El gabinete nacional difundió ayer el proyecto de decreto para
vetar varios artículos de la Ley de Presupuesto Nacional. El texto,
básicamente argumental, destina el grueso de los párrafos
a explicar las razones para eliminar los dos puntos que a ojos de José
Luis Machinea resultaban más irritantes: el que prevé recomponer
los salarios estatales bajo ciertas condiciones y el que faculta a las
provincias a disponer íntegramente de lo que recaude el Fondo del
Tabaco, que el año próximo podría nutrirse con más
de 200 millones de pesos.
Según había dispuesto el Congreso, aquellas reparticiones
que durante el próximo ejercicio consiguieran achicar sus gastos
de funcionamiento o incrementen algunos recursos propios (incluidas donaciones),
podrían destinar los mismos a recomponer los salarios de su personal,
comenzando por los sueldos más bajos. Si bien este añadido
corresponde al Senado, los diputados aliancistas intentaron infructuosamente
incluir una clásula similar en un artículo eliminado, el
que disponía las pautas para realizar la reforma del Estado.
Pero Economía y Jefatura derrocharon argumentos contra aquella
posible prerrogativa de los estatales cuyos sueldos fueron reducidos entre
el 12 y el 15 por ciento a mediados de año. Según el proyecto
de decreto de los vetos, la objetada cláusula podría impulsar
reducciones de gastos que resulten imprescindibles para el normal cumplimiento
de las funciones de cada repartición; muchos organismos que
ya ajustaron sus estructuras en el 2000 se verían en desigualdad
de condiciones frente a otros que aún no hicieron ese recorte de
gastos; un aumento por esta vía desincentivaría a los empleados
que esperan un mejora por méritos profesionales, entre otros argumentos.
Durante el 2001 no hay ninguna posibilidad de recomponer los salarios
públicos, descartó por la mañana el ministro
de Economía. El Gobierno enviará al Parlamento un proyecto
de ley que reproducirá el artículo que Diputados eliminó
del Presupuesto, donde se fijaban las pautas para una reforma del Estado.
Entre éstas, se estipulaba expresamente la movilidad funcional
de los agentes públicos pero en ningún lugar se hablaba
de mejora salarial ligada a la nueva función.
El otro gran veto del Ejecutivo recaerá sobre el artículo
que pretende reservar para las provincias tabacaleras la totalidad de
lo que se recaude por el Fondo del Tabaco, impidiendo que Economía
pueda mantener como indisponible algo más de 77 millones
de pesos, que ayudarían a achicar el déficit.
La propuesta original del Palacio de Hacienda preveía que de 207
millones presupuestados para el año próximo, las provincias
involucradas capturasen 119,2 millones. Pero los cambios introducidos
en ambas Cámaras no sólo elevaron este monto a 186 millones,
sino que impidieron que el remanente pudiera quedar indisponible. Al mismo
tiempo, se eliminó la exigencia al Poder Ejecutivo de presentar
un nuevo régimen de distribución del Fondo. Actualmente,
la mayor parte de los recursos son capturados por los grandes productores.
Se consideró especialmente el hecho de que el actual régimen,
al basarse en el valor de la producción tabacalera, concentra en
Jujuy y Salta el 60 por ciento de la recaudación, a pesar de que
los productores de ambas provincias sólo representan el 7,3 por
ciento del total de los 24.010 productores, consigna el proyecto
difundido ayer.
Entre otros varios vetos adicionales, el Poder Ejecutivo también
frustrará la pretensión parlamentaria de que el resultado
de la venta de inmuebles de la Fuerzas Armadas, hasta la suma de 260,5
millones de pesos, sea destinado al equipamiento militar, incluidas las
fuerzas de seguridad. Constituye un incremento del déficit
incompatible con las metas fijadas, argumenta el texto.
Por acuerdo general de ministros, además, se prevé modificar
el criterio por el cual el Congreso dispuso repartir los 25 millones de
pesos destinados a pensiones graciables en el ejercicio 2001. Los legisladores
decidieron que esos fondos se prorrateen según el número
de miembros de cada Cámara. Para Machinea y Chrystian Colombo,
jefe de Gabinete, ese reparto debe respetar la demanda social
de ese beneficio, que diputados y senadores otorgan según su arbitrio.
