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Por Pedro Lipcovich
 Lo mejor es empezar por la
cifra más pequeña: 101 chicos enfermaron de sida el año
pasado en la Argentina por transmisión desde la madre durante el
embarazo o la lactancia, y absolutamente todos esos casos podrían
haberse evitado con los medios ya disponibles en el país, cuya
tasa de infección en niños –una de las mayores de América–
asciende a 1255 casos. Una vez más, el VIH vale como lente para
visualizar los males de una sociedad, en este caso la falta de atención
a las embarazadas. Entre niños y adultos, hay más de 20
mil enfermos y más de 120 mil infectados en el país, con
“prevalencia en la población joven, tendencia a la heterosexualización,
feminización y pauperización”, según admite
el Ministerio de Salud. El Día Mundial de la Lucha contra el Sida
encuentra la epidemia sin control en los países pobres, con 3 millones
de muertos en lo que va del año. En la Argentina continúan
los reclamos por mala entrega de medicamentos y falta de acciones consistentes
de prevención.
“Es vergonzoso –sostuvo Pedro Cahn, jefe de Infectología
del Hospital Fernández y ex presidente de la Sociedad Argentina
de Sida–. Casi el 7 por ciento de los casos nuevos de sida en la
Argentina son por transmisión perinatal, cuando hay recursos fáciles
y baratos para controlarla, diagnosticando el VIH en la embarazada y dándole
una medicación. Así, en Italia, en todo el año pasado
ni un chico nació con VIH.”
La transmisión madre-hijo “indica un mal cuidado prenatal
–señaló Cahn-; en el conurbano bonaerense, por ejemplo,
el 70 por ciento de las embarazadas no cumple con las cinco visitas prenatales
que reclama la Organización Mundial de la Salud (OMS); muchas llegan
al hospital ya en el trabajo de parto”. Esto se da en un contexto
donde “en La Matanza, por ejemplo, las tasas son similares a las
de San Pedro Sula, en Honduras, que tiene las mayores de América
en transmisión perinatal”.
Mabel Bianco –directora del Programa Nacional de Sida del Ministerio
de Salud– admitió que sólo “se está logrando
testear al 45 por ciento de las embarazadas. Desde 1997 se trabaja con
el personal de los programas locales de sida, con responsables de las
maternidades y con las obstétricas. También hay que llegar
a las embarazadas mismas para que estén dispuestas al test”.
De los 101 enfermos de sida menores de 13 años que se detectaron
en 1999 y hasta agosto de 2000, 57 corresponden a la provincia de Buenos
Aires, 11 a Capital Federal, 7 a Santa Fe, 7 a Misiones y 5 a La Rioja.
De los 1255 que enfermaron desde que empezó la epidemia, 796 son
de la provincia de Buenos Aires y 210 de Capital Federal.
El total de enfermos registrado en la Argentina, hasta el 31 de agosto
pasado, es 17.615 (se estima en 20.458 por el subregistro). Son 13.678
hombres y 3805 mujeres. La proporción de mujeres fue creciendo
desde el comienzo de la epidemia, que actualmente marca “una prevalencia
en la población joven, con tendencia a la heterosexualización,
feminización y pauperización, con un alto grado de transmisión
de madre a hijo y entre personas que utilizan drogas inyectables”,
según el Ministerio de Salud.
En el 39,7 por ciento de los casos, la transmisión fue por drogas
inyectables. En hombres, el 48 por ciento recibió el virus por
vía sexual y el 46 por ciento por compartir jeringas. En mujeres,
la vía sexual concierne al 61 por ciento, y el 32 por ciento a
jeringas compartidas. En cuanto a la edad, el grupo más afectado
es, en hombres y mujeres, el de 25 a 29 años (como la enfermedad
suele manifestarse varios años después de la infección,
quiere decir que contrajeron el virus en la adolescencia). Luego viene
la franja de 30-34 años. Después, para varones, de 35 a
39 y, para mujeres, de 15 a 19 años: las mujeres suelen infectarse
antes.
En cuanto a la cantidad total de infectados en el país, se estima
en 120 mil. “No se efectúan campañas de detección
precoz, que debieran transmitirle a la gente: ‘Si usted tuvo sexo
no protegido en los últimos años, venga a testearse’.
La mayoría dará negativo, pero los que den positivo se enterarán
a tiempo”, instó Cahn. Los problemas en la provisión
de medicamentos para personas con VIH no cesaron este año en la
Argentina. El Encuentro Nacional de Organizaciones No Gubernamentales
del área denunció ayer ante el ministro de Salud, Héctor
Lombardo, la falta de una “entrega fluida y permanente” de medicamentos,
manifestó sus “serias dudas” sobre la calidad de los
que se entregan y señaló que “no se emprenden acciones
efectivas de prevención”. Mario Burgos, del comité
coordinador del Encuentro, sostuvo que “esta semana faltaron medicamentos
básicos en la provincia de Buenos Aires, Capital Federal y Rosario.
El Ministerio de Salud no garantiza un stock de medicamentos ni sanciona
a los laboratorios que no los entregan a tiempo: el único que recibe
un castigo sistemático es el paciente”.
En el mundo, sólo en este año murieron 3 millones de personas
por la enfermedad, y 21.800.000 desde el comienzo de la epidemia. Hay
más de 36 millones de enfermos de sida.
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Una campaña
focalizada
Usuarios de drogas endovenosas, trabajadoras sexuales y homosexuales
serán los destinatarios de una campaña focalizada
de prevención del VIH que llevarán adelante en los
próximos meses ocho Ongs, con el apoyo técnico y financiero
del Programa Nacional de Lucha contra los Retrovirus del Humano,
Sida y ETS. “Trabajarán cara a cara con la gente, con
folletos, videos, charlas, y entregando preservativos”, explicó
a Página/12 la titular del organismo, Mabel Bianco.
