Por
David Cufré
José
Luis Machinea considera que la economía argentina atraviesa un
momento delicado que obliga a las fuerza políticas
a unirse para evitar una corrida contra el peso. Los mercados han
estado nerviosos durante la última semana, generando versiones
de distinto tipo. Es el momento de unir fuerzas ante una situación
que ha sido delicada, exhortó el ministro de Economía
en un reportaje exclusivo con Página/12. Y como para enviar un
señal a los desconfiados mercados que no habrá devaluación,
aseguró que él invierte en pesos. "Mi poca plata la
tengo en plazos fijos en pesos", reveló. En ese contexto,
le reclamó al gobernador Carlos Ruckauf que dejara de hacer política
con los ataques a su gestión y evaluó que los economistas
ortodoxos operan para que abandone el Gobierno por una cuestión
ideológica. Descartó que el Gobierno vaya a
solicitar un crédito-blindaje por 15 mil millones de dólares,
pero abrió una puerta a requerir en marzo de 2001 entre 7 mil y
9 mil millones al FMI.
¿Por qué cree que ciertos sectores lo quieren afuera
del Gobierno?
Yo asumo mis responsabilidades. Pero en todo caso deberíamos
discutir propuestas. Cuando en lugar de eso hay críticas a la persona,
se puede decir que son ataques.
Se refiere a Carlos Rodríguez, Jorge Avila y Guillermo Calvo.
¿Hay otros que quieren desestabilizarlo?
No quiero volver sobre el tema de los nombres. Lo que dije es que
alguna gente del CEMA, no todos, se han opuesto a que sea ministro desde
antes del primer día. No por oposición al diseño
de la política económica o a medidas que hemos tomado, sino
por una cuestión personal. Diría que atacan desde una visión
ideológica. Supongo que para ellos no soy tan ortodoxo.
¿Dentro de la Alianza existen también importantes
dirigentes que no lo quieren?
No, sinceramente no lo creo. Siempre puede haber alguno, pero nadie
relevante. En primer lugar, lo que importa es la reafirmación clara
y la confianza que me ha expresado el Presidente. Y en segundo término,
veo mucha solidaridad dentro del gabinete. Descarto operaciones surgidas
del interior de la Alianza.
Fernando de Santibañes elogió ampliamente a Carlos
Rodríguez. ¿Cómo lo explica, si para usted Rodríguez
opera para que lo echen del Gobierno?
No sé por qué De Santibañes lo habrá
hecho, pero yo no tengo nada en contra de las cualidades académicas
de Rodríguez. Insisto, acá no se ha planteado una discusión
sobre política económica, sino una discusión ideológica.
No conozco las propuestas de Rodríguez, salvo lo que hizo en el
gobierno anterior, como poner impuestos a los intereses y a la renta presunta.
¿Por qué De Santibañes, que usted dice que
es su amigo, elogia a su enemigo?
No sé. Habría que preguntárselo a De Santibañes.
¿Las expresiones de Carlos Ruckauf también son ataques
personales?
A veces hay declaraciones duras y llega el momento en que uno se
cansa de los ataques y reacciona. En la medida en que se aporten ideas
me parece bien. Lo que no es bueno es decir, como en el caso del Presupuesto,
que así no se aprobará y no hacer una sugerencia alternativa.
En el caso de los economistas del CEMA usted interpreta los ataques
como ideológicos. ¿A qué atribuye los ataques de
Ruckauf?
Hay una cuestión claramente política. Durante las
últimas semanas hubo de parte de la oposición mucha agresión
no sólo en contra mío, sino también en contra del
Gobierno y del presidente de la Nación.
¿Ruckauf quiere desestabilizar al Gobierno?
Está haciendo política. Me parece fantástico
que haga política. Pero éste es un momento delicado de la
economía. Creo que hay momentos para hacer política y otros,
como el actual, para colaborar con propuestas.
¿Por qué?
Porque hubo y hay demasiados rumores, y hubo problemas políticos
en la Alianza, que por suerte se han superado. Los mercados han estado
nerviosos durante la última semana, generando versiones de distinto
tipo. Y me parece que es el momento de unir fuerzas ante una situación
que ha sido delicada en los mercados, especialmente en los últimos
quince días y en particular la última semana.
En ese contexto, ¿existe riesgo de una corrida contra el
peso?
Estamos en un momento en que debemos lograr ciertos consensos básicos
sobre las políticas de Estado, y dejar la discusión política
para otro tipo de cosas. Me parece que es particularmente importante en
esta coyuntura.
Insisto, ¿está preparado para una corrida?
