Por Roque Casciero

La excepcional cantante tucumana Mercedes Sosa inauguró anoche en Parque Sarmiento el ciclo de recitales y actividades gratuitas Verano Buenos Aires ante una concurrencia multitudinaria que festejó su renovado repertorio, en el que convivieron clásicos como “María, María” de Milton Nascimento y “Gracias a la vida” de Violeta Parra, con raras perlas como “La belleza” de Luis Eduardo Aute, “Niño silvestre” de Joan Manuel Serrat y “El problema”, de Silvio Rodríguez. La tucumana ofreció, sobre un escenario impresionante, una veintena de canciones que fueron seguidas con fervor casi religioso por la multitud que había llegado hasta el Parque, ubicado en Balbín y General Paz, en el barrio de Saavedra. Según el entusiasmo de los organizadores, que aumentaba según transcurría la velada, la cantidad de público presente variaba de 35 mil a 50 mil personas. Hoy (ver aparte) el ciclo sigue con Sui Generis.
Antes del notable show de Sosa, el público que se acercó al centro de recreación se encontró con la sorpresa de un recital no anunciado de Peteco Carabajal. El músico santiagueño llevó a cabo así un petit adelanto de su nuevo disco, con canciones como “San Cayetano”, antes de cerrar con dos clásicos de su repertorio, “La estrella azul” y “Entre a mi pago sin golpear”. A esa hora, el jefe y la vicejefa del Gobierno porteño, Aníbal Ibarra y Cecilia Felgueras, habían recorrido el vasto predio, con capacidad para 100 mil personas. Buena parte de la asistencia, sobre todo los mayores de 40, concurría al lugar con sillas en mano, una costumbre cada vez más generalizada en los espectáculos veraniegos al aire libre. La conducta del público fue concurrir directamente sobre la hora del recital de Sosa, que comenzó a las 23, obviando, en general, la propuesta organizativa de asistencia a los espectáculos previos, que transcurrían en otros escenarios. En virtud de eso, los shows que en los escenarios 1 y 2 del parque brindaron previamente el solista Adrián Paoletti, el violinista electrónico Sami Abadi y el interesante grupo alternativo Suárez fueron vistos por menos de quinientos espectadores cada uno.
En el refaccionado predio del Parque Sarmiento, propiedad del Gobierno de la ciudad –usado hace un par de temporadas como sitio alternativo para grandes shows de rock, cuando Obras estaba cerrado–, se han instalado varios puestos de comida, que tenían anoche un precio uniforme y barato para este tipo de circunstancias: 1 peso los panchos, el helado y las gaseosas, 2 las hamburguesas. Además, desde el momento en que anocheció, en un costado del predio se proyectaban films, aunque el público prefería buscar las mejores ubicaciones posibles con vistas al plato fuerte, el recital de Mercedes. Una vez que éste comenzó, ya casi nadie compraba tentenpiés.

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