Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira
ESPACIO PUBLICITARIO


Gimnasia, con más corazón que juego, ganó un partidazo y ya está segundo

En un partido emotivo y lleno de alternativas, los de Griguol derrotaron sobre el final a un Huracán que hizo lo suyo. Goles de Gómez, Pereyra Messera y Sava para el platense, Morquio, Padra y Moner, los de Huracán.

Por Ariel Greco

t.gif (862 bytes)  ¡Qué agrande, Lobo! Sin mucho juego, pero con un corazón enorme, Gimnasia le ganó un partido espectacular a Huracán y quedó como único escolta de Boca. Y como en cada uno de los campeonatos en los que Carlos Griguol estuvo a cargo del club, el pueblo tripero se ilusiona con la posibilidad de conseguir el postergado título. Por ahora, los argumentos futbolísticos no son demasiados como para aspirar tan alto, pero como los números dan...
Gimnasia arrancó decidido a llevarse por delante a su rival, más con empuje y con ganas que con buen juego. Además, un doble error en el fondo de Huracán le posibilitó ponerse en ventaja con un nuevo gol de Marcelo Gómez desde afuera del área. Pero cuando aparentemente el mayor problema ya estaba resuelto, Gimnasia comenzó con la complicaciones. El equipo de Carlos Griguol dejó en claro que defensivamente está muy lejos de aquellos casi invulnerables que dirigía antes de su excursión por España. Con los tres goles recibidos ayer ya suma 17 tantos en contra, y apenas está por debajo de Los Andes y de Central. De mitad de cancha hacia atrás, el conjunto platense sufre cuando lo atacan por los costados y cuando los volantes rivales le manejan la pelota.
Precisamente allí estuvo la mayor virtud de Huracán. Con un mediocampo muy livianito, pero con jugadores de mucha dinámica y manejo, los de Parque Patricios se adueñaron del trámite. El juvenil Padra fue conductor en el juego, pero sobre todo por asociación. Al compás de lo que producía el chiquitín, el resto de sus compañeros se sumaba para generar fútbol. Así, por derecha aparecía Luis González, Soto bajaba para colaborar y Brandán era una alternativa por izquierda. Con esa convicción, Huracán comenzó a crear situaciones y fue justo que diera vuelta el marcador, en especial por la joyita de Padra en el final.
Gimnasia se mostraba confundido. La línea de tres improvisada por Griguol no era la solución, porque los visitantes seguían siendo más peligrosos. Cuando ya la gente local estaba impaciente y en parte tomaba conciencia de las limitaciones de su equipo, Gimnasia sacó su chapa y mostró “sus” virtudes. Que no son muchas, aunque sí efectivas. Cada vez que encara, Enría consigue desbordar. Ante cada centro aéreo, Sava demuestra su poderío, ya sea para cabecear al arco como para habilitar compañeros. Y cuando se ilumina, Messera se torna desequilibrante. Con esos argumentos, más un estado físico envidiable, Gimnasia aprovechó para arrollar a Huracán, que ya sin Padra –reemplazado– y con Carrizo expulsado, poco pudo hacer para sostener el resultado.
Allí reapareció la ilusión, más alimentada por las estadísticas que por el juego. Un equipo que no puede ganarle a Belgrano en su cancha, que sufre horrores para vencer a Almagro y que por momentos es superado por Huracán, no parece que se pueda sostener en la pelea. Pero qué importa. Si Gimnasia hace diez partidos que no pierde, es el único escolta con seis puntos y un partido menos que Boca, y ya pasó a River en la tabla. Demasiadas cosas como para no ilusionarse.

Gol y amor propio

- Gimnasia tuvo un inicio arrollador, pero el gol de arranque lo adormeció. Allí apareció el mejor fútbol de Huracán, que de manera muy merecida dio vuelta el marcador ante un rival confundido.

- Sava en el primer tiempo y Luis González en el segundo difícilmente puedan olvidarse de los goles que se perdieron. Con el arco vacío y Ríos en el piso, el Colorado se anticipó a Dueña a un metro de la línea y la tiró afuera. González la quiso cruzar ante Noce y la tiró a los carteles.

- La expulsión de Carrizo fue clave. Con la salida de su capitán, Huracán perdió presencia y lo terminó pagando caro. No le quedó resto para sostener el resultado.

- Gimnasia puso todo su amor propio para darlo vuelta. Con eso, y no mucho más, le alcanzó para mantenerse
segundo.

 

KIOSCO12

PRINCIPAL