Estamos viviendo una situación de tensión que será
superada en dos o tres semanas. El contexto internacional es muy inestable.
El Nasdaq cayó casi 40 por ciento en los últimos meses y
hay un vuelo a la calidad de los inversores de todo el mundo.
En ese contexto de nerviosismo en los mercados financieros, los rumores
respecto a la situación de cualquier país, y en este caso
de Argentina, caen en un campo fértil para alentar corridas. Mi
impresión es que el panorama de los mercados tenderá a normalizarse,
y con una situación más normal habrá menos margen
para que cualquier rumor respecto a la economía argentina sea creíble.
Estamos en una situación coyuntural que iremos solucionando.
¿Los bancos de inversión extranjeros también
operan en su contra?
Soy poco adepto a ver conspiraciones. No creo que haya habido un
gran complot. Hubo seguro algunos que se movieron en contra, pero no soy
de empezar a buscar con lupa quién dijo qué cosa. No creo
que nadie de afuera que tenga plata invertida en Argentina juegue con
esos comentarios.
Los analistas de Nueva York y de Brasil dicen que Argentina puede
devaluar o caer en cesación de pagos.
En Brasil hay que diferenciar muy bien entre lo que dicen las autoridades
y algunos operadores del mercado. El ministro de Hacienda, Pedro Malan,
me ha apoyado todo el tiempo. La percepción de otras personas en
Brasil es que como ellos devaluaron nosotros tenemos que devaluar. Pero
no se dan cuenta de que la situación argentina es totalmente distinta.
La devaluación no es un tema posible. Es un disparate. Están
absolutamente confundidos.
¿Para evitar especulaciones, no le serviría acceder
al crédito de blindaje por 15 mil millones de dólares?
En los últimos cinco años Argentina buscó financiamiento
en los mercados extranjeros por cifras similares a la que necesitamos
el año que viene. Segundo: ahora podemos captar muchos más
fondos que el año pasado en el mercado interno, por el crecimiento
de los fondos de pensión. Ahora, dicho esto, si el Gobierno tuviera
acceso a un préstamo de esa magnitud, obviamente reduciría
la incertidumbre. Pero no está disponible una ventanilla para financiamiento
de ese tipo. Lo único que hay, pero todavía falta reglamentar,
es la línea de créditos contingentes del FMI.
¿Quiere acceder a esa línea?
Si. Lo bueno es que habrá una línea precautoria, no
una para una economía en emergencia. Si esa línea comienza
a funcionar, dependiendo de cuál sea la situación de la
economía argentina, podríamos intentar acceder a ella en
el primer trimestre del año que viene. Estaríamos en condiciones
de solicitar entre 7 mil y 9 mil millones de dólares.
Textuales
- Me atacan por cuestiones ideológicas.
Supongo que para ellos no soy suficientemente ortodoxo.
- Hubo de parte de la oposición una cosa agresiva no
sólo en contra mío, sino también del presidente
de la Nación.
- Me gustaría verlo a Chacho Alvarez más comprometido
con el funcionamiento de la Alianza y la marcha del Gobierno.
- Es un momento delicado de la economía.
- Los rumores respecto a la Argentina caen en un campo fértil
para alentar corridas.
- Algunos operadores de Brasil creen que como ellos devaluaron
nosotros debemos devaluar. Es un disparate.
- Podríamos tomar en marzo de 2001 un crédito
contingente del FMI por 7 mil o 9 mil millones de dólares. |
No
habrá un nuevo paquete
¿Habrá cambios al proyecto de Presupuesto
2001, para excluir los recortes de subsidios a provincias?
Estamos dispuestos a escuchar propuestas. Pero propuestas que
mantengan el nivel de gastos y de déficit fiscal.
¿Por qué propone privatizar la AFJP Nación
cuando sirve como empresa testigo del mercado y, además, da
ganancias?
Para potenciarla. Nosotros creemos que tanto el grupo asegurador
como la AFJP se pueden potenciar. No es una idea que haya surgido
ahora, sino que la veníamos pensando desde hace meses con Chrystian
Colombo, cuando era presidente del Banco Nación. Es lo mismo
que hizo el Banco Provincia con su AFJP.
¿Es un primer paso hacia la incorporación de capital
privado al Banco Nación?
No, definitivamente. Eso está absolutamente descartado.
¿Estudia más medidas?
No estamos pensando un nuevo paquete. Las cosas ya están.
Lo que me parece relevante es la aprobación del Presupuesto,
que discutamos la ley de reforma previsional que enviamos al Congreso
y que se discuta con las provincias un nuevo esquema de coparticipación.