La Sociedad Gay Lésbica Argentina (Sigla), Nexo y Buenos
Aires Sida llegará, a través de sus organizaciones
asociadas, a grupos de gays en discos de Capital Federal, conurbano
bonaerense, y las ciudades de Mar del Plata, Rosario, Córdoba
y Santa Fe. La Asociación de Meretrices de la República
Argentina (Ammar) realizará actividades entre prostitutas
de distintos puntos del país. Otras tres ongs, la Asociación
Intercambios, la Fundación Red y ARDA, y la Asociación
Civil Don Jaime de Nevares, se dedicarán a difundir cómo
prevenir el contagio entre consumidores de drogas endovenosas y
sus familiares.
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Cintas rojas y actividades
La ciudad empezó ayer a vestirse con las cintas rojas que
hoy crecerán: la Casa Rosada, el Ministerio de Salud, el
Palacio de Correos, el Canal 7, varias iglesias y templos lucirán
la bandera con el lazo rojo en sus frentes en el Día Internacional
de Lucha contra el Sida. La idea es que después la gente
se enganche en una actividad que precisamente se llama “Prendete”:
a partir de las 15, representantes de la Dirección General
de la Juventud del Gobierno porteño invitarán a colocar
cintas rojas en los árboles que se encuentran a ambos lados
de la 9 de Julio, desde San Juan hasta Libertador. Será apenas
una de las múltiples actividades que se desarrollarán
hoy. Aquí siguen algunas:
 Coro y música:
en la Plaza de la República, a las 11.30, el coro Kennedy
cantará junto a 2500 chicos de escuelas primarias. A las
20, en el mismo escenario actuarán Los Caballeros de la Quema
y Virus.
Mantas: en la Plaza Las
Heras las fundaciones Solidaridad entre Argentinos y Fundación
por los Detenidos Sociales realizarán a partir de las 14
su tradicional exposición de mantas confeccionadas para recordar
a los muertos por el sida.
Denuncia: frente al Ministerio
de Salud, la Comunidad Homosexual Argentina pondrá una mesa
en la vereda para denunciar la falta de medicamentos.
Bandas: en Ruiz Huidobro
y García del Río (Saavedra) se realizará el
evento “Sonó el Sida”, organizado por la Dirección
de Políticas Sociales del Gobierno porteño. Actuarán
cinco bandas de rock de la zona y la murga “Los Reyes del Movimiento”.
Encuentro interreligioso:
en el templo Nueva Comunidad Israelita, a las 20.30, a cargo del
rabino Baruj Plavnick. Arcos 2319.
Preservativos al viento:
la Fundación Huésped con el Coro Kennedy hará
una suelta de preservativos firmados. Mañana a las 15 en
el comedor Los Piletones, del Bajo Flores.
VI Edición del
Maratón 2 km por el Sida. Mañana en Parque Patricios
a las 16. Cierran los Fabulosos Cadillacs y el grupo Pez, a las
19.
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LAS
PREGUNTAS RECIBIDAS EN EL 0–800 DEL SIDA
Hay más de mil llamados cada día
Por M.C.
Más de un millar de
personas llaman diariamente a la línea telefónica gratuita
del Ministerio de Salud para pedir información sobre el sida. El
70 por ciento de los que discan el 0–800–33–444 son jóvenes,
tanto varones como mujeres, de entre 15 y 29 años, preocupados
porque tuvieron una relación sexual sin protección y quieren
saber qué riesgo de contagio del VIH han corrido o dónde
pueden realizarse un análisis de sida.
“Muchos se presentan como estudiantes secundarios o universitarios.
Dicen que necesitan material para algún trabajo escolar y después
se despachan con una consulta privada”, reveló a Página/12
Mabel Bianco, directora del Programa Nacional de Lucha contra los Retrovirus
del Humano, Sida y ETS.
Cómo se puede transmitir el virus y dónde pueden realizar
una consulta personalizada son otras de las inquietudes planteadas a los
operadores telefónicos del 0–800. “A veces llaman docentes
y también mucha gente del interior del país solicitando
material informativo”, precisó Bianco. “Otros piden asesoramiento
terapéutico, pero en esos casos los derivamos a ONGs que brinden
ese tipo de información, porque nuestra línea se dedica
a la prevención”, explicó la funcionaria.
La línea fue presentada en sociedad un año atrás
y comenzó a funcionar en enero. Pero, por falta de difusión,
en sus primeros meses de vida recibió apenas unos 30 llamados por
día, en promedio. “La monitoreamos y descubrimos que no apuntaba
a la prevención, los operadores no hablaban, por ejemplo, del riesgo
de compartir las jeringas en el consumo de drogas endovenosas y tampoco
promovían el uso del preservativo”, cuestionó Bianco.
A partir de ese diagnóstico, ordenó recapacitar al personal
e incorporar nuevos operadores. Con la campaña televisiva de difusión
de la línea (en la que participan Susana Rinaldi, Julián
Weich, Valentina Bassi y Manuel Callau, entre otros), la cantidad de llamados
creció abruptamente. Actualmente, según señaló
Bianco, recibe entre 1000 y 1200 llamados diarios, con picos de 1500 cuando
aparecen en los medios alguna novedad importante sobre recientes descubrimientos
o progresos en la investigación del tratamiento de la enfermedad.
El 0–800 funciona, con diez líneas permanentes, de lunes a
viernes de 9 a 22, pero el proyecto oficial es ampliar los días
de consulta a los fines de semana.
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