Por A. D. B.
A partir de la contundente
derrota 4-1 ante el Vasco da Gama de Brasil, el miércoles pasado,
por una de las semifinales de la Copa Mercosur, River busca despedir el
año de la mejor manera posible. Pero parece que eso resultará
muy complicado, debido a que las críticas de los hinchas y de un
sector de la dirigencia hacia el plantel, aparecieron rápidamente.
Además, la necesidad de desprenderse de varios jugadores para sanear
el déficit económico, anticipa un 2001 demasiado movido.
Inclusive, en la tarde de ayer surgieron fuertes versiones que aseguraban
que el volante Pablo Aimar había sido transferido al Inter de Italia
en cerca de 30 millones de dólares. Por la noche, algunos miembros
de la Comisión Directiva desmintieron a este diario los rumores.
De todas maneras, todo indica que el juvenil y muchos de sus compañeros
dejarán la institución en la primera mitad del año
que viene. Igualmente, el malestar de los simpatizantes, que el miércoles
pidieron por la vuelta de Ramón Díaz a la dirección
técnica, seguramente se sentirá hoy cuando el equipo reciba
a Belgrano, por la decimosexta fecha del torneo Apertura. El clima que
se espera en el estadio Monumental podría ser negativo para el
equipo, que aún permanece con alguna esperanza de alcanzar a Boca
en el campeonato. Precisamente, el buen presente del conjunto de Carlos
Bianchi es uno de los puntos en contra. En ese sentido, River adelantó
su viaje a Brasil para el lunes a las 15.30, cuando pensaban hacerlo el
martes, y así poder evitar las declaraciones sobre un posible triunfo
de Boca en Tokio.
Para recibir a los cordobeses, River volverá a presentar al grupo
denominado los cuatro fantásticos, que integran Ortega,
Aimar, Saviola y Angel. El único cambio con respecto al equipo
que jugó ante el Vasco será el ingreso de Eduardo Berizzo
en la mitad de la cancha, en lugar del juvenil Ariel Garcé. El
entrenador Américo Gallego señaló en las últimas
horas que la crisis futbolística de River se magnifica por
el buen presente de Boca. Sin embargo, el técnico se mostró
optimista y dijo:
Si empezamos a analizar el presente, digamos que nos va mal porque
no estamos primeros en ninguna de las dos competencias (por el Apertura
y la Copa Mercosur). Está más difícil en la Copa,
pero nos tenemos mucha fe. Si desgraciadamente nos toca quedar afuera
de las dos, este año hemos ganado un campeonato (el Clausura).
No es que no hemos ganado nada en el año.
Por su parte, uno que ya tiene futuro europeo es el defensor Diego Placente,
quien llegó a un acuerdo con el Bayer Lerverkusen de Alemania.
Lo único que falta resolver es que River apruebe la forma de pago
de los alemanes. El contrato está prácticamente acordado,
sólo falta arreglar la forma de pago, aunque soy optimista,
informó Marcos Franchi, representante del jugador.
|