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Por Patricia Chaina �La TV no educa ni cuida a un niño, simplemente lo entretiene�, sostiene sin rubores Ronnie Amendolara, el nuevo gerente de MTV y Nickelodeon para América latina. �De la educación deben encargarse la escuela, la familia, y si uno piensa que por ver TV un adolescente se puede descarrilar o encarrilar está equivocado�, sostiene. Curiosa posición para quien acaba de asumir la responsabilidad de comandar creativa y comercialmente estas dos señales: Nickelodeon, dedicada al público infantil, y MTV, para jóvenes y adolescentes. Dos canales cuyo impacto obliga a pensar en la orientación de sus contenidos, que si bien �no educan� a la manera tradicional, definen tendencias. Amendolara, ex directivo de Telefé Satelital y de Imagen Satelital, justifica sus premisas: �Nuestro objetivo es el entretenimiento�, insiste en la entrevista con
Página/12. �Y desarrollar la comunicación interactiva con nuestro público�, agrega. La alusión es, obviamente, para Internet, la herramienta que ninguna señal de TV debe ni puede despreciar.�¿Cuál es el plan de trabajo para 2001? �Con MTV será el seguimiento del público para continuar siendo uno de sus canales favoritos. Con Nickelodeon lograr más penetración (se refiere a entrar en Cablevisión y en más plazas del interior), porque los niños se sienten identificados, cubre animación, ficción y no ficción, es entretenimiento basado en una filosofía de contenidos no violentos y de cuidado del medio ambiente. Pero las expectativas de ambos apuntan a estar más online, a una mayor interactividad con el televidente a través de Internet. Hoy nos eligen para ver lo que transmitimos a través de una pantalla: en el futuro queremos que participan activamente de ella. �¿Cómo respondieron a eso, hasta ahora, los televidentes argentinos? �Por la cantidad de computadoras que hay (un millón de PC conectadas, un 3% de la población) no es importante, pero crecerá. El aumento de visitas al site de MTV es fuerte. En enero tuvimos 2,8 millones de visitas, y en setiembre 18 millones. El cable conecta a un 60% de la población: va a ser difícil que se equilibre esa proporción, porque Internet exige tener PC, un servidor, etcétera. Pero aspiramos a crecer con el mercado. Por eso los castings de Vj�s se deciden por el voto en Internet. �La crítica social suele hacer hincapié en el aislamiento que puede generar la conexión a Internet en los chicos, en relación con sus actividades de tiempo libre. ¿Cómo evalúan ustedes esa posibilidad? �Nos parece maravilloso... que se alineen (se ríe). Cada país tiene su cultura y esa percepción tiene que ver con eso, con la cultura de la casa, de la escuela. Es difícil evaluar si está bien o mal. Y muy difícil encontrar el límite, como con la TV. Por otro lado el límite está en el que mira, no en nosotros, los que transmitimos. �Pero desde una pantalla se pueden arbitar los medios para sugerir una orientación o desestimarla. �Ni MTV ni Nickelodeon se lo plantean. No estamos tratando de educar ni de llegar a los padres de los chicos, que son los responsables de educarlos. La TV es entretenimiento, en nuestro caso con buenos valores, pero sin fines didácticos. Tenemos responsabilidad como productores, pero no se puede dejar en manos de la TV la educación de una persona. No es su función. Es difícil pensar que una pantalla frente a la que un chico pasa ocho horas, al mismo tiempo de entretenerlo pueda cuidarlo y educarlo. Preferimos trabajar en mantener el prestigio ganado por el cuidado de imagen y la generación de contenidos de calidad. �¿Con qué programación apuesta a eso? �En MTV no hay mucho nuevo, sino nuevas maneras de presentarlo: �Celebrity Deathmatch�, �Daria�, �The real world�, y los segmentos de música, por supuesto. Para Nickelodeon, un evento central es la segunda película de �Aventuras en pañales�, Rugrats en París. Y como los doscanales son líderes, nuestro trabajo apunta al desarrollo de las páginas web. El futuro es la red. Y nosotros queremos acompañar eso.
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