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Por Alejandra Dandan
El Hospital de Niños de La Plata no acepta extranjeros. Así lo dejó expresamente indicado un cartelón firmado por la dirección del hospital Sor María Ludovica que apareció estampado en las paredes de los consultorios externos. El texto ordenaba en grandes letras no atender a �chilenos, paraguayos, bolivianos, uruguayos o pacientes del interior� a menos que los enfermos mostrasen papeles en regla. El apotegma intentaba así, de hecho, expulsar a la comunidad extranjera que va creciendo entre los pacientes bonaerenses. Descubierto por un criollo, el cartel generó un escándalo padre en La Plata que terminó con un pedido de informes del Senado al ministro de Salud bonaerense, Juan José Mussi. Pero la dirección del hospital rechazó la autoría de los cartelones y, una vez generada la polémica, mandó arrancarlos e inició un sumario interno a un médico al que se lo acusó de ser responsable de la orden.Carlos Rafaeli fue, por unos días, jefe subrogante de los consultorios externos del Hospital de Niños de La Plata y el presunto dueño de la idea que ayer destapó una situación aún confusa, sobre la atención pública prestada a extranjeros y gente del interior del país. �Rafaeli estuvo a cargo de esa área y malinterpretó un mensaje del director, que no estaba destinado al público sino que revestía carácter interno�, explicó a Página/12 Herminia Itarte, directora ejecutiva del hospital. En ese mensaje �interno�, que terminó estampado contra las paredes, Alberto Gasparini, director asociado, le había �recomendado a Rafaeli, sobre un caso puntual, que pidiera una nota de derivación de un hospital del exterior�, aseguró la directora. Según explicó, ese trámite permite acceder fácilmente a la historia clínica en el país de origen del enfermo y cuidar tanto los aspectos formales como económicos del tratamiento. Sobre todo el económico. �Todo el mundo sabe que acá no se discrimina a nadie �avanzó Itarte�, todo el mundo dice andá al Ludovica que te dan todo: pero esto no es elástico, los recursos son limitados.� Por eso aunque reconoce el tono discriminatorio del cartel, Itarte no deja de quejarse por las cuentas: �Con los extranjeros no tenemos recuperación de costos posible porque no hay trámite válido que pueda hacerse. Y de las otras provincias arrastramos una deuda de un millón y medio de pesos�. Aunque la historia del cartelón duró apenas dos días, la situación en el Ludovica, sobre todo de los extrabonaerenses, parece crónica. El lunes, un vecino de Florencio Varela entró en un consultorio con su hijo y descubrió el mítico cartel que terminó denunciando ante el senador radical Gustavo Marelli. �Nosotros �explica ahora el senador� comenzamos un rastreo que nos permitió descubrir que todos los consultorios externos tenían la misma orden.� Esa orden decía: �Todo paciente que provenga de países limítrofes (Chile, Paraguay, Bolivia, Brasil, Uruguay) o del interior del país, no se atenderá si no es derivado con nota correspondiente de la entidad derivante o del Ministerio de Migraciones. La Dirección.� Amén del mérito por la creación de la nueva cartera ministerial, Carlos Rafaeli ya se ganó el comienzo de acciones presumariales por parte de la directora. Dentro del hospital, se saludó con festejos el destape del escándalo: �Por fin �susurraban algunos médicos� se supo�. Según pudo saber este diario, desde hace aproximadamente un año comenzaron en el Ludovica las sugestivas recomendaciones de achique para extrabonaerenses. En diciembre, un informe interno dio cuenta de que cerca del 50 por ciento de la población atendida eran derivaciones o atenciones de otras provincias o de esa rara zona extranjera lindante con el país. �Nunca hubo una orden rotunda para que no se los atendiera, pero sí para derivarlos a otros centros de salud en los casos de poca complejidad o no urgentes�, indicó a este diario una fuente del hospital. En el pedido de informes dirigido a Mussi, Marelli exigió conocer si esta metodología también se usa en otros centros de la provincia. Voceros del ministro negaron a Página/12 la existencia de cualquier situación que implique la falta de atención por portación de extranjería. �Acá no hay cifras de extranjeros atendidos porque simplemente no los computamos porque no discriminamos�, replicaban desde el ministerio ante el pedido de este diario sobre estadísticas que den cuenta de la cantidad de extra provinciales. De todos modos, la propia Intarte reconoció entre las prácticas de rutina el sondeo sobre la procedencia del enfermo. �Cuando ingresan �se ocupó de detallar� se les pregunta si tiene documentación, si están radicados o con la radicación en trámite, si es turista o es ilegal.� Para la directora, �nada subordina la conducta que se tome desde el punto de vista médico, pero tenemos obligación de saber cuál es la situación legal�. Por las dudas.
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