Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira
KIOSCO12

Batalla verbal entre la Corte y el Gobierno por los presos del MTP

 

Diana Conti y el vocero del Presidente salieron al cruce de Julio Nazareno. Lo acusan de intentar ser apartado del caso.

 

 

Por Irina Hauser

La situación de los presos por el ataque al cuartel de La Tablada –que hoy cumplen 100 días de ayuno– desató una batalla verbal entre el Gobierno y el titular de la Corte Suprema, Julio Nazareno. La subsecretaria de Derechos Humanos, Diana Conti, acusó al ministro de hacer declaraciones con la intención de ser apartado del caso. Nazareno había asegurado el viernes que “la Corte tiene que decir que no” al recurso extraordinario presentado por el Ejecutivo para que el máximo tribunal habilite la revisión de las condenas de los 13 detenidos. El vocero del presidente Fernando de la Rúa, Ricardo Ostuni, también replicó que “la intención del Gobierno de ninguna manera es judicializar” el conflicto.
Ante el fracaso de las gestiones en el Congreso para lograr la reforma legal necesaria para allanar la segunda instancia para los presos de La Tablada y dada la gravedad de la huelga de hambre que vienen cumpliendo, De la Rúa firmó el jueves un decreto para que el procurador del Tesoro, Ernesto Marcer, llevara un recurso ante la Justicia. La presentación fue hecha ayer en la Cámara de Casación Penal y tiene como objetivo que la “Corte, como órgano supremo de uno de los poderes del Gobierno Federal” aplique “los tratados internacionales” y cumplir con las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que prevén la posibilidad de recurrir un fallo “ante juez o tribunal superior”. Si los supremos no dan ese paso, dice el texto, “podría implicar responsabilidad de la Nación frente a la comunidad internacional”.
El planteo del Ejecutivo, conocido la semana pasada, llevó al presidente de la Corte a explayarse sobre el asunto. “Hay una tendencia a judicializar temas que son de competencia política y a politizar temas que son judiciales”, teorizó. “No lo resuelve la Cámara de Diputados, no lo resuelve el Congreso, no lo resuelve el Ejecutivo. Bueno, entonces vamos allá (a la Corte)”, dijo irónicamente.
Las apreciaciones del riojano y el anticipo de su postura irritaron a los funcionarios gubernamentales. “La intención del Gobierno de ninguna manera es judicializar un tema político sino aclarar cuáles son los alcances de una norma constitucional”, dijo Ostuni. Y cargó la responsabilidad sobre el bloque justicialista que, dijo, “si hubiese accedido a tratar el tema (en el Congreso) esto hubiera sido más sencillo y tendríamos una solución”. Conti fue aún más tajante: “Mi punto de vista es absolutamente opuesto al del doctor Nazareno; sin duda ha hecho esta manifestación para ser apartado del caso”, disparó. “El sabe que está prejuzgando y, aun así, prejuzga equivocadamente. “La Corte Suprema -sostuvo– aunque sea un tribunal judicial debe atender cuestiones de urgencia como ésta (...) La Justicia no puede ser apolítica”, completó.
El 23 de noviembre la Sala II de la Cámara de Casación Penal rechazó el planteo de los presos del MTP para que se reconsideran sus condenas, impuestas bajo la Ley de Defensa de la Democracia, que no prevé instancia de revisión. El tribunal argumentó que no hay norma que lo faculte a conceder ese beneficio. El Gobierno dice que quiere cumplir con los pactos internacionales y las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Por eso la presentación de Marcer critica el fallo de Casación (ver aparte). Los detenidos expresaron en un comunicado que todos los movimientos son “un dilatorio y peligroso juego” del Ejecutivo. “El tiempo se acorta y el Presidente aún puede elegir entre cumplir con la ley o desencadenar una tragedia”, rematan.