Esas son las señales que necesitamos. Para crecer debemos generar
un marco de confianza. Lo otro es simplemente una aspirina de corto
plazo. |
Lo
de Cavallo no me debilita
Domingo Cavallo propuso la privatización
de la AFIP. ¿Está de acuerdo?
No, lo cual no quiere decir que no haya que aumentar la participación
del sector privado en ciertas actividades de la Aduana y la DGI. Pero
de una manera integral. En la Aduana lo que estamos discutiendo es
convocar al sector privado para que nos ayude en los controles. Y
en el caso de la DGI se puede pensar en darle participación
en la recaudación de algunos impuestos, como el monotributo,
las cargas del servicio doméstico y tal vez los aportes a la
seguridad social. Pero es un tema que ahora depende de la Jefatura
de Gabinete. De todos modos, privatizar la AFIP no me parece una propuesta
razonable, aunque sea imaginativa.
Al equipo económico se lo acusa de falta de imaginación
o audacia.
Yo escucho esas críticas, pero les he preguntado a muchos
que me hablan de imaginación qué ideas se les ocurren.
Y la verdad es que no escucho ninguna. Creo que las medidas de la
semana pasada fueron bastante imaginativas, y que los límites
de la imaginación están dados por el funcionamiento
de la economía.
¿Cavallo lo debilita?
No. A Cavallo lo escuché como a cualquier otro. Es el
presidente de una fuerza política importante y es necesario
hablar con él para buscar consensos dentro de la política. |
INVERSIONES,
CREDITOS HIPOTECARIOS, DESEMPLEO
Las
casas están baratas
Por
D.C.
José Luis
Machinea no pudo precisar cuándo repondrá a los salarios
del sector público el 12 por ciento que se les recortó en
mayo. Ni tampoco prometió aumentos a las jubilaciones. Su recomendación
a la gente es que invierta en pesos.
¿Cuándo se devolverá el recorte del 12 por
ciento a los salarios públicos?
No sé. Quiero ser franco, no será en el 2001. Tenemos
que asegurar la solvencia fiscal.
¿Y los jubilados tienen que olvidarse de obtener un aumento
de haberes durante este Gobierno?
No. Pero el 2001 no es el mejor momento.
¿En qué le recomendaría invertir a una persona
que tiene ahorrados 10 mil pesos?
Los bonos argentinos en general o un plazo fijo en pesos son las
mejores opciones. Yo no tendría dudas de invertir en pesos. Mi
plata, la poca que tengo, está en plazos fijos en pesos.
¿Es buen momento para tomar un crédito hipotecario?
Las tasas de interés de los créditos hipotecarios
casi no han subido en esta coyuntura. Creo que es buen momento porque
el precio de las casas está muy barato. Creo que en el futuro será
difícil encontrar un precio de las propiedades similar al que tenemos
hoy. En parte porque hay muchos departamentos vacíos, que quedaron
del 98 y 99, y hay gente que necesita venderlos. Encontrar
precios y ofertas de departamentos como se da hoy en Buenos Aires me parece
una oportunidad única.
Pero la gente todavía no parece dispuesta a gastar. Una muestra
son los sobrantes de certificados del Plan Canje.
Se han acelerado las ventas por el Plan Canje. Hay miedo de la gente
al desempleo. Es natural en una economía que viene de seis años
con una tasa de desempleo muy elevada. Este proceso de regenerar confianza
y que la gente esté segura de tomar un crédito posiblemente
requiera que la economía se mueva más rápido.
Con el nivel de crecimiento esperado para 2001, ¿cuánto
podría bajar el desempleo?
En 2001 debería bajar alrededor de un punto y medio, espero
que dos puntos.
¿El equipo económico no debería moverse más
rápido?
Estoy de acuerdo, pero lo que creo que importa es la tendencia.
Uno no va a resolver el problema del desempleo de un día para otro.
Tomamos medidas adicionales la semana pasada, para dar un fuerte incentivo
a la inversión, porque queremos acelerar el ritmo de crecimiento
económico.
El
pensamiento de Marx no convence a los mercados
El
secretario de Finanzas inició un raid en Nueva York para demostrar
la solvencia financiera y fiscal. Pero en Wall Street siguen desconfiando.
|
|
Por
Claudio Zlotnik
Argentina no enfrenta
problemas de solvencia. Si ustedes miraran nuestras estadísticas,
sin tener el nombre del país, verían que están tratando
con un caso relativamente bueno. Daniel Marx, secretario de Finanzas,
se presentó ayer en Nueva York frente a un selecto grupo de inversores
y banqueros. La ofensiva forma parte de la estrategia diseñada
en el Palacio de Hacienda para recuperar la confianza de los financistas
internacionales. Por otra parte, Marx volvió a negar que Economía
esté negociando un crédito extraordinario con el Fondo Monetario,
un club de bancos y el Tesoro estadounidense. Respecto de este último
punto, en Wall Street no le creyeron demasiado.
