Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira
ESPACIO PUBLICITARIO


Una chica que parece real, pero es mentira

Eva salió de una computadora, pero a diferencia de otros personajes virtuales ella parece un ser real. Ahora busca trabajo como actriz o como presentadora.

Eva Laura Solal tiene
22 años, pero acaba de nacer.
Sin embargo, ya tiene documento y un currículum artístico.

Por Eduardo Febbro
Desde París

Con sus apenas 22 años y una carrera recién empezada, Eva Laura Solal es ya una figura mundial. Su infancia, sus gustos, su carácter y los trabajos que realizó hasta hoy figuran en el escueto curriculum vitae que su agente distribuye en las agencias de actrices. Desde hace muy poco, Eva Laura busca trabajo como actriz de cine, presentadora de televisión o animadora de un portal de Internet. Sus padres son casi tan jóvenes como ella, pero a ambos los distingue una diferencia. “Ellos”, que tienen entre 24 y 30 años, son humanos y trabajan en Attitude Studio. Eva, al igual que la cantante japonesa Kyoto Date, es una persona virtual, exclusivamente salida de las computadoras de Attitude Studio. Por medio de la captura del movimiento en 3D, esta empresa francesa logró crear una verdadera “persona” muy por encima de los otros “personajes virtuales” que existen desde hace 5 años.
“Linda, motivada, dinámica y mujer de terreno, estoy dispuesta a ir a donde sea”, dice Eva Laura Solal en la “carta de motivación” que envía a sus posibles empleadores. Eva tiene muy poco que ver con Lara Croft, la heroína del juego Tomb Raider, y mucho menos aún con Ananova, la primera presentadora “artificial” de informaciones en la televisión. El personaje virtual creado por Attitude Studio posee cualidades de un realismo lo suficientemente agudo como para que los espectadores “caigan bajo su embrujo”, según afirma Marc Viance, el joven director de Attitude Studio. Si se compara a Eva con la cantante virtual Kyoto Date o con Ananova, la diferencia es espeluznante. Mientras Kyoto, Ananova o Lara Croft “padecen” de todos los males de la virtualidad, Eva se asemeja vertiginosamente a una persona real. Como lo explica Marc Viance, “Ananova sólo existe en Internet, se la ve únicamente espaldas hacia arriba y posee sólo dos modelos de boca. En cuanto a Lara Croft, este personaje evoluciona exclusivamente en escenas de combate o de acción, sin gran expresividad en el rostro. Eva es diferente”.
Viance no exagera. Para llegar a un resultado semejante y dotar a la “criatura” de emociones humanas y personalidad, así como capacidades que le permiten evolucionar sea en un decorado artificial, sea en uno “real” y rodeada de seres auténticos, la empresa francesa fundió su tecnología en la digitalización en tres dimensiones del cuerpo y el rostro de una actriz “de carne y hueso”. Algunos movimientos resultan más complejos y requieren por lo tanto técnicas todavía más sofisticadas. Es el caso de las manos y el rostro. Para las primeras se utilizó una batería de 22 magnetorresistencias ubicadas en un guante. Sensibles a la más ínfima presión de los dedos, esos captores transmiten a la computadora señales eléctricas. En cuanto al rostro, de una complejidad mil veces superior para lograr las expresiones más sutiles, Attitude Studio captó los desplazamientos de cada músculo mediante el análisis directo de imágenes de video y de un programa elaborado por la empresa, Emotion Mapper.
Una vez completadas estas fases, el personaje virtual puede empezar a crearse asociando las características predefinidas de Eva con los movimientos del actor humano. Sólo queda entonces “integrar” el resultado en un decorado completo. Attitude Studio apuesta por las evoluciones futuras del cine y de los juegos para PC para darle trabajo a su criatura, tanto más cuanto que, explica Marc Viance, “es perfectamente posible realizar una suerte de doble virtual de los actores en el caso de escenas peligrosas. Al mismo tiempo, en los próximos cuatro años vamos a asistir a un incremento importante de los juegos en tres dimensiones disponibles en Internet”. El objetivo del equipo de Attitude Studio consiste “en llegar a una calidad de imagen semejante a la del cine”. A diferencia de animaciones como la de Toy Story, quienes conceptuaron a Eva Laura Solalno quieren que su personaje se limite a una mera simulación. A este respecto, Viance sostiene que “Eva puede actuar en un largometraje cinematográfico o trabajar como presentadora de televisión en un canal o en Internet. No existe similitud alguna con los personajes semejantes a los de Toy Story. Nosotros no hacemos animaciones sino que transferimos la vida”.

