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Por
Carlos Rodríguez
 Cuando
escuchó que su madre estaba en dificultades, Hernán Gabriel
Barrionuevo, de 18 años, abrió la puerta de su casa del
Talar de Pacheco y apenas pisó la vereda le pegaron un balazo en
el pecho y murió minutos después en el Hospital de Tigre.
Todo había comenzado en la madrugada del lunes, cuando la arquitecta
y docente Elida Suárez, la mamá de la víctima, regresaba
en auto a su domicilio de México 1167, de esa localidad bonaerense,
y fue interceptada por dos jóvenes que aparentemente querían
llevarse el vehículo. Todo hace pensar que la mujer reconoció,
entre los asaltantes, a un alumno suyo. Esta circunstancia, sumada a la
intervención de su hijo, desencadenó la violencia. Una vez
cometido el ataque, los dos asaltantes huyeron a pie sin robar nada. Horas
después fue detenido un chico de 16 años que se encuentra
a disposición de un juzgado de menores y que sería el autor
del disparo mortal, que partió de una pistola 22.
“¿Pero cómo me van a asaltar a mí? ¿Ustedes
se volvieron locos”, serían las dos frases que alcanzó
a escuchar, desde el interior de la casa, el joven Barrionuevo, quien
intentó salir en defensa de su madre, pero “no tuvo oportunidad
de hacer nada”, informó a Página/12 una fuente allegada
a la causa. “Mi mamá reconoció a uno de los chicos,
ya que había sido alumno suyo”, declaró una joven de
25 años, hija de la docente, quien también se encontraba
en la casa cuando ocurrieron los hechos y que pidió a la prensa
que mantenga en reserva su nombre.
La causa está siendo investigada por el fiscal de Tigre John Broyard
y por su adjunto, Jorge García, con intervención por el
Juzgado de Garantías de Orlando Díaz. En diálogo
con este diario, Broyard confirmó que Barrionuevo murió
antes de que pudiera intervenir, que en el lugar se encontraron dos vainas
servidas pertenecientes a una pistola calibre 22 y que poco después
del crimen una patrulla de la comisaría del Talar de Pacheco detuvo
a dos chicos, que estaban armados y a punto de cometer otro asalto.
Broyard admitió que uno de esos jóvenes, que tiene 16 años,
“está sospechado de haber participado en el hecho” e
incluso de haber sido el autor del disparo mortal, mientras que el otro
“nada tendría que ver con el tema que investigamos”.
Los fiscales continúan en la causa porque está confirmado
que fueron dos los frustrados asaltantes de la casa del Talar de Pacheco.
Hasta tanto exista la posibilidad de que el otro autor sea mayor de edad,
los dos juzgados seguirán actuando en forma paralela.
Los fiscales Broyard y García consideran que, de ser un adulto,
la persona que mató a Barrionuevo debería ser acusada por
el delito de homicidio “criminis causa”, por aplicación
del artículo 80, inciso séptimo del Código Penal,
que establece la reclusión perpetua para quien comete un crimen
con el propósito de ocultar otro delito o para asegurar sus resultados
o por no haber logrado el fin propuesto al intentar el delito original.
En caso de que el joven detenido fuera el autor, las normas deberán
ajustarse a las que disponga el juzgado de menores.
Al parecer, la intención de los dos asaltantes era apoderarse del
automóvil Fiat Palio que conducía Elida Suárez, de
49 años, que es arquitecta y profesora de dibujo técnico
en la Escuela de Educación Técnica Número 1 “General
Manuel Savio”, ubicada en las cercanías de su domicilio. La
hija mayor de la mujer le dijo a la prensa que la docente “identificó
a uno de los chicos porque había sido alumno suyo y trató
de convencerlo para que no robara nada”. El intento de asalto se
produjo frente al portón de acceso al garaje y el hijo de la mujer
salió por la puerta principal, pero apenas pudo dar un par de pasos,
ante de recibir el balazo.
En el barrio, bajo la conmoción generada por el crimen, los vecinos
no paraban de quejarse. “Es una vergüenza lo que pasa acá,
en la calle y a la salida de los lugares bailables, donde siempre hay
escándalo”, agregó una mujer llamada Marta. “Todos
los días ocurren hechos similares y ya no sepuede vivir tranquilo”,
fue la expresión más escuchada entre los consultados. Anoche,
después de un operativo por toda la zona, la policía detuvo
a los dos menores y uno de ellos habría sido reconocido por Elida
Suárez como el autor del crimen.
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