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Por José
Natanson
 El clima electoral que de a
poco se va instalando en el oficialismo no sólo lleva a los funcionarios
a elucubrar candidaturas, planificar estrategias y encargar encuestas:
el Gobierno decidió que este año el presupuesto de publicidad
no bajará de los 14 millones de pesos, según confió
a Página/12 una alta fuente de la Casa Rosada. La cifra es superior
a los 4 millones que se gastaron el año pasado pero bastante más
chica que la de algunas provincias gobernadas por el PJ. De todos modos,
ya hay planes para aprovechar los nuevos recursos: en los próximos
meses, el Gobierno desplegará una campaña para subrayar
el nuevo clima económico conseguido a partir del blindaje, otra
que explicará el plan de infraestructura y una tercera sobre la
gestión educativa.
Acostumbrados a los millonarios gastos de campaña, los integrantes
del equipo de comunicación de Fernando de la Rúa se quejaron
durante todo el año pasado por la escasez de fondos para propaganda
estatal. “Así no se puede”, protestaban Darío
Lopérfido y Antonio de la Rúa. Es más: como anticipó
este diario en noviembre pasado, éste fue –junto al romance
con Shakira– uno de los motivos que llevaron al hijo del Presidente
a decidir que no participará de la próxima campaña
de la Alianza.
La situación ha cambiado. El blindaje financiero le permitió
al Gobierno flexibilizar las metas del déficit fiscal y estirar
los presupuestos de algunas áreas. Además, la Secretaría
de Cultura y Comunicación, de la que depende la propaganda oficial,
confía en que la creación del multimedios del Estado programada
para este año ayudará a ahorrar recursos para ampliar las
partidas publicitarias.
Pero es fundamentalmente el cambio de clima político lo que llevó
a ampliar los gastos de publicidad, que llegarían a 17 millones
de pesos. Aunque aún faltan nueve meses para los comicios de octubre,
el Gobierno es consciente de su debilidad: las encuestas marcan una baja
astronómica de la imagen del Presidente y una evaluación
negativa de su gestión.
Las expectativas de la Alianza están depositadas en el nuevo escenario
económico: según creen en la Rosada, el blindaje, la baja
de las tasas de interés, el plan de infraestructura y la futura
reforma impositiva contribuirán a quebrar la curva recesiva. En
marzo –se esperanzan los funcionarios– comenzará a notarse
una leve mejora del panorama que ayudará a modificar el (mal)humor
social.
El tiempo acorta los plazos. Un secretario de Estado con acceso cotidiano
al despacho de De la Rúa explicó que la idea es apuntalar
la situación con un mayor despliegue publicitario. Algo de esto
ya está ocurriendo: en los días siguientes al anuncio del
blindaje, el Gobierno desplegó una campaña publicitaria
en televisión, vía pública y diarios recalcando la
“oportunidad” creada por el reaseguro financiero.
Salió bastante barata: los spots televisivos se pusieron en el
aire aprovechando multas que los diferentes canales acumulaban con el
Comfer. El Gobierno cobró las deudas usando segundos publicitarios
y el costado televisivo de la campaña –por lejos el más
caro de todos– terminó saliendo gratis.
Durante este año, el Gobierno se dedicará a publicitar algunos
aspectos de la gestión. Las primeras campañas serán
las siguientes:
 Una, en la misma línea
que la última, buscará subrayar las ventajas del nuevo clima
económico. “La gente ya sabe que conseguimos el blindaje,
pero todavía falta explicar mejor para qué sirve”,
dijo uno de los integrantes del equipo de comunicación.
Otra campaña describirá
el Plan de Infraestructura que De la Rúa sacó por decreto
en el último día hábil del año pasado. “Consideramos
que el plan ya está vendido, pero creemos que la gente no sabe
del todo de qué se trata. El objetivo es explicar por qué
va a contribuir el crecimiento y cómo puede afectar positivamente
la vida cotidiana de mucha gente en diferentes puntos del país”,
indicaron en el Gobierno.
La tercera apuntará
a subrayar la gestión educativa de la Alianza. Según aseguran
en el Gobierno, el año pasado hubo algunos éxitos en el
área que no lucieron como debían: el levantamiento de la
Carpa Blanca (luego de que se destinarán 600 millones de pesos
extra para mejorar el salario docente) y la lógica disminución
de los conflictos gremiales, que convirtió al 2000 en un año
con más días de clases que lo habitual. También se
promocionará el portal educ.ar, que el Gobierno presentó
esta semana.
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