 

Gustos y amores de Eva
Por E.F.

Eva Laura Solal posee un DEUG francés en derecho (Diploma de Estudios universitarios generales) obtenido en la facultad de derecho de París en 1998. Según el currículum vitae “producido” para ella por sus creadores, realizó su bachillerato con una especialización en cine y audiovisual. Eva habla perfectamente inglés y hasta un “poquitito” de hindi, nociones que adquirió en el curso de un viaje iniciático a Bombay. Su carrera profesional, forzosamente modesta, comprende dos roles de figurante en la película Los destinos sentimentales de Olivier Assayas y uno en el clip “Las voces de la Libertad”, de Thierry Vernes. Además, la bella Eva se gana la vida trabajando como moza en el restaurante “Le Detour”. Según cuenta su CV, antes trabajó como asistente en varias agencias de producción.
Eva Laura Solal nació el tres de mayo de 1973 en Boulogne Billancourt, en las afueras de París. Mide 1,62 y pesa 48 kilos. Su padre, Charles, es un médico brillante y su madre, Chantal, tiene los mismos ojos de azul acero que Eva. Su primer amor, es decir, el primer beso, se le dio Damien, la primera vez que hizo el amor fue con Frédéric. La ficha de Eva no esconde ningún detalle, ni siquiera sus experiencias sexuales precoces. Vive en la Rue de Lappe, en el distrito 10 de París, y su mundo personal se sitúa en el universo de la moda y el cine. Su agente, o sea el auténtico, se llama Jacques Olivier Broner. Para que los futuros clientes no piensen que Eva existe sólo en los circuitos de las computadoras, sus conceptores la dotaron, como vemos, de una historia y de gustos definidos: le gusta el jugador de fútbol francés Zidane, Gandhi, los gatos y la película LA Confidential. Ni siquiera le falta un número de teléfono real: existe en serio y responde ella. Si alguien marca el 06-12-60-71-60, un contestador con la voz de Eva dice: “Buenos días, es el número de Eva. Déjeme un mensaje y lo volveré a llamar. Hasta pronto”.

 

LA BOCHORNOSA FIESTA DE CADETES
El disc jockey no cobra

El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Ramón Orestes Verón, señaló que su cartera no pagará por los equipos de música robados durante la bochornosa cena de graduación de los cadetes de la Escuela Vucetich porque, según declaró ayer, “tiene que haber un juicio previo que dictamine el importe y la responsabilidad por el hecho”.
El miércoles a la tarde, el disc jockey Luis Ceolato, dueño de esos equipos robados, realizó una manifestación pacífica junto a cincuenta de sus colegas frente a la Casa de la Provincia de Buenos Aires. “No hicimos nada de ruido porque, justamente, quisimos representar cómo es estar sin música”, contó Ceolato a Página/12. El lunes pasado se cumplió un mes de la fallida celebración, durante la cual cadetes y familiares dieron rienda suelta a su bronca cuando descubrieron que la cena estaba en mal estado. Santiago Fazzini, responsable de la Secretaría de Formación y Capacitación del Ministerio de Seguridad, señaló a este diario que los resultados de las actuaciones estarán listos para fines de enero. Las sanciones irán desde la expulsión de la fuerza hasta los arrestos y las suspensiones.

 

PRINCIPAL