Por David Cufré
En respuesta a la negativa
de los gobernadores justicialistas a firmar el acuerdo con la Nación,
el Fondo Monetario Internacional aplazó la llegada de sus técnicos
a la Argentina. La misión partirá cuando se haya logrado
el convenio, afirmó ayer desde Washington el director de
Comunicaciones del organismo, Thomas Dawson. El gesto tuvo toda la intención
de ser una advertencia, tanto al Gobierno como sobre todo
a los mandatarios del PJ. Lejos de diluir la importancia de la señal,
como suelen hacer los hombres de Economía frente a algún
contratiempo, el viceministro, Mario Vicens, enfatizó ayer que
si la implementación del programa de medidas anunciado el
último viernes se demora mucho más, no puedo descartar que
se llegue a una situación como la de la semana pasada. Se
refería al golpe de mercado que llevó al Gobierno a proponer
medidas como el congelamiento del gasto público nacional y provincial
por cinco años y la anulación del régimen previsional
estatal.
Ambas iniciativas son las condiciones exigidas por el FMI para conceder
un crédito de 14 mil millones de dólares, que forma parte
del blindaje global con la participación de otros organismos
y bancos de entre 25 y 27 mil millones. Estaba previsto que ayer
llegara a Buenos Aires la misión del organismo, encabezada por
Teresa Ter Minassian y Tomás Raichmann. Pero las autoridades del
Fondo decidieron meter presión. Demorar el arribo de sus técnicos
equivale a sembrar incertidumbre sobre el auxilio financiero, lo único
que esperan los mercados para dejar de acosar a Machinea. Y es, también,
una ratificación de que el préstamo está atado al
pacto con los gobernadores.
Los dos últimos años, el FMI planteó su preocupación
por el déficit y el endeudamiento de las provincias. Tanto a Roque
Fernández como a Machinea, les reclamó que los acuerdos
con Argentina incluyeran una meta de déficit fiscal global, promediando
el de la Nación y las provincias. Los ministros esquivaron el compromiso,
con el argumento de que la Nación no puede imponer condiciones
a los distritos del interior. Pero ante la actual crisis, el FMI quedó
con la carta ganadora. Ahora, que el Gobierno está acorralado,
le exigió que fuerce a los gobernadores a congelar el gasto público,
nada menos que por un lustro.
La misión del FMI fue diferida hasta tanto no se llegue a
un acuerdo por el compromiso federal y se avance en la reforma previsional,
repitió Vicens. La lógica es la si-guiente: el Fondo apura
al Gobierno, para que a su vez apure a los gobernadores. Si no se
logra el acuerdo (por el crédito de blindaje), la perspectiva de
crecer es muy escasa, advirtió el funcionario, descargando
la responsabilidad de la suerte de la economía en los gobernadores.
Algunos actúan con irresponsabilidad, denunció,
por su resistencia a firmar el pacto con la Nación. Si somos
inteligentes, si somos gente con sentido común, deberíamos
evitar pasar por una crisis y resolver de una vez esta cuestión,
completó el viceministro.
Página/12 se comunicó con un alto funcionario del FMI, quien
aclaró que el condicionamiento central del préstamo es la
firma del convenio con las provincias. En cambio, contradiciendo a Economía,
puso en un segundo plano el tema de la reforma previsional. Con
que envíen el proyecto al Congreso sería suficiente,
dijo el informante del Fondo. Este diario consultó a dos secretarios
de Estado del Palacio de Hacienda. Uno dijo que si se demora la aprobación
de la reforma, el acuerdo con el FMI se caerá. Otro sostuvo lo
contrario. Machinea, por su parte, abonó la primera hipótesis,
durante la tensa reunión que mantuvo anteayer la plana mayor del
Ejecutivo y el Congreso.
El tema no es menor. El ministro reclama a De la Rúa que firme
el decreto de necesidad y urgencia para implementar la reforma. El argumento
es que retrasar la medida puede frustrar el crédito del FMI. En
tal caso, los mercados volverán a la carga. Pero los diputados
de la Alianza le dicen al Presidente que si no opta por la vía
parlamentaria, el bloquepuede partirse, con el alejamiento del Frepaso.
Mientras se desarrolla esa discusión, el FMI dijo ayer oficialmente
que el retraso de su misión es por el acuerdo con las provincias,
y no mencionó el tema previsional.
Sin embargo, la disputa entre Economía y el Congreso que puso a
De la Rúa entre dos fuegos sigue caliente. Vicens dijo no
se ha considerado, no se especula con la posibilidad de que el equipo
económico se aleje del Gobierno. Pero admitió que será
un tema a discutir en el futuro. Los plazos no son largos, sino
más bien todo lo contrario. Una altísima fuente del Ejecutivo
reconoció a Página/12 que si el próximo viernes la
situación con las provincias y la reforma previsional se mantiene
como hasta ahora, el Gobierno podría verse sacudido por una crisis
mayor. Y no descartó la renuncia de Machinea, aunque, en ese escenario,
podría ser acelerada por un crac financiero. En medio de ese clima
de máxima tensión, el FMI agregó ayer un poco más
de presión.
También el
Presupuesto
Un nuevo frente de tormenta apareció ayer en el camino
hacia la aprobación del Presupuesto 2001, agregando aun más
incertidumbre al acuerdo con los gobernadores y, por ende, con el
FMI. En notas individuales, 99 diputados justicialistas, la totalidad
de la bancada, solicitó por escrito al presidente de la Cámara
baja, el radical Rafael Pascual, que el dictamen del proyecto de
ley de Presupuesto vuelva a comisión para tratar las modificaciones
propuestas desde el Poder Ejecutivo. Los legisladores opositores
resisten por esta vía la posibilidad de que los cambios al
proyecto se produzcan, sin análisis previo, en el recinto.
