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El comisario habló y la Boca explotó. “El 27 por ciento
de los habitantes de la Boca son delincuentes”, dijo Roberto Casanova,
titular de la seccional con jurisdicción en ese barrio porteño,
con una exactitud llamativa. No sólo eso: aseguró que los
porcentajes podrían aumentar porque está llegando gente
“proveniente de Fuerte Apache”. Los datos fueron difundidos
en un comunicado del diputado Daniel Scioli, quien organizó el
encuentro. “Son cifras exactas, basadas en un sistema de cómputos
–se defendió Casanova en declaraciones radiales–. Estamos
hablando de arriba de veinte mil personas con antecedentes.” La reacción
de los vecinos por el comentario no se hizo esperar: las radios fueron
inundadas de llamados de indignados boquenses. Rubén Granada, presidente
del Museo Histórico de la Boca, se quejó ante este diario
“por ponernos a todos en la misma bolsa y tratarnos de delincuentes
a los habitantes del barrio”.
En una reunión en la parroquia San Juan Evangelista, organizada
por el diputado nacional Daniel Scioli “para prevenir y combatir
el delito” –según explicó a Página/12 el
propio diputado–, el comisario Casanova, de la Seccional 24ª,
hizo públicas sus propias estadísticas sobre el porcentaje
de “delincuentes” que viven en la Boca. José Palmioti,
actual diputado porteño por la Alianza, y ex delegado comunal del
barrio, consideró que “haber tirado semejante bomba fuera
de lugar fue una falta total de respeto para la gente. Esa estadística
es una barbaridad. Si ese comisario sabe con exactitud cuántos
delincuentes hay en el barrio, ¿por qué no dice quiénes
son y dónde viven y va y los mete presos?”, se preguntó
Palmioti.
Página/12 intentó en vano comunicarse con Casanova para
profundizar sobre los datos vertidos, pero no fue posible: se pasó
todo el día de ayer “de reunión en reunión”,
informaron en la comisaría. Ante una radio, el comisario agregó
que el porcentaje puede aumentar en un futuro no muy lejano, porque “se
están sumando nuevos ocupantes provenientes de Fuerte Apache”,
lo que para él pareciera ser un motivo más de preocupación:
“Vienen tiempos difíciles para la Boca”, aventuró.
Consultado por estas declaraciones, Scioli aclaró que en la reunión
mantenida con los vecinos “ellos hablaron de su preocupación
por el tema de la seguridad”. Sobre los comentarios del comisario,
el diputado se atajó: “Que él se haga cargo de lo que
dijo sobre el índice de delincuentes y lo de Fuerte Apache”.
Sin embargo, el comunicado enviado a los medios por el diputado justicialista
está encabezado con las precisiones vertidas por Casanova.
Rubén Granada, que también es el presidente de la organización
vecinal La República de la Boca, se jacta de conocer su barrio,
y cuenta, orgulloso, que pertenece a la cuarta generación de su
familia que vive allí. La explicación que él le encuentra
a este episodio de declaraciones “poco felices”, es que “Scioli
promete seguridad y el comisario dijo esto para dar un golpe de efecto.
A la gente le molestó mucho ese comentario y aparte da una imagen
del barrio que no corresponde. No se puede pensar que esto es tierra de
nadie”, se indignó.
Juan Carlos, otro de los vecinos ofendidos por el comentario de Casanova,
avanzó en el análisis de la situación: “Quieren
arrasar con la Boca porque es un barrio en el que vive mucha gente desocupada,
indigente e indocumentada, como si esto fuera igual a delincuencia. Yo
no digo que acá sea más seguro que en otros lugares, la
verdad es que te pueden robar en cualquier lado”.
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