dirigentes de Hamas dijeron que 14 de sus 35 integrantes que fueron liberados esta semana por Arafat se entregaron voluntariamente. Pero Hamas también rechazó de plano la cumbre y acusó a Arafat, por asistir, de hacer �una muestra de desprecio� a los más de cien muertos palestinos. Kofi Annan, quien fue el encargado de acelerar las gestiones para la cumbre de mañana, anunció ayer que no iba a haber condiciones. Son estas condiciones las que habían impedido la cumbre antes y las que derivaron en el fracaso parcial de la reunión Arafat-Barak en París hace una semana y media. En principio, la de Arafat es que se forme una comisión internacional para investigar la represión israelí a los palestinos que reaccionaron a la visita del líder derechista hebreo Ariel Sharon a la Explanada de las Mezquitas el jueves 28 de setiembre. Aparentemente, Annan habría conseguido de Arafat que renuncie a la condición y que a cambio él se comprometía a incluir el tema en la agenda de la reunión. Barak, por su parte, también pasó de condición para la cumbre a punto de la agenda la exigencia de encarcelamiento de todos los extremistas palestinos que la Autoridad Palestina liberó en los últimos días, así como la descripción de �las medidas operacionales� que debe tomar Arafat para que cese la violencia palestina, según un portavoz israelí. Los preparativos para la cumbre corrieron ayer por varias pistas, mientras aún no se sabe cuántos personajes más estarán en la foto de la cumbre de Sharm el Sheij. La Autoridad Palestina pidió que la Unión Europea (representada por Javier Solana), Rusia y Jordania estén en la reunión, pero hay versiones contradictorias sobre si eso ocurrirá o no. El mismo Arafat se reunió en secreto con Mubarak para ultimar algunos detalles. En Riad, el rey jordano Abdullah se entrevistó con el rey Fahd de Arabia Saudita, país que se ha mostrado muy duro contra Israel y cuyo príncipe heredero Abdullah le aclaró a Estados Unidos que tomará �medidas severas� si no cesa �la violencia israelí�, según el diario saudita Al Watan. En Damasco, el emir de Bahrein estuvo hablando con el presidente sirio Bashar Al Assad. En Israel también hubo reuniones. Barak se entrevistó con Sharon para ver si se forma un gobierno de unidad nacional con el derechista Likud. En realidad, el líder derechista, según algunas fuentes, esperaría al fin de la cumbre para pronunciarse. En todo caso, lo que parece seguro es que Arafat y Barak no estarán negociando el recomienzo de la paz, sino tan sólo el fin de esta protoguerra.
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Con el auspicio de la ONU y de Estados Unidos, el líder palestino Yasser Arafat y el premier israelí Ehud Barak se reunirán mañana en la localidad egipcia de Sharm el Sheik para detener la violencia en Medio Oriente, que en dos semanas dejó más de 100 muertos y más de 3000 heridos.