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Por
Carlos Rodríguez
 La
muerte de un chico de 12 años, afectado por una meningitis, provocó
un escándalo en la colonia de vacaciones del Club Platense –a
la que concurría el niño–, a raíz de una denuncia
según la cual la enfermedad se habría transmitido por falta
de higiene en la pileta de la entidad, utilizada por cerca de 200 menores.
El temor por un contagio masivo llevó al club a realizar una reunión
abierta a la prensa, de la que participaron más de cien padres
de los chicos que concurren a la colonia. Allí, la directora de
Epidemiología de la Municipalidad de Vicente López, Liliana
Guinzburg, descartó que el agua del natatorio haya sido el vehículo
del contagio y explicó que el niño Lucas Malalel murió
como consecuencia de una “meningococcemia de efecto fulminante”.
Ese tipo de meningitis se transmite “únicamente por contacto
directo, mediante la saliva, al toser o al estornudar” y en nombre
del municipio expresó su “total respaldo” a las autoridades
del club, postura que también adoptaron –a pesar del duelo–
los padres del chico fallecido.
“Las piletas del club están siempre limpias y no tenemos nada
que declarar en contra del club”, dijeron Ana y José Carlos,
los padres de Lucas, quienes concurrieron a la sede de Platense, en Vicente
López, para hacer la aclaración. Dejaron una nota firmada
de respaldo al presidente de Platense, Juan Carlos Majluf, quien horas
antes había sido agredido por un ex médico de la institución,
Oscar Hernández, quien fue despedido hace un año.
Hernández abrió la polémica cuando aseguró
que no tenía “ninguna duda” de que “el contagio
fue en el club”. Sostuvo, sin aportar pruebas documentales, que un
año atrás había elevado varias notas denunciando
que el natatorio “no estaba en condiciones” de salubridad y
que en esas circunstancias lo dejaron cesante. Majluf replicó que
Hernández hablaba “por despecho” ya que había
sido despedido “por su conducta irregular y agresiva con las mujeres”.
En una nota frente a la sede del club, Majluf llegó a decir que
Hernández es “un desequilibrado”. Los conceptos fueron
escuchados por el médico, presente en el lugar, quien por toda
respuesta le aplicó varios golpes de puño al presidente
de Platense, quien cayó al suelo. El nivel de virulencia de la
polémica llevó a las autoridades del club a realizar una
reunión con los padres. José Deslarmes, director de la colonia,
aclaró que el chico tuvo los primeros síntomas de la enfermedad
en la tarde del sábado, en su domicilio y no en el club, como había
asegurado Hernández.
El responsable de la colonia afirmó que cuando tuvieron conocimiento
del deceso, en la tarde del domingo, de inmediato informaron “a todos
los padres de los 200 chicos que concurren a la colonia y se tomaron todas
las precauciones necesaria”. Guinzburg confirmó que “el
agua de la pileta no puede haber sido la vía de contagio porque
el meningococo sólo vive en el organismo de la persona que lo transmite
y muere al tomar contacto con el medio ambiente”. Como el vehículo
es la saliva, se recomendó a los padres suministrar a todos los
chicos, “bajo prescripción médica y sólo a manera
de prevención”, un antibiótico. “Es posible que
quien haya transmitido la enfermedad a Lucas tenga el virus sin estar
enfermo y que puede transmitirlo”. “El plazo de contagio es
de 72 horas como máximo” y ya se cumplió ayer.
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