Para la bancada que conduce Humberto Roggero, las medidas anunciadas
alteran la pauta de crecimiento contemplada en el Presupuesto inicial.
Además, sostienen, cualquier acuerdo al que se llegue con
los gobernadores sobre los gastos y recursos para el próximo
quinquenio tienen incidencia presupuestaria. Es probable que el
bloque de Acción por la República decida también
pedir la vuelta del dictamen a comisión. En las filas de
la propia Alianza también aparecieron divergencias. Quince
diputados de la coalición gobernante aseguraron que votarán
negativamente el artículo que recorta el Fondo Especial del
Tabaco. Los legisladores argumentaron que de pretender mantener
este artículo, votaremos negativamente el mismo y defenderemos
en forma mancomunada y solidaria los intereses de nuestros trabajadores
y productores tabacaleros, consignaron en una nota enviada
a las autoridades de la Cámara.
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LEVE
CAIDA DE LAS ACCIONES Y DE LOS TITULOS PUBLICOS
Apenas una señal de molestia
Por tercera jornada
consecutiva los números fueron esquivos para los inversores bursátiles.
El Indice Merval volvió a caer ayer y quedó en 424,4 puntos,
perdiendo en el día 1,8 por ciento y acumulando en la semana una
baja del 2,3 por ciento. Los títulos públicos no tuvieron
mejor suerte. Los bonos globales con vencimiento en el año 2017
perdieron 0,8 por ciento y los que tienen duración hasta 2027 quedaron
0,6 por ciento abajo. Este comportamiento negativo fue explicado por los
operadores como una reacción a la demora en la firma del acuerdo
fiscal con las provincias y a las idas y vueltas alrededor de la reforma
previsional.
La Bolsa es muy sensible. Cuando el contexto internacional, con Wall Street
a la cabeza, no tiene movimientos fuertes que justifiquen las variaciones
locales, la explicación se vuelve sobre los problemas internos.
Aunque con escasos volúmenes negociados, la semana comenzó
con leves subas para festejar el nuevo paquete del Gobierno, precisamente
las que el mercado quiere. Pero las probables demoras en la
imposición del paquete al Congreso y las provincias dieron lugar
a tres días de bajas consecutivas y el Merval restó un 2,4
por ciento a su ya magra performance del año. Para los analistas
más propensos a la evaluación técnica, menos sensibles
por lo tanto a los esquivos humores, la continuidad de la baja se relaciona
con el estancamiento de la producción. En la Bolsa cotizan empresas
cuyas valuaciones dependen de sus resultados. En las vinculadas a la evolución
de la actividad interna, es lógico que la performance continúe
negativa o estable.
Pero los analistas del mercado están siempre dispuestos
a aprovechar la tribuna. La baja de la semana, de la que se contagió
también Brasil -el Bovespa cayó 1,2 por ciento, fue
explicada porque no sale el acuerdo con las provincias. El
temor se basa en que la dilación del nuevo pacto fiscal altere
los ánimos de los organismos financieros, quienes podrían
dilatar la aprobación del blindaje financiero prometido.
En el exterior, los bonos de la deuda argentina se cotizaron en los siguientes
valores: Discount, 74,250 (-2,0); FRB, 87,375 (-0,3); y Par, 65,500 (-0,2).
En Wall Street las variaciones fueron leves. El Dow Jones bajó
0,3 por ciento, en tanto que el Nasdaq perdió 0,2 por ciento.
SIN
CAMBIOS EN BUENOS AIRES, MEJOR EN ROSARIO
El empleo privado quedó estancado
El mercado laboral
de Capital Federal y Gran Buenos Aires muestra signos de estancamiento
en los últimos meses, lo cual fue interpretado por el Ministerio
de Trabajo como un síntoma positivo, ya que detiene la tendencia
descendente verificada desde fines de 1999. La encuesta oficial de octubre
sobre empleo privado muestra un crecimiento del 0,1 por ciento en los
puestos de trabajo con respecto del mes anterior, pero un retroceso del
0,4 por ciento en relación con un año atrás.
El informe de Trabajo destaca que desde junio de 1998 no se registraba
un aumento de la cantidad de empleos en dos meses consecutivos. El dato
relevante, sin embargo, es que esa mejora fue de apenas el
0,1 por ciento en cada uno de esos meses. Es decir que sobre cada 1000
ocupados en agosto, en octubre sumaron 1002. Para el ministerio conducido
por Patricia Bullrich, el indicador podría revelar el inicio
de una tendencia a la mejora de la demanda de empleo por parte de las
empresas.
Los resultados son más alentadores en el Gran Rosario, donde se
verificó un crecimiento del empleo del 0,7 por ciento respecto
de setiembre y del 2,3 por ciento en relación con igual período
del año pasado. En Córdoba, en cambio, se registró
una baja del 0,2 por ciento respecto de setiembre y del 1,3 en relación
con octubre del año pasado.
La cartera de Trabajo destacó que la generación neta de
puestos laborales durante octubre fue impulsada por las contrataciones
por tiempo determinado y se ha dado en el sector de la producción
y, sobre todo, en personal auxiliar. La modalidad de contrataciones
temporales avanza sobre los contratos por tiempo indeterminado, sobre
todo en Rosario y Córdoba, en donde los empleados bajo dicha condición
crecen sensiblemente por encima de la tasa promedio.
La ausencia de la tendencia clara hacia la recuperación del nivel
de empleo quedó evidenciada, además, en algunos números
absolutos: la muestra abarca a 1222 empresas en las tres regiones mencionadas
de más de 10 empleados y registra un crecimiento en la dotación
total de 1155 puestos de trabajo. Es decir, menos de un empleado adicional
por empresa.
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