La masacre de Luján, donde se encontraron los cuatro cuerpos de una familia enterrados en un pozo ciego, puede comenzar a desenmarañarse a partir del arresto de un hombre sospechado de ser el autor del cuádruple crimen. El detenido es Sergio Santillán, de 24 años, quien fue concubino de la hermana de la mujer asesinada y padre de su hijo, además de haber sido amigo íntimo del matrimonio al que, según sospechan los investigadores, él mismo habría matado. La hipótesis que comenzó a cobrar más fuerza en las últimas horas es la de un crimen pasional, a partir de la presunción de que la beba de ocho meses abandonada en un descampado �y única sobreviviente de la familia� también podría ser hija de Santillán.
En el fondo de su casa en Luján, metidos dentro de un pozo ciego, fueron encontrados los cuatro cadáveres de una familia: Mario Zarnic, de 31 años, su esposa Viviana Reposi, de 32, y sus hijos Esteban y Julián, de 9 y 8 años, respectivamente, todos uruguayos. El múltiple crimen fue realizado con un pico, que fue encontrado dentro del pozo, junto a los cuatro cuerpos en avanzado estado de descomposición. La familia hacía un mes que estaba desaparecida, con la excepción de la hija menor, una beba de 8 meses, que fue hallada el 2 de diciembre en la localidad vecina de Open Door. Esta, la niña que, se sospecha, también sería hija del detenido.
Sergio Santillán fue arrestado ayer a la madrugada en su casa, también en Luján, donde se hallaron electrodomésticos que pertenecían a la familia asesinada. La principal sospecha en su contra fue que había sido visto con el Ford Taunus azul de las víctimas días después de que desaparecieran.
�Si Santillán es el autor de los crímenes y si es cierta su paternidad sobre la niña se explica por qué no mató también a la beba�, explicó una fuente de la División Homicidios consultada.
Otra de las líneas que se analizan es la que sostiene que los crímenes pudieron ser realizados por el sospechoso para quedarse con la propiedad en la que vivían los Zarnic y con sus pertenencias y electrodomésticos. Ese inmueble valuado en 60 mil dólares era un terreno fiscal y según trascendió Santillán instruyó a su madre (Zulema Fernández, que no está vinculada con la causa) para que iniciara trámites en la Municipalidad local para quedarse con la propiedad. Santillán le dijo a su madre que ocupara la vivienda para cuidarla porque los Zarnic habían tenido que huir hacia Uruguay porque �habían hecho un mal trabajo�. Además, le explicó a su madre que por ese motivo él había comprado su automóvil y los electrodomésticos, aunque después al ser detenido se desdijo y contó que el matrimonio le había regalado todo antes de partir. Esto llamó la atención de los investigadores que dijeron que el detenido incurrió en �equívocos, mentiras y contradicciones�.
El primer estudio psicológico efectuado al detenido reflejó que el hombre �tiene una personalidad extraña con rasgos psicopáticos y que demuestra haber tenido un pasado de maltrato familiar�, afirmó una fuente judicial.
Las otras dos hipótesis que barajan los investigadores son: una venganza por cuestiones relativas al trabajo de curanderos del matrimonio muerto o un crimen por intereses económicos. La familia fue vista por última vez el 2 de diciembre pasado. La beba fue hallada en un descampado cercano al río Luján al día siguiente, y los cadáveres del matrimonio y de los dos chicos fueron descubiertos el viernes en los fondos de la casa que ocupaban en Luján, que, a partir de las primeras pericias realizadas, llevaban un mes de muertos.
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