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Por Roque Casciero
 Luis Alberto Spinetta, Los
Fabulosos Cadillacs, Fito Páez y León Gieco son algunos
de los artistas que se presentarán en la segunda edición
del ciclo Argentina en Vivo, que comenzará el sábado 6 de
enero en Ushuaia, con la actuación de Divididos. En total serán
trece shows y el final será con Mercedes Sosa en Santa Catalina,
el pueblo jujeño ubicado en el extremo norte del país: allí
se le rendirá un homenaje especial a la cantante tucumana. Todos
los conciertos serán transmitidos en directo por FM Supernova o
Radio Nacional y televisados en diferido por Canal 7. En cuanto a los
medios audiovisuales, la novedad es que la edición 2001 será
documentada en una película, a ser estrenada a mitad de año
en el circuito comercial de cines de todo el país. La idea de la
Secretaría de Cultura y Comunicación de la Nación
–organizadora del evento– es que se trate de sendos cortos de
siete minutos por show, filmados con libertad de criterios por varios
cineastas jóvenes (ya está confirmado Fabio Nardini, el
de 76 89 03) y coordinados por un director general, que podría
ser Fabián Bielinsky (Nueve reinas).
El cronograma de fechas es el siguiente: después del comienzo con
Divididos, los Ratones Paranoicos tocarán el 10 de enero en Río
Gallegos (Santa Cruz); el 14 Fito Páez lo hará en Neuquén
y el 21 Carlos “La Mona” Jiménez estará en Bahía
Blanca (Buenos Aires). Los conciertos en el Litoral serán el 25,
en Corrientes, con los Caballeros de la Quema; el 28 en El Dorado (Misiones),
con León Gieco, y el 31 en Avellaneda (Santa Fe), con Memphis La
Blusera. El 4 de febrero habrá un festival alternativo en Buenos
Aires, del que participarán Daniel Melero, El Otro Yo, Los Siete
Delfines, Turf, María Gabriela Epumer, Suárez, Francisco
Bochatón, Leo García y Sergio Pángaro. El 10, los
Cadillacs tocarán en Carlos Paz (Córdoba); Spinetta se presentará
el 15 en San Rafael (Mendoza), los Pericos estarán el 18 en San
Juan, Julio Bocca bailará el 24 en Santiago del Estero y el 3 de
marzo será el final con Sosa en Santa Catalina. Salvo los casos
de Pericos y Páez, los artistas seleccionados nunca se habían
presentado antes en las localidades donde actuarán.
Alejandro Gómez, director de Programación Cultural, le dijo
a Página/12 que también hubo conversaciones con Charly García,
Gustavo Cerati y La Renga. El primero declinó participar del ciclo
porque estará de gira por América latina con Sui Generis;
el ex Soda Stereo planea encerrarse a componer los temas de su segundo
disco solista, mientras que el trío de Mataderos quedó en
continuar las conversaciones para hacer algún concierto especial
durante el 2001. Chizzo, Tete y Tanque se mostraron dispuestos luego de
ver los resultados de la experiencia de sus amigos de Divididos en Tilcara,
en un concierto organizado por la secretaría.
La edición del año pasado comenzó con cuatro fechas
en el estadio de River Plate, en las cuales se presentaron los Pericos,
Memphis y Turf; Julio Bocca; Víctor Heredia y León Gieco,
y Carlos “La Mona” Jiménez, Los Auténticos Decadentes
y Kapanga. Luego hubo shows de Fito Páez en Rosario y Paraná,
de Gieco en Presidencia Roque Sáenz Peña (Chaco) y de Mercedes
Sosa en Formosa. La fecha que provocó más controversia,
como no podía ser de otro modo, fue la de Charly García
en Mendoza: a pesar de que todo funcionó bien en el concierto,
donde tuvo como invitados a Sosa y Nito Mestre, luego fue preso por una
confusión y terminó tirándose desde el noveno piso
a la pileta del hotel donde estaba alojado. Los recitales siguientes no
fueron tan problemáticos: Caballeros de la Quema tocó en
San Luis por primera vez en su carrera, Diego Torres se presentó
en Puerto Madryn, hubo una fecha alternativa en La Falda (con Francisco
Bochatón, María Gabriela Epumer, Los 7 Delfines y Juana
La Loca), Luis Salinas y Walter Malosetti pasearon su jazz por Bariloche,
los Pericos y Los Cafres llenaron de reggae a Mar del Plata. El cierre
fue todo un símbolo: León Gieco tocó en la Antártida
ante un público formado por los militares de la base Vicecomodoro
Marambio, quienes se mostraron entusiastas a pesar de que el santafesino
no se calló sus convicciones sobre la última dictadura.
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