Estaba allí, de local. Si hasta se animó a subir al palco a su novia Cecilia Bolocco. En la plaza 25 de Mayo de La Rioja, Carlos Menem estaba en su salsa. Rodeado de la mayoría de los gobernadores de justicialismo, con la notoria ausencia de Carlos Ruckauf, el ex presidente criticó duramente al Gobierno y aseguró, contrariamente a lo que había expresado el día anterior el gobernador bonaerense, que la ley de Presupuesto se aprobará únicamente si es fruto del consenso con el PJ. Menem habló ante una multitud, casi en tono proselitista, y con el expreso objetivo de contrastar la realidad con las promesas que la Alianza realizó durante la campaña. Recordó cuando Fernando de la Rúa prometió en los spots publicitarios una baja de impuestos, un aumento de salarios y la venta del avión presidencial. Hasta se dio el lujo de imitar el tono de voz de su sucesor, lo que fue festejado por la concurrencia. �Al final, en enero el impuestazo, después el recorte de sueldos y salarios y ahora está paseando por todo el mundo con el avión presidencial�, ironizó el ex presidente, quien, claro, no pronunció una palabra de sus promesas de salariazo y revolución productiva. �No nos sigan persiguiendo, vamos a acompañar a gobernar, pero no nos pongan en situaciones difíciles a las provincias. No nos obliguen a los pueblos del interior a que nos pongamos a movilizar permanentemente. Queremos una Argentina unida para crecer. Por favor, no nos sigan repitiendo lo de la herencia recibida, que es buena, que la están tirando por la borda por puras especulaciones políticas�, aseguró. De paso, volvió a un clásico: sus ataques contra el ahora ex vicepresidente Carlos �Chacho� Alvarez. �No nos vengan con el cuento de la corrupción que se volvió como un boomerang. El acusó al Presidente por supuestas coimas, y si hay culpa de coimas en el Poder Ejecutivo, que es unipersonal, es del Presidente�, agregó. A su lado, aplaudían quienes lo precedieron en la palabra: su hermano Eduardo Menem, y los gobernadores Juan Carlos Romero de Salta, Adolfo Rodríguez Saá de San Luis, José Manuel de la Sota de Córdoba, y el mandatario local Angel Maza. Todos ellos coincidieron en un discurso de impronta federalista y críticas a la Alianza. En especial por el recorte de más de 100 millones de pesos de los fondos de coparticipación. Es por eso que la mayoría de los mandatarios, tras una reunión vespertina mantenida en la Universidad de La Rioja, manifestaron su rechazo al proyecto de presupuesto presentado por el Gobierno en el Congreso. Y aseguraron que la única manera de que esa iniciativa sea aprobada es a través del consenso con los legisladores del PJ. Es decir, si introduce las modificaciones que promueve el partido. De esta manera, Menem y el resto de los gobernadores dejaron solo en su prédica acuerdista a Ruckauf, quien justificó su faltazo a La Rioja -aunque envió a su vice Felipe Solá� para seguir de cerca el conflicto suscitado por el corte de ruta en La Matanza. El gobernador bonaerense había dicho el martes, desde Tucumán, donde se celebró el aniversario del gobierno de Julio Miranda, que había que aprobar el presupuesto ya que el país lo necesitaba, amén de congratularse con la propuesta alternativa que confeccionaron los diputados del PJ.
|