Por Eduardo Tagliaferro
El borrador con el núcleo
de iniciativas que el líder del Frepaso, Carlos Chacho
Alvarez, presentará al Presidente, Fernando de la Rúa, y
la situación interna del Frente fueron analizados ayer por la mesa
reducida de dirigentes frepasistas que hace las veces de conducción
partidaria. El jefe de la bancada aliancista en diputados, Darío
Alessandro, ratificó como adelantó este diario
que la propuesta chachista gira sobre tres grandes áreas: económica,
social y transparencia política. Hoy o mañana, Chacho
llamará al Presidente para concertar una reunión,
dijo Alessandro a la prensa, una vez finalizado el cónclave en
la Casa del Frente.
Graciela Fernández Meijide, Darío Alessandro, Rodolfo Rodil
y José Vitar almorzaron con Chacho y escucharon de su boca algunas
de las iniciativas que éste piensa presentarle a De la Rúa,
y que en algunos casos ya habían leído en los medios gráficos.
Chacho confía en que las propuestas que le llevará
a De la Rúa serán tenidas en cuenta, señaló
uno de los participantes del almuerzo. De esta manera, el diputado descartó
cualquier movida rupturista, en caso de que las iniciativas fueran descartadas.
Seguiremos siendo apoyo crítico, afirmó la semana
pasada Alvarez a sus allegados, cuando comenzaron a ser analizadas las
ideas que le piensa presentar a De la Rúa.
Las propuestas buscan eficientizar la gestión del Gobierno,
comentó otro de los diputados que participó del encuentro
con Chacho. Cuando habla de eficientizar, Alvarez pone especial atención
en las políticas sociales. Para esto, el ex vicepresidente impulsa
crear un ente gubernamental que centralice la asistencia social.
Podría depender de Presidencia o de la Jefatura de Gabinete,
respondió Darío Alessandro, cuando este diario preguntó
qué lugar del organigrama estatal ocuparía el futuro ente
social. Como todo ente, el organismo podría contemplar una dirección
colectiva que incluya a un representante de organizaciones no gubernamentales,
con el objetivo de darle transparencia a la ayuda social.
Cómo dinamizar la Justicia, y remover a muchos de los jueces federales
cuestionados, es un tema que aún está en debate. Al margen
de las opiniones que Chacho suele escuchar, uno de los participantes del
encuentro de ayer reconoció la necesidad de producir cambios profundos
en la Justicia y dijo a este diario que es imprescindible resolver
la asignatura pendiente que nos dejó el menemismo con la Justicia
(ver en página 11).
El borrador sobre el que Alvarez informó ayer a sus compañeros
está lejos de ser definitivo. El documento está siendo redactado
a mano por el propio ex vicepresidente, lo que hace que el encuentro con
De la Rúa aún no tenga fecha. Además de las propuestas
que piensa presentarle al Presidente, la interna frentista ocupó
un lugar destacado en la reunión de la virtual mesa de conducción.
Chacho está desconcertado y produciendo una suerte de pulverización
del Frepaso, dijo ayer el titular del Inadi, Eugenio Zaffaroni,
al referirse al secreto con el que el ex vicepresidente diseñó
las iniciativas. El titular del Instituto contra la Discriminación
reclamó un debate interno para horizontalizar la agrupación
y ubicarla en el espacio de la centroizquierda. El cuestionamiento
de Zaffaroni se sumó a las críticas que se habían
iniciado en el bloque parlamentario y que a lo largo de las últimas
semanas continuaron en la mayoría de los plenarios frepasistas.
LA
INTRODUCCION DEL DOCUMENTO QUE PREPARA ALVAREZ
El análisis del politólogo Chacho
Por José
Natanson
Carlos Chacho Alvarez
dedicó casi todo el martes y buena parte de la mañana de
ayer a terminar de escribir el documento que le presentará a Fernando
de la Rúa. Con las propuestas listas, el ex vice se concentró
en la redacción de la introducción: un par de carillas en
las que, tomando distancia de su rol de dirigente, sintetizará
el encuadre político que lo llevó a tomar la
decisión de recuperar un papel más activo en la Alianza.
El eje de su razonamiento es que el Gobierno atraviesa por una crisis
de confianza de la que se deberá recuperar con iniciativas
que vayan más allá de la teoría oficial del crecimiento
espontáneo.
En las últimas dos semanas, Alvarez estuvo bastante ocupado con
una ronda de consultas a distintos especialistas, que lo ayudaron a afinar
su paquete de iniciativas: con los economistas Guillermo Rosenwurcel y
Roberto Feletti habló sobre las ventajas de dividir el Ministerio
de Economía, con Marcos Makón sobre la reforma política,
con Graciela Fernández Meijide sobre la unificación de los
planes sociales en un Banco o Agencia Social, con Rafael Bielsa sobre
la Justicia y con Eduardo Sguiglia, el frepasista encargado del ente de
control de Aeropuertos, sobre la reformulación de los organismos
reguladores.
Terminadas las consultas, Chacho se concentró en la redacción
de la introducción. A pesar de que en los lejanos tiempos de campaña
imaginó convertirse en el adalid de las nuevas tecnologías,
el jefe del Frepaso está lejos de ser un genio informático:
casi todo el documento fue escrito a mano.
En la primera parte del paper, que apuraba ayer, Chacho transformó
su rol de actor político para analizar la realidad desde una cierta
distancia, con el objetivo de darle sustento político al paquete
de medidas. Una fuente cercana al ex vice explicó a Página/12
que la argumentación gira en torno de la crisis de confianza
que atraviesa el Gobierno. Según Alvarez, la Alianza ha desaprovechado
el capital político con el que llegó al Gobierno. Para recuperarlo,
no alcanzará con seguir la teoría del equipo económico:
cumplir con las condiciones de los organismos internacionales, garantizar
un blindaje financiero y esperar pacientemente que la recuperación
del ciclo de crecimiento derrame beneficios sobre la sociedad. De acuerdo
con la fuente, Chacho dirá que la crisis es más amplia y
profunda y que el Gobierno no podrá recuperar crédito social
si no imprime un tono nuevo y dinámico a la gestión.
Es un resumen del pensamiento político de Chacho, definió
un dirigente frepasista cercano al ex vice, quien se encontrará
con De la Rúa en breve (ver aparte). Antes, Alvarez se comunicará
con el Presidente para fijar la fecha exacta de la cumbre y mandarle el
documento, de manera de darle tiempo de leerlo antes de que se reúnan.
Hasta ahora, en el Gobierno conocen sólo lo que ha salido en los
diarios. Hubo algunos intentos infructuosos de Federico Storani, uno de
los funcionarios de mejor relación con el Frepaso, que se comunicó
con varios diputados cercanos a Chacho para averiguar más detalles.
Sin embargo, ninguno pudo calmar su ansiedad: es que, más allá
de los grandes lineamientos, los frepasistas desconocen la letra chica
de la propuesta. A pesar de las reuniones y las consultas, Chacho mantiene
en reserva el documento final, que recién se daría a conocer
luego de que De la Rúa le dé una primera mirada.
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