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suben las tasas, pero no hay pánico
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 La crisis política profundizó la incertidumbre que ya existía ante el estancamiento de la economía. Para verificarlo, valgan algunos datos: el riesgo país está en alza, caen los depósitos bancarios, las acciones se encuentran en los precios mínimos del año, los títulos públicos pierden valor día tras día y aumentan las tasas de interés. La renuncia de Carlos Alvarez a la vicepresidencia provocó nerviosismo en la city porteña y, a poco de terminarse el año, José Luis Machinea está cada vez más lejos de cumplir con su objetivo de seducir a los inversores, lograr una caída de las tasas y asistir a la demorada reactivación económica. En este contexto complicado, funcionarios del Palacio de Hacienda viajarán en los próximos días hacia Nueva York para explicar la situación e intentar calmar a los financistas de Wall Street.La explicación que dan desde Economía sobre las turbulencias en los mercados tira la pelota afuera. Apunta a que �estamos ante un contexto internacional bastante complejo�, dados el aumento del petróleo, la crisis en Medio Oriente y problemas internos de la economía estadounidense, tal como definió ayer Julio Dreizzen, subsecretario de Finanzas. No obstante, el dato que más está alarmando a los financistas tiene que ver no sólo con el sensible incremento del riesgo-país sino también con la caída de depósitos que se viene verificando en el sistema financiero. En la primera semana transcurrida desde la dimisión de �Chacho� (entre el viernes 6 y el jueves 12), las colocaciones en pesos del sector privado cayeron en 346 millones, mientras que las nominadas en dólares (siempre más estables que las anteriores) lo hicieron en 318 millones. En total fueron 664 millones. Y en Economía cruzan los dedos para que semejante contracción esté relacionada con la volatilidad que suelen mostrar los depósitos antes que al temor que pudo haberse apoderado de los ahorristas en medio de la agitación política. Lo cierto es que la crisis política sumada a las sucesivas caídas en los mercados extranjeros tiene alterados a los financistas del microcentro porteño. De hecho, ayer, las acciones volvieron a bajar. Durante una rueda con muchos nervios, ante la fuerte caída que a media mañana se registraba en los mercados internacionales, el índice MerVal terminó perdiendo un 1,1 por ciento, acumulando una baja del 13 por ciento en lo que va del mes. Los papeles más golpeados fueron Garovaglio (-15,6%); CEI (-11,3%) y Banco Santander-Río (-6,0%). También cedieron los títulos públicos, aunque en una menor magnitud a lo que había ocurrido anteayer. Esta vez, las bajas fueron del 0,5 por ciento en promedio para los Globales; y del 0,2 por ciento en el caso de los Bontes y de los Brady. En este contexto, el denominado riesgo-país trepó otros 29 puntos básicos, equivalente a una sobretasa del 0,29 por ciento. En la actualidad, el riesgo-país se sitúa en el peor nivel del año, en torno de los 800 puntos básicos (un 8 por ciento de sobretasa), aun por encima del pico registrado en mayo, cuando arreciaban las versiones de renuncia de Machinea, horas antes de que se anunciara un nuevo ajuste en el gasto público. Por lo pronto, el derrape de los títulos públicos ya tuvo impacto esta semana, cuando Economía salió a buscar fondos para refinanciar la deuda, y los inversores reclamaron una tasa de interés más alta para prestarle a la Argentina. También hubo una suba en el costo del dinero en los préstamos que los bancos se hacen diariamente entre sí, y que trepó por encima del 9 por ciento anual (9,5 en pesos; 9,1 en dólares). En este clima enrarecido, Dreizzen anticipó que �estamos preparando algunas reuniones con inversores internacionales� en Nueva York. Precisamente, desde Wall Street, Arturo Porzecanski, economista jefe del ABN AMRO Bank, dio una señal alentadora, hasta generosa, acerca del ánimo de los financistas internacionales. �Se percibe que los cambios políticos no son ni el fin de la Alianza ni el fin de la gobernabilidad de Fernando de la Rúa�, opinó en diálogo con radio Intereconomía. En este contexto, las bolsas internacionales continúan en una tendencia bajista. En Estados Unidos, el índice Dow Jones cayó 1,1 por ciento; el Nasdaq (acciones tecnológicas), 1,3 (este mes acumula una corrección del 14 por ciento); y la Bolsa de San Pablo perdió un 3 por ciento. A su vez, en medio de las turbulencias, el euro tocó su mínimo histórico, cerrando a 0,84 por dólar.
MAS INGRESOS FISCALES POR ACUERDO CON TABACALERAS
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