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ALVAREZ VOLVIO A HABLAR EN PUBLICO, TRAS DOS MESES DE SILENCIO
Chacho nuevamente en su territorio

Eligió para su retorno dos noticieros de televisión. Hizo profesión de fe aliancista, recorrió a vuelo de pájaro las propuestas que le hizo llegar a De la Rúa y autocriticó la acción de gobierno.

Carlos “Chacho” Alvarez volvió a hablar de su propuesta a De la Rúa.
Mientras, el Presidente la endosaba a otros miembros del gabinete.

Por Eduardo Tagliaferro

Si existían dudas acerca de la fe aliancista de Carlos “Chacho” Alvarez, quedaron despejadas cuando en su reaparición pública señaló que “la continuidad de la Alianza nunca estuvo en discusión”. A dos meses de su renuncia y luego del prolongado silencio, que lo ubicó en una virtual clandestinidad, Chacho salió a explicar públicamente, sin desmenuzar, la propuesta que el domingo pasado le envió al presidente Fernando de la Rúa.
El retorno de Chacho se fue anunciando a fuego lento desde hace dos semanas, cuando el Gobierno difundió que tendría un encuentro con su ex compañero de fórmula Fernando de la Rúa. Incluso especularon con que Chacho podría tener un rol destacado dentro del gobierno, al que había renunciado.
Pero Alvarez empezó a divulgar que llevaría una propuesta a esa cumbre. Y el Presidente comenzó a molestarse, situación que se agravó a medida que las propuestas empezaron a gotearse por los medios. Cuando Alvarez –vía el diputado Darío Alessandro– le hizo llegar su documento de cuarenta carillas el Presidente (siempre negando su enojo) lo giró a los distintos miembros del Gabinete (ver nota aparte). Un gesto elegante que implicaba, sin embargo, un modo de postergar el encuentro entre los dos.
La vuelta de Chacho a su tradicional costumbre de hacer extensas declaraciones a los medios se produjo luego de que el Presidente congelara el cónclave.
Para su rentrée Chacho eligió la televisión. Ayer concedió dos breves entrevistas a noticiosos. En ambas, sostuvo que sus propuestas “son un aporte que se complementarán con los planes que nuestro gobierno viene impulsando”. Allegados a Alvarez fueron, por estos días, constantes receptores de los reclamos que el ex vice viene realizando para “que el gobierno realice una mirada autocrítica del primer año de gestión”.
Chacho salió a explicar sus propuestas, aunque no avanzó en más detalles de los que ya había sido mencionados en los medios y que ya merecieron algunos reparos en el Gabinete. Fundamentalmente, a la división del Ministerio de Economía en dos áreas, una de Hacienda y otra de Producción. Esta idea fue cuestionada por el ministro de Economía, José Luis Machinea y también por el titular de Defensa y eterno candidateable para la cartera económica, Ricardo López Murphy.
Los tres ejes que merodeó la aparición mediática de Alvarez fueron: el crecimiento económico, la racionalización de las políticas sociales y el ajuste de la política.
Para Alvarez el Gobierno debe enfrentar una nueva etapa, en la que tiene que mostrar una fuerte voluntad de crecimiento económico. “La aventura del crecimiento” suele denominarla frente a sus allegados.
“Se trata de que el enfermo se ponga en movimiento y pueda utilizar el blindaje financiero para pasar de la terapia intensiva a la intermedia”, dijo Alvarez cuando habló de sus ideas en el terreno económico. Imagina un gobierno que impulse las inversiones y las tareas productivas. Este diario pudo saber que el documento presentado a De la Rúa, si bien no abunda en materia tributaria, tiene dos grandes propuestas: simplificar la política impositiva y desgravar algunas cargas que castigan a la castigada clase media.
La racionalización de los planes sociales, otro de los items sobre los que se explayó Alvarez, se impulsaría con la centralización de los mismos en una agencia estatal. “Se trata de terminar con cualquier forma de clientelismo político”, afirmó Alvarez al referirse a los planes sociales. Antes de explicar las tres áreas por las que discurren sus iniciativas, Chacho tuvo que dejar en claro su posición sobre el futuro de la coalición de gobierno. “La Alianza es un instrumento que le hemos dado a la gente”, explicó Chacho a la hora de fundamentar su continuidad dentro de las filas gubernamentales. “Habrá quienes apuesten a su fracaso, pero la gente quiere que nos vaya bien en los tres años que quedan de mandato”, continuóAlvarez, enfatizando la primera persona del plural, como que para no quedaran dudas de su pertenencia.
El retorno de Chacho se produce cuando las preguntas “¿Hacia dónde vamos?” y “¿continuamos en la Alianza?” son moneda corriente de militantes, dirigentes y aún funcionarios del Frepaso, que esperaban su palabra tanto como el propio Gobierno. Una palabra que, contra lo que fue su estilo durante una década, Chacho había optado por retacear durante dos meses.

 

Todo el Frente el viernes

“Sí, siempre estoy volviendo”, decía Aníbal Troilo para responderles a quienes decían que se fue de su barrio. Ayer Chacho volvió a la Alianza y el viernes que viene continuará su retorno. En este caso, al Frente Grande. Será cuando en un virtual “plenario federal” se reúnan los miembros de las mesa nacional de la agrupación, junto a las autoridades frentistas en las provincias y las autoridades legislativas nacionales y provinciales. El cónclave se realizará en la Fundación Encuentro, el mismo lugar en el que Chacho festejó su cumpleaños número cincuenta. La reunión tendrá similares características a las mantenidas con los legisladores nacionales y los funcionarios del Ejecutivo. La introducción será de Alvarez y luego habrá debate.

 

CAVALLO BANCO LA CONVERTIBILIDAD
“Es el mejor sistema”

Domingo Cavallo opinó ayer que la convertibilidad es “el mejor sistema que podemos tener en este momento” y sostuvo que devaluar el peso sería una suerte de “escapismo” de la actual crisis económica.
El ex ministro de Economía consideró que la solución a lo que calificó como una “recesión devenida en depresión” no pasa por una modificación al régimen monetario, sino por darles un “fuerte aliento a las inversiones”. También aportó una idea: “Devolverles a los empresarios el capital que adelantaron como impuestos a las inversiones”.
Cavallo admitió que si tuviéramos “una moneda convertible por cualquier otra, y además flotante, probablemente se hubiera devaluado un poco y eso hubiera ayudado”, pero no se pronunció a favor de abandonar el sistema que implementó siendo ministro. “Esa situación –explicó– se va a dar en 10 o 15 años, cuando tengamos una moneda confiable y creíble.”
Frente a un auditorio integrado por unos 600 directivos de Pymes –reunidos para el lanzamiento de la web del Nuevo Banco Industrial de Azul–, Cavallo evaluó que el Gobierno “debe minimizar las trabas que plantean riesgos en la decisión de invertir”. También destacó que “no hay que tirar de a poquito, hay que pegar un sacudón para salir de esta situación” y fue entonces que propuso devolverles a los empresarios “el capital que perdieron por pagar por adelantado los impuestos a las inversiones”.

 

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