El eje del discurso del funcionario durante un desayuno en el Consejo
de las Américas fue intentar convencer a los inversores de que
la Argentina seguirá cumpliendo con sus compromisos sin mayores
dificultades. De esta manera, Marx apuntó directamente sobre la
duda principal que tienen los financistas: que, bajo un escenario de estancamiento
económico, el país ingrese en cesación de pagos.
Pero Marx fue contundente al desestimar esa eventualidad. La relación
de la deuda con el producto bruto es menor a la de otros países,
como Portugal, España o el Reino Unido. Sin embargo, pagamos tasas
de interés más altas que ellos, se lamentó.
Justamente, si esos países afrontan costos más bajos es
porque son más confiables y predecibles que la Argentina. Justamente,
la visita de Marx a Wall Street tiene como objetivo ganar confianza.
Frente a los banqueros e inversores, el funcionario volvió a descalificar
la versión de que Economía negocia una ayuda financiera
extraordinaria para salir de la crisis. No hay nada nuevo. Lo puedo
decir categóricamente, aseguró. No obstante, admitió
que, junto a México y Brasil, la Argentina mantiene conversaciones
con el FMI para destrabar las denominadas Líneas de Contingencia
(LCC), que el organismo ya diseñó pero que nunca fueron
puestas en la práctica.
En su recorrida por los bancos de inversión neoyorquinos, realizada
durante la tarde, Marx escuchó de los financistas las mismas tres
inquietudes.
Cuándo la Argentina
retomará la senda del crecimiento.
Si creía que el Presupuesto
2001 iba a ser aprobado en el Congreso antes de fin de año, dadas
las turbulencias políticas.
Y qué alternativas estudiaba
en caso de que se cierren los mercados de capitales, teniendo en cuenta
que, hasta fin de año, vencen 2450 millones de pesos en Letras
y Bonos del Tesoro.
Como lo había hecho en público durante la mañana,
Marx volvió a tranquilizar a los banqueros. Lo que Marx no pudo
diluir es la sensación que tienen los financistas de que Economía
negocia una ayuda millonaria con los organismos internacionales y el Tesoro
estadounidense. Algo se está preparando, y el préstamo
podría concretarse después de las elecciones en los Estados
Unidos, indicó Walter Molano, de BCP Securities.
Por su parte, Arturo Porsecanski, analista jefe del ABN Amro Bank en Nueva
York señaló, en diálogo con Página/12, la
preocupación que en Estados Unidos existe sobre la situación
económica en la Argentina. Mi pronóstico es que las
turbulencias se van a calmar. Pero no se puede ocultar que muchos inversores
discrepan con esta sensación, sobre todo por lo que pueda ocurrir
en el mediano plazo. Se sabe que José Luis Machinea permanecerá
en su puesto los próximos días. Pero hay mucha incertidumbre
sobre lo que pueda suceder de acá a seis meses. Esa es la verdad.
Detrás de bastidores, hay serios cuestionamientos al ministro de
Economía.
¿Los financistas apuestan al desembarco de Domingo Cavallo
en el Gobierno?
Ellos toman con pinzas que Cavallo sea una especie de salvador.
Nadie olvida que en Perú Alberto Fujimori convocó de urgencia
a Carlos Boloña,una especie de Cavallo peruano, para salvar su
tercer mandato. Pero la crisis continúa.
Un
respiro en la Bolsa
Después de las fuertes alzas de fines de la semana
pasada, ayer las acciones se tomaron un respiro, mientras que los
títulos públicos registraron leves mejoras. El índice
MerVal cayó 0,8 por ciento, con un volumen de negocios de apenas
14,3 millones de pesos, la tercera parte del promedio de la última
semana. Los bonos, en tanto, subieron entre 0,3 y 0,7 por ciento.
Tras la fuerte volatilidad mostrada por el mercado en las ruedas anteriores,
había una gran expectativa sobre lo que ocurriría ayer.
Pero, lejos del nerviosismo de las últimas sesiones, hubo pocos
negocios en un contexto de alzas en Wall Street (el índice
Dow Jones subió 2,3 por ciento) y en los demás mercados
latinoamericanos. |
|