BALANCE
DE JOSE LUIS MACHINEA SOBRE EL 2000
Lo mejor y lo peor del año
Lo mejor del año: el
blindaje financiero. Lo peor: no conseguimos revertir la sensación
de pesimismo de inversores y consumidores, que conspiró contra
la posibilidad de reactivar la economía. Para José
Luis Machinea, el último día hábil de 2000 sirvió
también para trazar el balance anual. Y para difundir una cuota
de optimismo para lo que viene, intentando dar una vuelta de página
en lo que el propio ministro definió como fallas en la comunicación
oficial. La economía crecerá 4 o 5 por ciento anual,
en promedio, en los próximos años, vaticinó.
Machinea aprovechó la mañana de ayer para salir por varias
radios tirando buenas ondas para el 2001. No obstante, no pudo ocultar
que termina el año cansado. Fue difícil
para todos, dijo. Además, reveló que no piensa tomarse
vacaciones, más allá de estos tres días festivos
que los pasará en familia, en el campo de un amigo marplatense,
y de alguna escapadita a Puerto Madryn, donde tiene familiares y amigos,
durante un fin de semana largo. De hecho, Machinea ya tiene pasaje para
el próximo lunes 15 con destino a Europa y Nueva York, hacia donde
viajará para explicar las bondades del blindaje ante inversores
extranjeros.
El blindaje abre una nueva oportunidad porque reduce fuertemente
la incertidumbre en la Argentina, insistió el ministro. Y
apostó, tal como lo viene haciendo desde que se anunció,
a que el socorro financiero ayudará a dar vuelta esa sensación
de pesimismo que caracterizó al año que hoy se va.
Machinea dejó en claro que aguarda un contexto internacional más
amigable para el nuevo año: tasa de interés descendente
en los Estados Unidos, revalorización del euro frente al dólar
(que implicaría una mayor competitividad de la Argentina), incrementos
en los precios de los granos que se exportan y la economía brasileña
confirmando su fuerte expansión.
En su rally por el éter, el ministro dejó otras definiciones.
Ambición. Mi objetivo
es el 2003. Quisiera colaborar con Fernando de la Rúa hasta entonces.
Impuestos I. No habrá
cambios muy grandes ni dramáticos en la reforma impositiva. Lo
prioritario es seguir eliminando impuestos distorsivos.
Relaciones. Hay gente
que me dice: fuerza, no afloje. Otros no me dicen nada. Desde
que asumí, nadie me ha insultado, lo cual no quiere decir que la
gente no tenga bronca.
Desempleo. Bajar la tasa
de desocupación es el objetivo central del Gobierno. Y, con la
economía en expansión, va a empezar a disminuir la cantidad
de gente sin trabajo.
Domingo Cavallo. Es un
poco exagerado cuando dice que vamos a crecer 10 por ciento. Ha colaborado
con el Gobierno, pero de ahí a que forme parte es otra cuestión.
Impuestos II. Nadie en
el Gobierno está pensando en un impuesto a los plazos fijos de
las personas.
Reactivación. Vendrá
por la rebaja de impuestos distorsivos, las inversiones en infraestructura
y los 4500 millones que van a llegar al sector de las telecomunicaciones
como resultado de la desregulación.
Impuestos III. En la
medida que la economía crezca por arriba de lo presupuestado, o
tengamos éxito en la lucha contra la evasión, habrá
reducción de algunas alícuotas.
Jorge Kogan. Por ahora,
no tengo previsto que se vaya el secretario de Transportes.
Periplo para vender
el canje
José Luis Machinea emprenderá el próximo
lunes 15 una gira por Europa y los Estados Unidos para seducir a
los inversores sobre el canje de deuda que la Argentina realizará
como parte del blindaje. El acuerdo con el FMI fija que Economía
tendrá que cambiar títulos de deuda con vencimientos
de corto plazo (Bontes y bonos Brady) por otros de largo por un
total de 7000 millones de dólares. Vamos a exponer
internacionalmente los alcances del blindaje, señaló
ayer Daniel Marx, secretario de Finanzas, quien acompañará
a Machinea en el periplo. El canje de títulos tiene por objetivo
descomprimir los vencimientos de deuda y, de esa manera, dar certidumbre
a los financistas de que la Argentina podrá cumplir con sus
compromisos. Por otra parte, la intención de Economía
es rescatar las garantías que tienen los Brady y así
dotar de mayor liquidez al Tesoro. El lado negativo del intercambio
es que, por lo general, los inversores aceptan trocar los títulos
en caso de que las nuevas emisiones les garantice una mayor rentabilidad.
|
|