El apoyo de Saramago
El escritor José Saramago visitará hoy a las 17 a los presos de La Tablada que están internados en el Hospital Fernández y llevan 100 días de huelga de hambre. Luego realizará una conferencia de prensa. Durante todo este año, Saramago se manifestó varias veces por la libertad de los militantes del Movimiento Todos por la Patria (MTP). El 13 de agosto último, por ejemplo, le escribió una carta al entonces ministro de Justicia Ricardo Gil Lavedra en la que pedía una solución para la situación de los presos. En marzo de este año, además, ya había enviado otra misiva, esta vez a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, exigiendo la intervención de ese organismo en el caso. Saramago ganó el Premio Nobel de Literatura en 1998. Escribió varias novelas, entre ellas El año de la muerte de Ricardo Reis (1984), El Evangelio según Jesucristo (1991) y Ensayo sobre la ceguera (1996). Nació en 1922 en Azinhaga, un pequeño pueblo de la costa de Portugal.

 

Fundamentos del recurso
El procurador del Tesoro, Ernesto Marcer, presentó finalmente ayer el recurso extraordinario destinado a que la Corte Suprema le indique a la Cámara de Casación –tal como lo hizo en la caso del líder del MTP, Enrique Gorriarán Merlo, y su mujer, Ana Sívori– que abra la segunda instancia de revisión de las condenas. La presentación califica al fallo de Casación que rechazó el pedido de los presos como “arbitrario” y lo cuestiona porque, señala, “desconoció la supremacía que tiene un tratado sobre derechos humanos con jerarquía constitucional como es la Convención Americana de Derechos Humanos (art. 75 inc. 22) sobre una norma infraconstitucional de naturaleza legal (Ley Nº 23.077)”. Para el Ejecutivo, dice el documento, el tema reviste “gravedad institucional”, lo que justifica la admisión de una instancia extraordinaria. Además, previene sobre los riesgos de “generar responsabilidad internacional al Estado Argentino”. Si los camaristas no hacen lugar al pedido, Marcer elevará un recurso de queja ante el máximo tribunal.

 

OPINION

Por Laura Bonaparte (*)

Ellos ya no se dan cuenta

Están graves. He trabajado en terapia intensiva, con pacientes terminales. Ellos no se dan cuenta de que se están muriendo. Es gravísima la situación. Estuve con Fellicetti, que creo es uno de los que está peor y otro muchacho a quien visitaba su hijo con su noviecita. El ambiente se hace pesado. La joven se desmayó y hubo que sacarla de la habitación.
Estoy desesperada. Me comuniqué con gente de La Jornada, de Estados Unidos y de aquí. Les pedí, por favor, que hicieran correr esta terrible noticia. Los muchachos, y las mujeres también, al no sentir hambre, no es que se nieguen a comer –de hecho se negaron y se niegan a tomar alimentos, ingieren nada más que líquidos–, han dejado de sentir la necesidad de alimentarse.
No se dan cuenta de lo gravísimo que están y no piensan dejar la huelga hasta que no les den la libertad que hace años la democracia les debe. Son retenidos-secuestrados, oficializados por un gobierno que expresa un sadismo increíble. Los médicos y enfermeros los atienden lo mejor que pueden. En muchos de ellos se ha producido un “achatamiento” parcial de algunas venas e inyectarlos es trabajosísimo y puede ser seguido de desvanecimiento. Las mujeres y hombres del Santojanni no están mejor. Su mirada se ha opacado. Los conocí antes, ahora parecen mirar detrás de una máscara pálida y triste. Sin embargo, ellas y ellos no aceptarán abandonar el ayuno si la libertad tan debida, tan en deuda con ellos y ellas, no les es concedida.
Usted no es Creonte, señor Presidente, ni ésta es aquella época de leyes sagradas. Usted es el doctor Fernando de la Rúa y ha sido votado para mantener un Estado de derecho.
Este grupo de hombres y mujeres están dando su vida. Créalo, piénselo y conmuévase, para que mi país, el suyo, el de ellos sea un Estado de derecho donde se respete la vida y se cumpla con los tratados internacionales.

(*) De Madres de Plaza de Mayo, Línea Fundadora.

 

PRINCIPAL